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En lo que se refiere a las dinámicas de grupo podemos encontrar muchas diferentes y atractivas. Estas son ejercicios colectivos de diversos tipos y pueden estar dirigidas a niños, jóvenes, adultos e incluso a personas de la tercera edad. Porque claro, todas las actividades en grupo deben estar adaptadas a las edades y a las circunstancias. Por eso queremos explicarte cómo preparar una dinámica de grupo.
Es impresionante que en la actualidad se estén utilizando mucho más este tipo de mecánicas de trabajo en grupo. La finalidad de las mismas es favorecer la adaptación de las personas en diferentes entornos sociales. Las actividades de esta índole pueden ayudar a que un trabajo o incluso los estudios se lleven de mejor manera con un ambiente mucho más amigable y compenetrado, permitiendo que los participantes se conozcan y entren en confianza para llevar a cabo los objetivos que el líder o profesional haya establecido.
Una dinámica de grupo es una serie de actividades o ejercicios diseñados para fomentar la participación, colaboración y comunicación entre los miembros de un grupo. Estas dinámicas se llevan a cabo con el objetivo de promover el trabajo en equipo, fortalecer las relaciones interpersonales y mejorar el rendimiento colectivo.
El contexto de una dinámica de grupo puede variar según el entorno en el que se desarrolla. Por ejemplo, en el ámbito educativo, las dinámicas de grupo pueden utilizarse para facilitar el aprendizaje, promoviendo la participación activa de los estudiantes y fomentando la construcción de conocimiento colectivo.
En el ámbito laboral, las dinámicas de grupo pueden emplearse en procesos de selección de personal, capacitaciones o actividades de team building.
Debido a la fuerza interna y a la unión que se consigue en el grupo que realiza la dinámica se pueden adquirir las competencias cooperativas con lo que estos pueden experimentar la motivación para mejorar cada vez más entre ellos y con el trabajo en equipo.
Es sabido también que el grupo puede enfocar la atención en conseguir unas metas comunes, buenas para todos los integrantes. De esta manera se contribuye a la productividad en las dinámicas, promoviendo el trabajo de cada persona en forma individual y también como parte de una comunidad.
Además de todo esto, las dinámicas de grupo permiten que se puedan establecer relaciones y se crea una posición de liderazgo en tareas que son repartidas con importancia igualitaria, lo que significa que cada persona tendrá la misma responsabilidad que todas las demás para permitir la consecución de los objetivos propuestos. Así, las actividades de esta índole logran la participación equitativa y se logra que todos puedan entender la importancia de todas las partes.
Muestra interés y compromiso durante la dinámica. Contribuye con ideas, comparte tus conocimientos y opiniones de manera respetuosa, dejando también que el resto de participantes se exprese. Escucha atentamente a los demás participantes y demuestra habilidades de trabajo en equipo. En las dinámicas grupales siempre hay personas que llevan la batuta y otros que las siguen. No siempre hay que ir a la cabeza de todas las iniciativas, pero sí se considera muy positivo mostrar capacidad de liderazgo, especialmente si el puesto lo requiere.
Toma la iniciativa en las actividades propuestas. Pero no solo basta con participar activamente como acabamos de mencionar, sino que deberás proponer soluciones creativas y buscar oportunidades para hacer destacar tus habilidades. Expresa tus ideas de forma clara y concisa, evitando interrumpir a los demás e intenta convencer al grupo de que tus ideas son la mejor opción.
Trabaja en equipo de manera colaborativa. Fomenta la comunicación y el respeto hacia los demás participantes. Busca oportunidades para apoyar y ayudar a tus compañeros de grupo para demostrar tus habilidades para trabajar en equipo. Este es el punto más importante, ya que la mayor parte de trabajos requieren un mínimo de colaboración entre diferentes compañeros de trabajo y equipos multidisciplinares.
Cumple con los plazos establecidos en la dinámica y organiza tu tiempo de manera eficiente. No monopolices las actividades ni te quedes en silencio durante todo el proceso; lo mejor es encontrar un equilibrio entre participar activamente y permitir que los demás también se involucren. En definitiva, intenta no precipitarte en lanzar ideas demasiado pronto, ni esperes pacientemente tu momento de oro cuando no va a quedarte tiempo para desarrollar tu idea satisfactoriamente.
Es fácil perder los nervios en una situación tan tensa como una dinámica de grupo en un proceso de selección de personal. Mantén la calma y muestra confianza en ti mismo. Controla tus nervios y evita en todo momento entrar en discusiones o conflictos con otros candidatos, incluso aunque estos se muestren hostiles. Sé respetuoso y mantén una actitud positiva a lo largo de la dinámica para transmitir la sensación de que eres una persona diplomática y dialogante.
No intentes ser alguien que no eres. Un lema muy acertado es que se le pilla antes a un mentiroso que a un cojo. Muestra tu personalidad, tus fortalezas y tus habilidades de forma auténtica. Destaca tus logros y experiencias relevantes para el puesto, pero evita exagerar o mentir sobre tus capacidades.
El departamento de Recursos Humanos puede preparar e idear una dinámica de grupo como etapa dentro de un proceso de selección de personal siguiendo estos pasos:
Definir los objetivos: El primer paso es establecer los objetivos de la dinámica de grupo. ¿Qué se busca evaluar? ¿Qué competencias o habilidades se desean observar en los candidatos? Estos objetivos ayudarán a diseñar las actividades adecuadas.
Diseñar la dinámica: Una vez que se tienen claros los objetivos, se debe diseñar la dinámica en sí seleccionando las actividades, ejercicios o escenarios que permitan a los candidatos demostrar las competencias deseadas para el puesto y la empresa en cuestión.
Establecer las reglas y criterios de evaluación: Definir las reglas y el marco en el cual se llevará a cabo la dinámica, lo que incluye el tiempo asignado, la distribución de roles, las pautas de interacción, etc. Además, se deben establecer los criterios de evaluación para poder valorar el desempeño de los candidatos de manera objetiva.
Comunicar claramente a los candidatos: Es fundamental informar a los candidatos sobre la dinámica de grupo y qué se espera de ellos proporcionándoles instrucciones claras y respondiendo a sus preguntas para que puedan prepararse adecuadamente.
Facilitar la dinámica: Durante la dinámica, los profesionales de recursos humanos observarán el desempeño de los candidatos, tomarán notas y registrarán evidencias relevantes. También intervendrán si es necesario para guiar la dinámica y asegurar que todos los participantes tengan la oportunidad de contribuir.
Evaluar y tomar decisiones: Una vez finalizada la dinámica, se evaluará el desempeño de los candidatos según los criterios establecidos. Estos datos se emplearán posteriormente para tomar decisiones informadas sobre la selección de los candidatos más aptos.
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Pablo Rafael Blanco
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