Magdalena Arias Garcia

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DOCENTE DE LA FACULTAD DE NUTRICIÓN


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Como muchas personas en mi profesión, Nutrición y Dietética no fue mi primera opción, pero tuve la grandísima suerte de que una vez en ella esta rama de la salud me apasionara y ahora no me imagino dedicándome a otra cosa. 


Para mí, la nutrición supone un reto día a día. Aún hay tanto por conocer, indagar y experimentar... que ese desconocimiento y curiosidad propicia algo, así como un “cajón desastre” de creatividad que te invita a explotar cualquier área donde la alimentación y la nutrición intervengan. 


Ya que como bien dijo Feuerbach " Somos lo que comemos".

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  • Grado en Nutrición Humana y Dietética
  • Máster en Nutrición Personalizada y Comunitaria

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  • Dietista-Nutricionista en Clínica Privada
  • Docente de formación en nutrición y alimentación saludable a diferentes grupos de población

Artículos publicados

Descubriendo la anatomía del esófago

Descubriendo la anatomía del esófago

El sistema gastrointestinal es uno de los más extensos del cuerpo humano, así como de los más especializados, puesto que cada una de sus partes cuenta con una tarea fundamental y muy minuciosa para nuestra correcta nutrición. El esófago es un componente del sistema digestivo, pero destaca por ser el actor principal en la primera parte de la nutrición. Este artículo explorará la anatomía y fisiología del esófago, su papel en la nutrición, y las principales patologías que pueden afectarlo, así como sus implicaciones en la nutrición clínica y hospitalaria. Anatomía del esófago: ¿cómo es? El esófago es un tubo muscular de aproximadamente 25 centímetros de largo que conecta la faringe con el estómago. Aunque parece un tubo homogéneo, presenta cambios histológicos a lo largo de su longitud. La parte superior del esófago tiene una capa muscular esquelética (Muscularis Propria), lo que permite un control voluntario inicial de la deglución. A medida que descendemos hacia el esófago inferior, la capa muscular se transforma en músculo liso, que es controlado involuntariamente por el sistema nervioso autónomo. Esta transición propicia la eficiente propulsión del bolo alimenticio hacia el estómago. Además, el esófago está revestido internamente por una capa de moco producida por glándulas en la submucosa. Este moco no solo facilita el paso suave del bolo alimenticio, sino que también protege el epitelio esofágico de daños mecánicos y químicos. Por ejemplo, cuando ingerimos alimentos demasiado grandes o puntiagudas, como una raspa de pescado o si tenemos reflujo gastroesofágico, donde los ácidos gástricos pueden causar irritación y daño al epitelio del esófago. De esta forma actúa como una barrera protectora. Fisiología del esófago El esófago cumple la función de transportar alimentos y líquidos desde la boca hasta el estómago mediante un proceso denominado peristalsis. Este movimiento ondulatorio es increíblemente coordinado: cuando tragamos, los músculos circulares y longitudinales del esófago se contraen y relajan en una secuencia muy precisa. Este proceso asegura que el alimento se desplace eficientemente hacia el estómago, incluso si estamos en una posición invertida, como colgados boca abajo. El esófago está equipado con dos esfínteres importantes: el esfínter esofágico superior (EES) y el esfínter esofágico inferior (EEI). Estos esfínteres actúan como “guardianes” en cada extremo del esófago. El EES controla la entrada del bolo alimenticio al esófago y previene la entrada de aire durante la respiración, mientras que el EEI se relaja para permitir que el bolo entre en el estómago, previniendo el reflujo gastroesofágico. Alteración del esófago que afectan en la nutrición Cualquier alteración en su estructura o función puede tener un impacto significativo en el estado nutricional del paciente. Algunas de las condiciones más comunes son: Disfagia: La disfagia es la dificultad para tragar, que puede ser causada por una obstrucción mecánica, como un tumor, o por trastornos neuromusculares. Los pacientes con disfagia están en riesgo