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En el bar, el tiempo se detiene y la vida se disfruta dice un popular refrán que refleja muy bien, el ambiente festivo que hay en los bares donde las personas acuden a socializar y a olvidarse por un momento de sus preocupaciónes. Entre tanto jolgorio, al fondo y detrás de la barra se encuentra el dueño que es el responsable de crear esta atmósfera a través de la gestión de su negocio.
Seguramente, si has ido a algún bar has podido comprobar la polivalencia de estos profesionales a la hora de ofrecer sus servicios pero realmente ¿Sabes cómo llevar un bar? En este post te vamos a servir en bandeja la información que necesitas.
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Actualmente existe por parte de la población una necesidad de acudir a restaurantes de diversas temáticas convirtiendo a la restauración en algo más que un momento de ocio. Incluso, son muchas las personas que viajan a otras ciudades o países con la intención de disfrutar de ofertas gastronómicas creativas, en lo que, se conoce como turismo gastronómico. En este contexto, existen motivos suficientes para atender a esta demanda de profesionales en diferentes áreas del sector de la restauración. Si te interesa, te recomendamos que comiences tu carrera exitosa en este ámbito con el curso de encargado de bar y restaurante de Euroinnova International Online Education.
Lograr que un bar funcione es más complejo de lo que, desde fuera y como usuarios, podemos entender. Esto se debe a que, existen muchas actividades que se engloban, en lo que a gerencia de un bar se refiere, de muy diferentes características. Las negociaciones con proveedores, la confección de una oferta gastronómica apetecible, el control de los gastos o la contratación de camareros o maîtres son solo algunas de estas actividades que marcan el éxito o el fracaso en este negocio.
Al contrario, de lo que puede leerse en otros post, en este vamos a abordar qué errores a la hora de cómo llevar un bar, pueden acabar en un "mal trago".
La gestión de un bar genera en sus encargados innumerables dudas y preguntas del tipo: ¿Cómo llevar un bar y que sea rentable? ¿Qué precio deben tener las consumiciones? ¿Dónde almacenar los productos? Y un largo etcétera que puede poner hacer dudar a estos gerentes y que deben responderse para conseguir que sea rentable y próspero.
En este sentido, es necesario conocer algunos errores sobre cómo llevar un bar, para evitarlos y conseguir hacer del bar ese centro de ocio y de encuentro que apasiona a los profesionales del sector de la hostelería.
Uno de los mayores quebraderos de cabeza de quienes se aventuran a conocer cómo llevar un bar es fijar los precios. A la hora de fijar los precios, uno de los errores más comunes es fijarse en la competencia y a lo que consideran que las consumiciones deben de valer. Ahora bien, se debe tener en cuenta la estructura de costes del propio bar. Concretamente, se debe poner el foco en los costes fijos.
Así se evita perder dinero con las consumiciones cuando se ofertan por debajo de su precio de coste. Por este motivo, es fundamental formarse en gestión de contabilidad para lograr la mayor rentabilidad del negocio.
Los costes variables no son los únicos que se deben controlar a la hora de gestionar un restaurante. Y es que, los costes fijos pueden ser clave a la hora de perder o ganar dinero. A menor coste fijo, menor será también el obstáculo que se debe superar cada mes para lograr un punto de equilibiro. Es decir, con la reducción de los costes fijos, se conseguirá obtener dinero desde la primera venta.
La apertura de un bar implica invertir en un local, comprar la maquinaria necesaria y contar con un almacén donde guardar los productos. Pues bien, son muchos los gerentes que erróneamente acuden a la financiación para poder arrancar sus negocios. El problema de la financiación tiene su enfoque desde el punto de vista de añadir dos costes a los ya existentes.
Por un lado, se deberá de abonar el capital que se ha prestado y por otro, también será necesario hacer frente a los intereses que se devengan de esta financiación. Así, los costes fijos se elevan y se necesitará un mayor volumen de ventas para comenzar a obtener beneficios.
En el negocio de la restauración es común encontrar a gerentes que almacenan multitud de productos por el miedo a no contar con una amplia variedad de productos. Así, se provoca que los almacenes cuenten con un capital importante de la empresa que permanece inmovilizado, improductivo.
La rentabilidad se mide de multiplicar el producto por el margen de rotación. En este sentido, a mayor rotación del producto mayor rentabilidad. Por ejemplo, nada sirve tener una bebida que la clientela no pide o lo hace de forma residual si caduca y se debe deshacerse de ésta. Por ello, es necesario estár al corriente de las peticiones de los clientes y ofertar estos productos en consecuencia.
A la hora de aprender cómo llevar un bar es vital tomar conciencia de que la falta de profesionalización puede tener consecuencias desastrosas que pueden derivar en el cierrre del local.
El seguimiento y el control de las cantidades que se consumen, conocer el vino más rentable, los productos más solicitados, cuánto cuesta que se caiga un vaso y se rompa o determinar el número de bebidas que debe poner un camarero para que sea rentable son aspectos vitales para lograr la ansiada rentabilidad.
Finalmente cabe destacar que la gestión de un bar es una tarea compleja que requiere de un conocimiento multidisciplinar que podrás adquirir con los másteres y cursos de hostelería del catálogo formativo de Euroinnova International Online Education.
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Jesús Expósito López
COPYWRITER
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