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Seguramente te suene el término ERP (Enterprise Resource Planning) un software diseñado para administrar e integrar las funciones de los procesos comerciales. En el siguiente post desarrollamos este, así como otros conceptos, relacionados con la gestión empresarial. Así como te ofrecemos una amplia oferta de cursos y masters en organización empresarial, que podrás realizar de manera 100% online. ¿Quieres saber más?
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En un entorno en el que las organizaciones se mueven a un ritmo vertiginoso y que, en muchos casos, se trabaja de virtual, desarrollar un plan de gestión de recursos te ofrece una visibilidad constante del volumen de trabajo. En el siguiente post te contamos cómo hacer una buena gestión de recursos empresariales, así como te ofrecemos una amplia oferta formativa en gestión empresarial ¿Te interesa?
¡Vamos allá!
Podemos afirmar que la gestión de recursos se considera al proceso de planificación y programación de los recursos y actividades de un equipo de trabajo. Cada empresa estará compuesta por unos recursos empresariales distintos, según su modelo de negocio, el sector en el que desarrolla su actividad, los valores que promueve...
Los recursos empresariales son la esencia en sí de cada organización. Engloba desde los recursos materiales, tangibles e intangibles, hasta aquellos que se corresponden con el valor de marca o la productividad de colaboradores.
Solemos identificar tres tipos de recursos empresariales comunes en cualquier negocio:
Un plan de gestión de recursos empresariales se usa para gestionar todo tipo de recursos que se necesiten para desarrollar un proyecto. Para llevarlo a cabo debemos seguir una serie de pautas:
El primer paso es identificar cuáles son los objetivos de la gestión de recursos empresariales que queremos conseguir. Estos objetivos pueden incluir aumentar la eficiencia y la productividad, reducir costos, mejorar la calidad de los productos o servicios, entre otros.
Para poder gestionar los recursos empresariales, es importante conocer qué recursos están disponibles. Estos recursos pueden incluir tanto recursos financieros, como recursos humanos y tecnológicos.
Es muy necesario analizar los procesos empresariales existentes para poder identificar oportunidades de mejora. Esto te permitirá optimizar los recursos empresariales y aumentar la eficiencia de la empresa.
También es importante identificar los riesgos asociados a la gestión de recursos empresariales. En este punto se pueden incluir problemas financieros, riesgos de seguridad, riesgos legales, entre otros.
En base de la información que hemos recolectado, es hora de desarrollar un plan de acción para la gestión de recursos empresariales. Este debe incluir objetivos claros, plazos y responsabilidades específicas.
Una vez que se ha desarrollado el plan de gestión de recursos empresariales, es hora de ponerlo a funcionar. Es importante comunicar el plan a todos los miembros de la empresa para asegurarse de que todos estén alineados y comprometidos con los objetivos del plan.
Además, para asegurarnos de que estamos llevando nuestro plan de gestión de recursos correctamente, debemos monitorear y medir los resultados de forma regular.
Existen una serie de beneficios clave a la hora de realizar una planificación de recursos empresariales. Algunos de ellos son:
La distribución del trabajo, permitiendo conocer las fortalezas y debilidades del equipo. A medida que asignamos los recursos, es importante saber quién tendrá más éxito con cada tarea o actividad. Además, puede pasar que haya empleados con más carga de trabajo que otros, lo que puede provocar descontentos y, a la larga, una rotación de personal considerable.
La administración de recursos con la ayuda de un ERP permite la distribución de tareas de manera equitativa.
También ayuda a tener objetivos alcanzables, no tiene lógica establecer objetivos que no podamos alcanzar. Por ello, la gestión de recursos empresariales nos da la posibilidad de definir lo que se puede llevar a cabo y cuándo se va a realizar. Así como detectar las dependencias y hacer los ajustes que se consideren necesarios. Algo que puede implicar nivelar los recursos del equipo: cambiar las fechas de entrega y prioridades por otras más razonables.
Igualmente, podemos conseguir datos de calidad. Los datos son innegablemente integrales en el mundo empresarial y un ERP ofrece una gran ventaja en términos de datos, por ejemplo, identificando los datos incorrectos y borrándolos del sistema ERP. Lo que permite recopilar los útiles más fácilmente.
Por otra parte, también mencionar que permite tener una visión completa de cada proyecto. Al saber la tarea que está desempeñando cada miembro del equipo, podemos asignar mejor los recursos para los nuevos proyectos que surjan. También permite realizar cambios en el plan de gestión de recursos para evitar la sobrecarga de trabajo y maximizar la eficiencia.
En resumen, es un arma ideal para mantener un monitoreo constante de cada actividad, quién lo lleva a cabo y qué se necesita en cada área.
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