de desnutrición y deshidratación debido a la dificultad para ingerir alimentos y líquidos. Reflujo Gastroesofágico (RGE): El RGE ocurre cuando el contenido del estómago regresa al esófago, causando síntomas como acidez y esofagitis. Los cambios dietéticos, como evitar alimentos que relajan el EEI (por ejemplo, menta, chocolate, grasas) y comer comidas más pequeñas, pueden ayudar a controlar los síntomas. Esofagitis Eosinofílica: Una condición inflamatoria crónica del esófago que puede ser causada por alergias alimentarias. La eliminación de ciertos alimentos de la dieta puede ser necesaria para controlar los síntomas y prevenir el daño esofágico. ¿Cuál sería la intervención nutricional? Las intervenciones nutricionales deben ser personalizadas según la condición específica del paciente, pero aquí vamos a presentar algunas de las estrategias de alimentación básica adaptada que más se suelen utilizar en nutrición clínica y hospitalaria: Modificación de texturas: Para pacientes con disfagia, los alimentos pueden necesitar ser triturados o líquidos espesados para facilitar la deglución. Aquí se hace uso también de espesantes. Nutrición artificial. Por un lado, encontraríamos nutrición enteral: En casos de disfagia severa u obstrucción esofágica, puede ser necesario utilizar sondas de alimentación para asegurar una ingesta nutricional adecuada. Y por otro, nutrición parenteral: En casos extremos, donde la alimentación oral o enteral no es posible, la nutrición parenteral puede ser utilizada para proporcionar nutrientes directamente al torrente sanguíneo. Implicaciones clínicas de la disfagia En un entorno hospitalario, la coordinación entre diferentes profesionales de la salud es vital para proporcionar una atención integral. Los médicos/as, especialistas, dietistas-nutricionistas, enfermeros/as y terapeutas del habla y lenguaje, y otros profesionales deben trabajar juntos para evaluar y tratar a los pacientes con enfermedades esofágicas. Échale un vistazo a nuestro curso en Cuidados del TCAE al paciente con patología digestiva. Es importante planificar cuidadosamente el alta hospitalaria de pacientes con enfermedades esofágicas, asegurando que continúen recibiendo el apoyo nutricional adecuado en su domicilio. Además de proporcionar educación detallada a los pacientes y sus familias sobre la gestión de su condición, incluyendo instrucciones dietéticas y el uso de equipos de alimentación si es necesario. Por último, establecer un plan de seguimiento regular para monitorear el progreso del paciente, ajustar las intervenciones nutricionales y tratar cualquier complicación que pueda surgir. Vemos como el esófago desempeña un papel importante en la alimentación y nutrición adecuada de la población, sobre todo en aquellos colectivos de edad avanzada donde los problemas funcionales comienzan a ser prioritario para prevenir desnutrición. La comprensión de su anatomía y fisiología, así como de las principales patologías que pueden afectarlo, debe ser de conocimiento no solamente en el entorno clínico, sino también para el personal de atención sociosanitaria, muy demandado hoy en día tanto en instituciones como en el domicilio. La coordinación interdisciplinaria y el seguimiento continuo son componentes clave en el manejo de estos pacientes, asegurando una calidad de vida óptima y una recuperación eficiente. Titulaciones que pueden interesarte Máster en Enfermería Quirúrgica + 60 Créditos ECTS MAESTRÍA EN EMERGENCIAS URGENCIAS DIGESTIVAS: Maestría Internacional en Medicina Interna + Maestría Internacional en Emergencias (Especialista en Urgencias Digestivas) Bibliografía Castell, D. O., & Richter, J. E. (2020). The esophagus (6th ed.). Wiley-Blackwell. Sleisenger, M. H., Feldman, M., Friedman, L. S., Brandt, L. J., & Rubin, E. (2015). Sleisenger and Fordtran's Gastrointestinal and Liver Disease: Pathophysiology, Diagnosis, Management (10th ed.). Elsevier. Enlace interno 1: Nutrición enteral Artículo interno: Enfermería digestiva Enlace interno 3: https://www.euroinnova.edu.es/sscs0208-atencion-sociosanitaria-a-personas-dependientes-en-instituciones-sociales-online Enlace interno 4: https://www.euroinnova.edu.es/curso-atencion-sociosanitaria-personas-domicilio-auxiliar-ayuda-domicilio-online#...

