Índice
La promoción del cuidado integral y el bienestar de la población es uno de los principales objetivos del Día Mundial de la Salud, celebrado cada 7 de abril. Es una jornada dedicada a enfatizar la educación sanitaria, la concienciación social y la importancia de políticas públicas que respondan a las necesidades actuales de la población. ¿Quieres saber más? ¡Aquí te lo contamos!
El Día Mundial de la Salud busca generar consciencia y acciones en torno a los siguientes aspectos.
La acción por la salud no solo está relacionada con la oferta de servicios básicos, sino también con que estos sean de calidad, variados y orientados a cubrir todas las necesidades de la población. Esto se encuentra dentro del marco del derecho fundamental a la atención médica. En este sentido, este día invita a los Estados a implementar más y mejores políticas públicas que protejan y promuevan la salud; de hecho, una de las principales medidas para lograrlo es el incremento del presupuesto para este sector, ya que es necesaria infraestructura, tecnología médica de punta, profesionales capacitados e intervenciones sociales.
El cuidado de la salud tiene sus bases en la educación. Ya sea en casa o fuera de ella, los niños, jóvenes y adultos deben estar al tanto sobre los principales métodos para cuidar de la salud tanto individual como colectiva. Así, la divulgación de información actualizada a través de medios tradicionales y digitales es importante, tanto como la realización de campañas y talleres en centros o bien educativos, o bien comunitarios. Todo lo anterior viene de la mano de la capacitación de los profesionales de la salud, quienes son los encargados de transmitir nociones fundamentales sobre prevención de enfermedades y autocuidado.
A pesar de que los Estados y sus gobiernos invierten fondos para afrontar las necesidades sanitarias de la población, también se considera importante desplegar medidas de concienciación social en torno a la vida y los hábitos saludables, donde el cuidado de los ámbitos físico y mental aseguran el bienestar. En este sentido, junto con el trabajo de educación en salud en escuelas, centros de educación superior e insituciones, son necesarias iniciativas para que se elimen las barreras en torno al acceso a los servicios sanitarios. Así, la ciudadanía debe conocer el impacto de la pobreza, la educación y el ambiente en la salud, además de interiorizar la relevencia de la actividad física, la nutrición balanceada y el bienestar mental.
El Día Mundial de la Salud reafirma que el acceso a servicios sanitarios de calidad es un derecho universal. Todos deben contar con atención médica integral y oportuna, lo cual impulsa bienestar y equidad en cada comunidad sin distinción alguna.
En este día, estas son las acciones que pueden contribuir con la salud y la prevención de enfermedades.
Aunque los hábitos saludables deben ser inculcados desde la infancia, nunca es tarde para asumirlos como parte del estilo de vida. Entonces, ¿en qué consisten? La respuesta es sencilla llegados a este punto. En primer lugar, la alimentación equilibrada, variada y adaptada permite que el cuerpo reciba los nutrientes que necesita para un correcto funcionamiento del organismo. En segundo lugar, como parte complementaria de la nutrición, se encuentra la actividad física regular, la cual permite mantener la masa muscular, disminuir la grasa corporal y alcanzar flexibilidad/movilidad. Por último, y no menos importante, se recomienda consumir la cantidad suficiente de agua durante el día para mantenerse hidratado y, cómo no, evitar o cuidar la cantidad de alimentos procesados y azúcares, así como erradicar el consumo de tabaco o alcohol.
La salud no debe ser una cuestión de reacción ante las enfermedades, sino la prevención de estas. ¿Cómo lograrla? Lo más importante es planificar chequeos y controles médicos regulares, ya sean semestrales o anuales. Estos permiten conocer el estado del cuerpo mediante análisis de sangre u otras pruebas complementarias según las indicaciones del especialista. Sumado a estos exámenes de rutina, se encuentran las autoevaluaciones, como la autoexploración de la mama en mujeres o la atención a cualquier cambio corporal (pérdida repentina de peso, aparición de bultos, cansancio, mareos, manchas en la piel, entre otros). Con todo esto de por medio, la atención médica puede ser determinante en el caso de que se detectara una enfermedad en sus estadios tempranos.
Muchos subestiman el poder del sueño para alcanzar el bienestar físico y mental; no obstante, están equivocados. Se requieren entre 7 y 9 horas de descanso para una correcta recuperación del cerebro y del cuerpo, cuya importancia no mengua a lo largo de los años, aunque se afirme que solo los niños y los adolescentes deben dormir más tiempo. Ahora bien, el sueño no solo provee la restitución de las energías, sino también la fijación de la memoria, el fortalecimiento de la atención y el sostenimiento de la concentración. Con el cerebro cansado, la memoria se torna frágil y otros aspectos de la vida cotidiana se ven afectados, sobre todo, por el cansancio, el estrés y el mal humor derivados de la falta de descanso. ¿Qué hacer para descansar lo suficiente? Establecer rutinas de relajación y evitar la sobreexposición a los dispositivos electrónicos.
