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La atención temprana es la estimulación temprana o precoz, dirigida a niños de 0 a 6 años. Su objetivo es dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen el riesgo de padecerlos. Así pues, esta disciplina cumple una función social importante a la hora de dar una respuesta lo más temprana posible a las necesidades especiales que puedan requerir los niños en su etapa educativa y su vida en general.
En este artículo, te contamos en detalle qué es la atención temprana en niños, quién puede beneficiarse de los centros de atención temprana, qué es la estimulación precoz en el desarrollo infantil o en qué consisten los centros de atención temprana, entre otros. ¿Te interesa saber más sobre qué se entiende por atención temprana? ¡Sigue leyendo!
A comienzos del siglo XXI, el conocido Libro Blanco de la Atención Temprana define el concepto de atención temprana como aquel conjunto de intervenciones dirigidas a la población infantil comprendida entre los 0 y 6 años a la familia y al entorno.
Como decíamos, el servicio de atención temprana busca el tratamiento, la prevención y la orientación interdisciplinar o transdisciplinar con el objetivo dar respuesta a los niños que presentan trastornos en su desarrollo o que tienen riesgo de padecerlo.
Por supuesto, la estimulación temprana empezó aplicándose a bebés prematuros o con deficiencias físicas y psíquicas, ya que a los mismos se les quería reforzar su aprendizaje y desarrollo. En la actualidad, estas técnicas van ligadas a conceptos como la inteligencia emocional en niños, pretendiendo desarrollar capacidades en ellos manteniendo el equilibrio entre inteligencia y afectividad, aprovechando los beneficios que tiene para la evolución individual del niño.
De este modo, con la educación temprana se busca el correcto desarrollo del niño o niña. Y, por lo tanto, se llevarán adelante acciones planificadas por un equipo de profesionales de diferentes áreas. A través de estas intervenciones conjuntas, se contempla la esencia del niño en su globalidad. Una mirada transversal, realizada por diferentes profesionales, aunque destacan los profesionales de la psicología, logopedia y fisioterapia. Cada uno de estos profesionales cuenta con una formación específica referente a la atención temprana y el desarrollo infantil.
>> ¿Quieres conocer los mejores juegos en atención temprana?
La atención temprana en educación infantil es un pilar fundamental. Y es que, para que cualquier problema no sea detectado demasiado tarde, tenemos que observar la forma de actuar y el comportamiento que está teniendo el niño durante su día a día, con el fin de detectar posibles deficiencias lo antes posible. La detección precoz es la mejor forma de ayudar a un niño que presenta dificultades para que tenga una progresión positiva en su conducta.
Por todos estos motivos la atención temprana está especialmente indicada para edades comprendidas entre los 0-6 años y que ya manifiesten los primeros síntomas de alguna deficiencia.
Ante todo, el camino que utiliza la atención temprana niños es equilibrar todos los entornos en los que tiene que desarrollarse un niño. De este modo, cada uno desarrollará sus propias habilidades a su ritmo, como por ejemplo, la organización, las funciones y los principios que serán la base para corregir los problemas de cada niño.
Una duda frecuente es la de qué niños necesidan atención temprana. Pues bien, la detección e intervención es especialmente fundamental y obligatoria para niños y niñas con Síndrome de Down o Trastorno del Espectro Autista. Esto cobra sentido la pregunta: por qué es necesaria la atención temprana. En concreto, para lograr mejores resultados y además es un derecho reconocido a niños y niñas que tengan alteraciones en su desarrollo.
Por ello, la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad considera que dentro de la evaluación para la detección y atención se deben potenciar los aspectos siguientes:
Si te preguntas cómo saber si un niño necesita atención temprana, puedes acudir a dicha convención, donde se encuentra toda la información actualizada.
¿Todavía no conoces cuál es la importancia de la educación temprana? ¿Quieres indagar en la atención temprana del desarrollo infantil y su relevancia? ¡Te la explicamos!
La Atención temprana es considerada fundamental en el desarrollo de las emociones en los niños, así como en el fortalecimiento de su cuerpo. De hecho, la estimulación temprana es fundamental para los niños prematuros. Y es que, numerosos estudios coinciden en que la estimulación temprana ayuda beneficiosamente al desarrollo de emociones y de la inteligencia del pequeño.
Gracias a la importancia de la atención temprana, se fomenta el desarrollo de las capacidades, físicas, mentales y sociales del pequeño. Incluso, tratan de prevenir cualquier problemática que pueda aparecer de índole motora, psicológica o cognoscitiva. Además, gracias a la estimulación temprana muchas veces se pueden detectar problemas que incidan el correcto desarrollo del aprendizaje, tratando de que desaparezcan.