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ISO 22000, IFS y BRC ¿En qué consisten estas certificaciones? 

ISO 22000, IFS y BRC ¿En qué consisten estas certificaciones? 

En la industria alimentaria, la seguridad y calidad de los productos es una prioridad de carácter diario para proteger la salud de los consumidores y cumplir con las regulaciones. Las empresas trabajan cada vez más por la excelencia en estos aspectos, y para ello estas certificaciones son un objetivo a cumplir en sus planes de mejora. Algunas de las más relevantes en este ámbito son Internacional Organization for Standardization (ISO) 22000, International Featured Standards (IFS) y la British Retail Consortium (BRC). Cada una tiene sus propias características y finalidades, que deberán tener en cuenta las empresas del sector alimentario que deseen aplicar en ellas.   A continuación, exploraremos en qué consiste cada una de estas certificaciones y las diferencias entre ellas y cuál podría ser su aplicación práctica en una empresa alimentaria. ¿Qué es ISO 22000? ISO 22000 es una norma internacional que especifica los requisitos para un sistema de gestión de seguridad alimentaria. Esta certificación integra los principios del sistema HACCP (Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control). Esta norma está diseñada para cualquier organización que trabaje dentro la cadena alimentaria, desde productores primarios, su distribución y hasta minoristas.   Se centra en la identificación y control de riesgos, lo que ayuda a prevenir incidencias antes de que ocurran de forma eficaz. Esto promueve la mejora continua de procesos de gestión de seguridad alimentaria. Además, es amoldable con otras normas ISO, como ISO 9001 (para gestión de calidad) e ISO 14001 (para gestión ambiental) lo que permite un enfoque integral y reconocido globalmente para la gestión de la seguridad alimentaria.  Pongamos el caso de una empresa de procesamiento de alimentos certificada bajo ISO 22000. Esta podría implementar un sistema de trazabilidad que le permita rastrear cada lote de productos desde la materia prima hasta el producto final. Permite así una retirada de producto rápida y eficiente a la mínima sospecha de riesgo o contaminación alimentaria.   ¿Qué es IFS? Creada por Alemania, Italia y Francia, ya es una norma bastante establecida en Europa, así como lugares de Asia y América. Está enfocada no solo en la seguridad, sino también en evaluar la calidad de los productos alimentarios y los procesos de producción, asegurando que estos sean seguros y cumplan con las especificaciones del cliente para su mayor satisfacción. Se dirige principalmente a proveedores y fabricantes de alimentos que suministran a marcas minoristas. Por ello, es altamente valorada por grandes cadenas de supermercados y minoristas europeos, facilitando la entrada a estos mercados  Las auditorías de IFS son exhaustivas y detalladas (con 10 requisitos específicos KO), lo que asegura altos estándares de seguridad y calidad. Así como es compatible con otras normas de gestión de calidad, facilitando la integración con otros sistemas.  Un fabricante de alimentos que busca suministrar a grandes cadenas de supermercados puede obtener la certificación IFS para demostrar que sus procesos de producción cumplen con los estrictos estándares de calidad y seguridad requeridos por estos minoristas. Esto le puede abrir puertas a nuevos mercados y mejores contratos comerciales   ¿Qué es BRC? Es una norma de seguridad alimentaria desarrollada por el British Retail Consortium en Reino Unido, pero ya bastante expandida a nivel como en algunos países de Europa, EE. UU. e incluso algunas zonas de Sudamérica. Está diseñada para garantizar la seguridad, calidad y operatividad de los productos alimentarios.   BRC establece requisitos específicos para la gestión de la calidad y la seguridad alimentaria, con un enfoque particular en la normativa del Reino Unido, que fomenta la mejora continua de los procesos y la actualización de sus prácticas. Lo que la hace interesante para empresas que pretendan adentrarse en el mercado en este país, suministrando productos a minoristas británicos.  Una planta de procesamiento de alimentos que exporta sus productos al Reino Unido podría obtener la certificación BRC para asegurar a sus clientes británicos que cumple con los altos estándares de seguridad y calidad alimentaria exigidos en ese mercado. Esto garantizará la confianza del cliente y facilitará el acceso al mercado británico. ¿Cuál es la más importante?  No hay una respuesta única. Cada una de estas certificaciones ofrece diferentes enfoques y beneficios específicos. La elección entre ellas dependerá de las necesidades particulares de la empresa y los mercados a los que se dirige, es decir, de sus objetivos comerciales. Algunas empresas tratan de hacerse con una o más de estas certificaciones, ya que podría ser una puesta en valor con la que se dota a la seguridad y calidad alimentaria y una diferenciación frente a otras empresas para mejorar las relaciones comerciales y la confianza.  Analizar cuidadosamente los requisitos del mercado, las expectativas de los clientes y los objetivos comerciales ayudará a determinar cuál certificación es la más adecuada para cada empresa.  Si te ha parecido interesante, échale un vistazo a nuestra Maestría Internacional en Seguridad alimentaria   Bibliografía International Organization for Standardization (ISO). (2018). ISO 22000:2018 Food safety management systems - Requirements for any organization in the food chain. ISO. Recuperado de https://www.iso.org/standard/65464.html International Featured Standards (IFS). (2023). IFS Food Standard version 8. IFS. Recuperado de https://www.ifs-certification.com/index.php/en/standards/ifs-food-standard  British Retail Consortium (BRCGS). (2023). BRCGS Global Standard for Food Safety Issue 9. BRCGS. Recuperado de https://www.brcgs.com/brcgs/food-safety/  Food and Agriculture Organization of the United Nations (FAO). (2016). FAO Food Safety Risk Management: Evidence-Informed Policies and Decisions, Considering Multiple Factors. FAO. Recuperado de http://www.fao.org/3/a-i5558e.pdf  Titulaciones que pueden interesarte POSGRADO DE SEGURIDAD ALIMENTARIA CURSO EN ETIQUETADO DE ALIMENTOS ...

