Recomendaciones para calmar a una persona con demencia

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 55 millones de personas tienen demencia en todo el mundo. Se trata de una afectación que describe el deterioro cognitivo y generalizado de las personas, por lo general, de edad avanzada. Los signos y síntomas se manifiestan poco, y algunos de los más comunes son perder cosas, la sensación de estar desubicado, cambios en la personalidad o conducta inapropiada. 

Precisamente, estos y otros signos traen como consecuencia que las personas con demencia experimenten alteraciones emocionales debido a la confusión y la frustración que sienten al enfrentarse a la pérdida progresiva de sus habilidades cognitivas. En esta etapa, el acompañamiento constante y el apoyo emocional son esenciales. Si eres cuidador o cuidadora, en este post te compartimos algunas recomendaciones para calmar a una persona con demencia.  

¿Cómo se manifiesta la demencia? 

La demencia no se manifiesta igual en todas las personas. El tipo de demencia más común es la enfermedad de Alzheimer que afecta, sobre todo, a los adultos mayores. La aparición de síntomas es progresiva, y dependerá mucho de las causas subyacentes, el estado general de salud de la persona y otras enfermedades que padezca.  

También es importante destacar que no todos los signos conviven a la vez, muchos de ellos empiezan de forma sutil y van agravándose con el tiempo, mientras que otros desaparecen a lo largo de la enfermedad. Estas son algunas de las formas más comunes en que se manifiesta la demencia:  

• Pérdida de memoria: la persona puede olvidar eventos recientes, conversaciones o dónde dejó objetos. 
• Dificultad para comunicarse: problemas con el lenguaje, como olvidar palabras o tener dificultades para formar oraciones coherentes. 
• Desorientación: confusión respecto al tiempo, el lugar y las personas. 
• Deterioro del juicio: tomar decisiones inapropiadas o tener dificultades para planificar y organizar. 
• Cambios en el comportamiento: alteraciones en la personalidad, irritabilidad, ansiedad, depresión, llanto o comportamientos inapropiados. 

Todos estos cambios pueden manifestarse en comportamientos agitados, irritabilidad y episodios de agresividad, lo que dificulta aún más su vida diaria y la de sus cuidadores. 

¿Qué hacer ante la pérdida de memoria? 

Si estás acompañando a una persona con demencia la palabra clave es paciencia. Lo primero que te aconsejamos es que te informes sobre la enfermedad y sus síntomas, así no solo tendrás conocimientos para abordarla, sino también que empatizarás con todos los sentimientos de frustración que atraviesan ante la pérdida de memoria.  

A continuación, te compartimos algunas recomendaciones que pueden ser útiles para cuidar a las personas con demencia que pierden la memoria:  

• Es importante recordar que la pérdida de memoria es un síntoma de la enfermedad, no una acción deliberada. Mantener la calma ayuda a crear un ambiente tranquilo y seguro. 
• Colocar etiquetas en objetos y habitaciones, usar calendarios y listas de tareas puede ayudar a los pacientes a orientarse y recordar información importante. 
• Es posible que necesiten escuchar la misma información varias veces. Repetirla de manera suave y sin mostrar frustración puede ser útil. 
• Utilizar frases cortas y claras, y hacer una pregunta o dar una instrucción a la vez puede facilitar la comprensión. 
• Las rutinas proporcionan una estructura que puede ayudar a reducir la confusión y la ansiedad, haciendo que el día sea más predecible y manejable. 
• Si el paciente se muestra confundido o agitado, es mejor validar sus sentimientos y redirigir suavemente la conversación, en lugar de insistir en corregirlos o discutir. 
• Permitir que la persona haga lo que aún puede hacer por sí misma puede mejorar su autoestima y proporcionar un sentido de logro. 

Recomendaciones para el momento de la alimentación 

El momento de la comida puede ser especialmente desafiante para las personas con demencia y sus cuidadores. Es fundamental establecer una rutina regular y crear un ambiente tranquilo para reducir la confusión y la ansiedad. Presenta alimentos atractivos y fáciles de comer, con utensilios adaptados y dando instrucciones claras y simples. 

También te recomendamos observar sus señales de hambre o saciedad para evitar la sobrealimentación o la falta de alimentación. Y no olvides hacer de la comida un momento social y agradable, coman juntos y conversen de manera calmada. Esto puede mejorar el estado de ánimo del paciente. 

Consejos cuando la persona con demencia senil es agresiva 

La demencia es una enfermedad que afecta, principalmente, a personas de 65 años o más. Esto es lo que conoce como demencia senil. Uno de los síntomas es el cambio de comportamiento, que puede desencadenar en conductas agresivas. Por su parte, quienes acompañan lo viven como un momento difícil y emocionalmente agotador.  

Aquí hay algunos consejos para abordar esta situación con empatía y calma: 

• Es crucial mantener la calma y no responder con enojo o frustración, ya que esto puede exacerbar la situación. Hablar en un tono de voz suave y tranquilizador puede ayudar a calmar al paciente. 
• Trata de identificar qué provoca la agresividad. Pueden ser factores ambientales, dolores físicos, frustración por la incapacidad de comunicarse o cambios en la rutina. Mantener un registro de estos episodios puede ayudar a identificar patrones y prevenir futuros incidentes. 
• Asegura que el entorno sea seguro tanto para el paciente como para ti. Si se vuelve físicamente agresivo, es importante dar un paso atrás y permitirle espacio para calmarse, siempre asegurándose de que no haya objetos peligrosos alrededor. 
• Cambia a una actividad diferente o un objeto que le interese puede ayudar a desescalar la situación. Aunque no se entiendan completamente las razones detrás de su comportamiento, prueba a decir cosas como "Veo que estás molesto y quiero ayudarte". 

Si la agresividad es frecuente y difícil de manejar, es importante hablar con un médico o un especialista en demencia. 

Otras alternativas para calmar a las personas con demencia 

Por último, te compartimos algunas estimulaciones que ayudan a calmar a una persona con demencia, en particular, a las personas con demencia senil. Son enfoques variados y efectivos diseñados para mejorar su bienestar emocional y conductual:  

• Ergoterapia: también conocida como terapia ocupacional, se centra en ayudar a las personas a realizar actividades cotidianas y mantener su independencia. Puede incluir ejercicios para mejorar las habilidades motoras, actividades creativas o tareas domésticas, adaptadas a las capacidades del paciente. Esto no solo mejora su bienestar físico, sino que también proporciona una sensación de logro y propósito. 
• Musicoterapia: utiliza la música como herramienta terapéutica para mejorar el estado emocional y cognitivo de las personas con demencia. Escuchar música familiar, cantar canciones o tocar instrumentos puede evocar recuerdos, reducir la ansiedad y promover la relajación. 
• Técnicas de refuerzo positivo: consisten en elogiar y recompensar los comportamientos deseados para fomentar su repetición. Reforzar positivamente a una persona con demencia, mediante palabras amables, caricias o pequeñas recompensas, puede aumentar su autoestima y reducir la agitación. 

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