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¿Estás pensando en opositar a la Administración Pública, pero crees que tu edad puede ser un problema? ¡Has llegado al sitio indicado! En muchas ocasiones, pensamos que la vida tiene unos tiempos: terminar la carrera con 22 años, empezar a trabajar, opositar antes de los 30, jubilarte como máximo con 65 años... ¿Pero qué ocurre si terminas la carrera más tarde o si te decides a opositar a los 50? Pues, realmente, nada. ¡Cada uno tiene sus tiempos y ritmos! Por eso, si te preguntas si merece la pena opositar a los 50, la respuesta rápida es que sí, siempre que busques estabilidad laboral, mejores condiciones laborales y un puesto para el resto de tu vida.
En este artículo, resolvemos tu posible duda: ¿Por qué decidirse a opositar con 50 años? ¿Realmente merece la pena? La respuesta depende de numerosos factores y de tu situación particular, pero, en la mayoría de los casos, sí merece la pena opositar a los cincuenta. ¡Siempre que busques estabilidad laboral! Sigue leyendo y descubre todos los detalles.
Es probable que alrededor de los 30 años comiences a buscar cierta estabilidad en tu vida, tanto profesional como personal. Sin embargo, esto también puede ocurrir a los 20, a los 40 o a los 50. Cada persona tiene sus ritmos y la idea de opositar puede surgir cuando se busca un trabajo con mejores condiciones, horarios más estables y fijos, y la posibilidad de una jubilación segura.
Por ello, opositar no permite únicamente conseguir un empleo, sino que facilita el acceso a una mejora en la calidad de vida que el sector público puede proporcionar.
Los 50 años pueden suponer una etapa vital en la que la persona busca un cambio en la vida laboral, con más seguridad y tranquilidad. Y, sin duda, el sector público es lo mejor para ello.
Si todavía tienes dudas, respondemos... ¿Por qué decidirse a opositar a los 50 años? Por un lado, a los 50 años, la experiencia acumulada en lo profesional y personal puede ser una ventaja para enfrentarse a los procesos selectivos. Además, se disponen de muchos más conocimientos, habilidades y competencias adquiridas a lo largo de la trayectoria profesional.
Por otro lado, la situación personal puede ser una ventaja a la hora de preparar oposiciones con 50 años. Aunque dependerá de cada caso, es posible que, a los 50, ya tengas menos cargas familiares que a los 30 o los 40. Además, la capacidad de concentración sigue siendo favorable e incluso, en muchas ocasiones, mejor que la de una persona joven.
Si quieres superar una oposición a los 50 años, debes saber que tendrás que estudiar y esforzarte tanto como una persona de 20, de 30 o de 40 años. Por eso, queremos darte algunos tips y consejos para opositar a los 50 años que te ayudarán a enfrentar el proceso con más garantías.
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Antes de decidir a qué opositar a partir de los 50 años, debes saber que existen oposiciones con límite de edad, como por ejemplo:
Como ves, las oposiciones con límite de edad suelen responder a causas físicas. En estos casos, las condiciones físicas del opositor son fundamentales y, por ello, pueden establecer dicho límite. Para el resto de oposiciones, el límite de edad para opositar es el de la edad de jubilación forzosa, es decir, los 65 años de edad.
En definitiva, si tienes dudas sobre a qué opositar a partir de los cincuenta años, debes saber que puedes opositar a todo aquello que te propongas. Además, ten en cuenta que incluso existen oposiciones cuyo límite de edad es superior a los 65 años. Es el caso de las oposiciones a juez, a fiscal y a profesores universitarios, entre otras, donde se marca una edad máxima de 70 años.
No obstante, se entiende que si decides estudiar oposiciones a los 50 años es porque buscas la máxima estabilidad y comodidad posibles. Por lo que algunas de las oposiciones recomendables a partir de los 50 pueden ser:
Obviamente, tu oposición ideal dependerá de tu vocación y de tu formación previa como profesional. Ten en cuenta, además, que las oposiciones locales y autonómicas te permitirán más facilidad para conseguir plaza en tu ciudad, mientras que las oposiciones de ámbito estatal podrían obligarte a desplazarte.
Si todavía tienes dudas acerca de opositar con 50 años o no hacerlo, quizá estos testimonios de casos de éxito pueden inspirarte.
"Después de más de 30 años trabajando en el sector privado, en concreto, en una empresa dedicada a la logística, como auxiliar administrativa, veía cómo mis condiciones laborales empeoraban. Trabajaba más horas y cobraba lo mismo -menos si tenemos en cuenta el coste de la vida-. Por eso, decidí que era hora de un cambio. Al principio dudaba si merecía la pena estudiar unas oposiciones a mi edad, pero con un plan de estudio bien organizado y haberme apuntado a una academia de oposiciones, lo conseguí".
"Estudié Derecho en Madrid y, aunque tenía un buen puesto en una Asesoría jurídica de empresas, siempre había pensado que me gustaría experimentar cómo es el trabajo en lo público. Hace cuatro años superé un cáncer y me di cuenta de la importancia del 'ahora o nunca', así que, con 50 años, empecé a estudiar mis oposiciones a Tramitación Procesal. Fue difícil adaptarme al ritmo de estudio y crearme una rutina de estudio, pero con ganas, motivación y un buen asesoramiento, lo he conseguido".
"Empecé a opositar a los 48 años. Siempre había escuchado que las Oposiciones de Correos eran las mejores en cuanto a facilidad del temario y estabilidad. Y, aunque al principio pensé que mi edad sería un obstáculo, pronto me di cuenta de que no hay un límite de edad para aprender ni para cambiar de rumbo en la vida laboral. Tres años después ya tengo mi plaza para el resto de mi vida profesional".
Como ellos, si tú también estás pensando en opositar al sector público y dejar atrás la incertidumbre del sector privado, tienes que saber que sí es posible y que sí merece la pena opositar a los 50 años. Sin embargo, debes tener en cuenta aspectos clave como contar con un buen plan de estudios, incorporar técnicas de estudio adaptadas a ti y aprovechar al máximo todos los recursos disponibles, como los cursos baremables para oposiciones. No lo dudes y tomes la decisión que tomes...
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Cristina Polo Calvo
COPYWRITER
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