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¿Qué sabemos de los Probióticos?

¿Qué sabemos de los Probióticos?

¿Qué sabemos de los Probióticos? Seguramente en alguna ocasión que has ido a la farmacia te han recomendado tomar probióticos, o algún amigo/a te ha recomendado que consumas kéfir por su efecto probiótico. ¿Pero qué significa que un alimento contiene probióticos? ¿Es beneficioso su consumo? ¿Podemos encontrarlos de forma natural en los alimentos o es necesario comprar productos especializados? Todas estas preguntas y mucho más es lo que abordaremos en el siguiente artículo. ¡Empecemos! ¿Qué son los probióticos? Partimos de que los probióticos son microorganismos vivos que confieren beneficios a la salud del huésped (quien los ingiere), cuando se consumen en cantidades adecuadas, proporcionando una acción protectora contra patógenos y beneficios nutricionales. Su uso está asociado principalmente a alimentos funcionales o suplementos dietéticos que contribuyen a un mejoramiento de la salud en la población. Sin embargo, en los últimos años se han venido estudiando nuevos usos, como son la prevención y alivio de ciertas enfermedades principalmente gastrointestinales. Asimismo, los probióticos se han convertido en una alternativa para el tratamiento de enfermedades infecciosas, para mitigar el efecto negativo que los antibióticos pueden generar sobre la microbiota intestinal de la persona. Los probióticos forman parte de los llamados alimentos funcionales, mucha gente los confunde con los también conocidos prebióticos. Te dejamos este artículo para sacarte las dudas sobre su diferencia. Elementos imprescindibles en los probióticos Pero hay que ser más exhaustivos, ya que la definición de "probiótico" tiene que cumplir 3 aspectos. Te los mostramos. Identidad del microorganismo Debe ser un microorganismo –o mezcla de microorganismos– definido microbiológicamente, es decir, del que se conozcan el género, la especie y la cepa. Hay que conocer la identidad del microorganismo, y en función de esto, poder determinar qué estudios respaldan su capacidad probiótica. La Organización Mundial de Gastroenterología confirmó que la eficacia de los probióticos es específica de la cepa y dosis, disipando así el mito de que cualquier yogurt puede considerarse un probiótico. Esto también se aplicaría a que alimentos fermentados con composición indefinida (como el kéfir, el chucrut o la kombucha) no pueden denominarse técnicamente “probióticos", aunque esto no implique que no tengan potenciales efectos beneficiosos para la salud.  “No todos los alimentos fermentados son probióticos ni todos los probióticos se encuentran disponibles exclusivamente en los alimentos fermentados” Microorganismos vivos Debe tratarse de microorganismos que se encuentren vivos al momento de ser consumidos Evidencia científica Debe existir, al menos, un estudio clínico de eficacia que demuestre sus efectos beneficiosos. La mayoría de los probióticos que se han estudiado son bacterias, entre las cuales se encuentra principalmente las bacterias ácido-lácticas (BAL). Entre las bacterial BAL probióticas más estudiadas encontramos el género Lactobacillus, Enterococos también se han estudiado algunos mohos y levaduras, los cuales han mostrado tener un potencial probiótico.                                          ¿Cuáles son los beneficios de los probióticos? Los probióticos son considerados organismos beneficiosos, ya que su uso puede proporcionar ciertos efectos positivos al huésped, como por ejemplo: Mantener el equilibrio de la microbiota intestinal Inhibir el crecimiento de bacterias patógenas Sintetizar y mejorar la biodisponibilidad de nutrientes Promover una buena digestión Reducir el efecto de los alérgenos Reducir el colesterol Estimular el sistema inmunitario y aumentar la resistencia a la infección Aliviar la intolerancia a la lactosa. ¿Cuál es la finalidad del consumo de probióticos? ¿Es seguro su consumo en toda la población? El uso clínico más conocido y extendido de los probióticos es el de prevenir complicaciones generadas por los antibióticos. Cuando compras en la farmacia este tipo de medicamento, es bastante habitual que el facultativo te recomiende el consumo de probióticos para mejorar la sintomatología y protección de los efectos del antibiótico en el organismo.  Sus indicaciones más comunes son la prevención de la diarrea asociada al consumo de antibióticos y el tratamiento de la infección por Helicobacter pylori. Pero, ¡ojo! A pesar del número creciente de estudios en los que se ha demostrado el efecto benéfico y seguro de los probióticos, es fundamental destacar que pueden tener efectos adversos graves, e incluso letales, en algunas poblaciones vulnerables, como las mujeres embarazadas, los pacientes inmunosuprimidos, con trasplantes o con alteraciones vasculares. ¿Cómo podemos consumir los probióticos? Los probióticos pueden estar presentes en la forma de suplementos alimenticios (cápsulas, pastillas o suspensiones acuosas) o incorporados en alimentos, como en algunas fórmulas infantiles, yogures, quesos frescos o jugos de fruta. Algunos alimentos contienen probióticos de forma natural, como el yogur, el kéfir, el chucrut, el kimchi y el miso. Pero recomendamos seguir estos consejos: Elegir alimentos que indiquen en la etiqueta que contienen cultivos vivos o activos, ya que esto garantiza que no han sido destruidos por el calor o los conservantes y el tipo de microorganismos específicos. Consumirlos lo antes posible después de comprarlos o prepararlos, porque los probióticos pueden perder su efectividad con el tiempo o por el contacto con el aire. Combinarlos con otros alimentos que contengan prebióticos, que son fibras que alimentan a los probióticos y favorecen su crecimiento. Y finalmente, pero no menos importante. Consultar con un médico o un nutricionista antes de consumir probióticos si se tiene alguna condición médica o se está tomando algún medicamento, ya que los probióticos pueden interactuar con algunos fármacos o causar efectos secundarios en algunas personas. MBA EN SALUD PÚBLICA + 60 ECTS CURSO DE IMAGEN PARA EL DIAGNÓSTICO + MEDICINA NUCLEAR MÁSTER EN MEDICINA ESTÉTICA + 5 ECTS ...

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