Se debe tener en cuenta la plasticidad neuronal del bebé, ya que en los 3 primeros años de vida el cerebro realiza el mayor trabajo de toda su vida, puesto que se produce la mayor cantidad de conexiones sinápticas. Dichas conexiones sinápticas las propician las interacciones con el niño (juegos, diálogos, caricias) y es lo que permite el aprendizaje de nuevas situaciones.
A modo de resumen, la importancia de la atención temprana infantil radica en la cantidad de problemas que puede abordar. Aquí te dejamos un resumen de los objetivos de la atención temprana más importantes:
Dentro de algunos de los principales beneficios de la estimulación temprana podemos encontrar que:
Pero... ¿Qué actividades se hacen en atención temprana? Pues bien, esto puede variar según cada profesional y, sobre todo, según cada niño/a. Generalmente, se suele realizar estimulación sensorial y motriz, juegos de desarrollo del lenguaje y comunicación, ejercicios de psicomotricidad fina y gruesa, y actividades de mejora de las funciones cognitivas, entre otros.
Anteriormente, hemos mencionado el objetivo fundamental de la atención temprana, el cual es realizar un diagnóstico y evaluación exhaustiva sobre la capacidad de desarrollo de bienestar del niño. Se trata, por tanto, de brindar una valoración lo más completa posible para lograr la integración del niño tanto en el medio familiar, escolar y social, así como para la propia autonomía personal del niño. Partiendo de dicha idea, podemos desglosar una serie de objetivos concretos que derivan de la atención temprana, los cuales son:
>> ¿Conoces la relación entre atención temprana y logopedia?
Ahora que sabemos qué es y por qué es necesaria la atención temprana, vamos a ver cuáles son los principales campos de actuación en los que la atención temprana actúa. Son, principalmente, tres: los servicios sanitarios, los centros de desarrollo infantil y atención temprana y los servicios sociales. ¡Veamos de qué se ocupa cada uno de ellos!
Los servicios sanitarios cuentan con profesionales que se dedican a la atención y estimulación tempranas. Pero estos se encuentran en distintas especialidades de los servicios sanitarios. Así, estos profesionales desarrollan programas de prevención fundamentales para poder actuar con cada niño en el que encuentran una alteración.
Estos servicios son:
Los Centros de desarrollo infantil y atención temprana (CDIAT) se crearon hace medio siglo y han ido evolucionando a medida que las demandas de las familias y los niños han ido cambiando, por lo que ha ido adaptándose a cada época. ¿Ves por qué es necesaria la atención temprana?
Los centro de atención temprana están pensados para diagnosticar los problemas que pueden llegar a surgir en atención primaria, ya que fueron ideados principalmente para la intervención temprana. Así, se ocupan de la detección precoz de alteraciones en el desarrollo, de la evaluación multidisciplinar de las necesidades del niño, apoyo y orientación a familias, etc.
Los servicios sociales conforman un servicio es muy importante para los programas en los que se requiera prevención, sobre todo para la detectar aquellos trastornos que puedan afectar a los niños que lo necesiten, además de poder intervenir en caso de necesitarlo.
Los profesionales en atención temprana, independientemente de dónde ejerzan, suelen llevar a cabo programas de atención temprana. La elaboración y desarrollo de estos programas de atención temprana se llevan a cabo por equipos multidisciplinares, donde pueden aglutinarse profesionales de áreas tan dispares como la psicología, la logopedia o la fisioterapia. Esto se debe a que la intervención tiene un carácter íntegro y que aglutina todas las materias como la psicomotricidad, las emociones, el lenguaje o la comunicación. Estos programas pueden desarrollarse en tres niveles:
¿Te has preguntado sobre el rol de la familia en la educación temprana? ¿Sabes que los padres y el entorno son tan importantes como la atención especializada cuando se detectan necesidades especiales? Tanto es así que, incluso, existen métodos de trabajo en los que la familia interviene de principio a fin: uno de los más conocidos es la atención temprana centrada en la familia.
La atención temprana centrada en la familia se basa en familias como vehículos para el desarrollo cognitivo y emocional de los niños. Los profesionales de atención temprana forman y empoderan a las familias para contar con las herramientas necesarias para identificar necesidades, fortalecer el núcleo, favorecer el aprendizaje de sus hijos/as...
Aunque el objetivo de cualquier programa de atención temprana es el de favorecer el desarrollo cognitivo, emocional o comunicativo de los niños que padecen trastornos, la particularidad de la atención temprana centrada en familia se encuentra en el cumplimiento de un doble objetivo. Por un lado se atenderán las necesidades de los propios niños; y por otro lado, también se hará de sus cuidadores principales, en este caso, centrándose en los miembros de su familia.
Y es que las necesidades centradas en el niño tienen su mejor respuesta cuando se tratan de satisfacerlas con la colaboración de su entorno familiar. De esta forma, las motivaciones del niño y sus propios planteamientos dentro de este contexto favorecerá que realice una interacción con los objetos o personas guiándose por sus propios intereses.
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