Desde hace algunas décadas, la salud mental ha cobrado relevancia en el cuidado integral de la persona. De hecho, esta influye a todas las áreas en las que esta participa y vive: el diálogo interno, la autopercepción, la autoestima, las relaciones interpersonales, las conductas, el sentido de pertenencia, entre otros. Si estos aspectos no se encuentran equilibrados, es muy probable desarrollar sentimientos de insatisfacción y frustración, y en ciertos casos derivar en trastornos del estado del ánimo como la depresión o la ansiedad, enfermedades de nuestro tiempo. Si bien el acceso a la psicoterapia está limitado a las posibilidades económicas personales, se pueden tomar medidas como la relajación, la meditación, el apoyo emocional (amigos y familiares) y la conexión social, todas ellas fundamentales para estimular el bienestar emocional. En cualquier caso, siempre se puede buscar ayuda profesional cuando haya signos de malestar sostenidos en el tiempo.
En el cuidado de la salud y del bienestar podemos contribuir todo, más aún si tenemos conocimientos básicos de primeros auxilios. Hay respuestas que conocemos, como la maniobra de Heimlich, pero se hallan otras tantas que requieren de conocimientos más específicos, como realizar una reanimación cadiopulmonar (RCP) y otros procedimientos ante heridas. Una sociedad concienciada sobre el valor de la salud y la colaboración tendrá ciudadanos interesados en formarse con cursos de primeros auxilios, además de mantenerse actualizados en los nuevos protocolos de atención en emergencias. Como se ve, se trata de una iniciativa de gran utilidad tanto para el hogar como para los demás.
Lee también sobre importancia de la educación física para la salud →
La etapa escolar no solo es importante para dotar a los estudiantes de conocimientos teórico-prácticos diversas áreas de conocimiento, sino también para inculcar en ellos, mediante actividades y dinámicas, hábitos saludables. ¿Algunas ideas para hacerlo en el Día Mundial de la Salud? A continuación, te dejamos 5 propuestas para trabajar en el aula.
Ya hemos mencionado la importancia de la nutrición para una salud óptima. Pero ¿cómo transmitir esto a niños y adolescentes en la escuela? Los talleres y las actividades de cocina son las opciones más interesantes no solo por su contenido, sino también por su metodología: suelen ser más entretenidos y lúdicos, aspectos importantes para captar la atención de los estudiantes. Estas dinámicas se pueden realizar bajo la supervisión de los docentes del área de Ciencias Naturales o a través de la invitación de un especialista en este tema. ¿Cómo se pueden abordar estos talleres?
Charlas sobre el valor nutricional de los alimentos
Charlas sobre el impacto de la comida procesada en la salud
Taller de cocina saludable con platillos locales
Taller de cocina saludable con platillos internacionales
Taller “Prepara tu desayuno saludable”
Taller “Prepara tu cena saludable”
La salud tiene dos componentes: la alimentación y la actividad física. Luego de observar las actividades en torno a la primera, es importante mencionar que la actividad física debe ser parte del estilo de vida. Sabemos que las clases de Educación Física persiguen el objetivo de formar a los estudiantes en los tipos de ejercicios, la importancia del deporte, el desarrollo físico y la consciencia de los movimientos.
Pero ¿cómo hacerlo más entretenido sin recurrir a dinámicas comunes? Se recomienda plantear actividades como el senderismo o paseos al aire libre, espacios en los que los estudiantes pueden desplegar todas las posibilidades de sus cuerpos: correr, saltar, estirarse, levantarse, tumbarse, caminar, entre otros. ¿Qué más tomar en cuenta para esta actividad?
Las bases para una adecuada gestión emocional durante la adultez se encuentran en la infancia y adolescencia. Junto con el apoyo y seguimiento psicológico en estas etapas cruciales de la vida de una persona, la educación en técnicas de relajación provee muchos beneficios. El primero de ellos es la autoconsciencia sobre los sentimientos: ¿qué siento?, ¿por qué los siento?, ¿cómo los expreso?, ¿qué lugar le doy a esto que me ocurre?
Lo segundo, tras la identificación de los factores de miedo, estrés, ansiedad, pena, entre otros, siguen otros procesos, como aceptar lo que ocurre, disipar la tensión y alcanzar la relajación. Todo esto es posible mediante sesiones guiadas de respiración, ejercicios de relajación muscular y meditación. En el aula, los docentes pueden desplegar dinámicas para trabajar la relajación (ambiente positivo, escucha activa, diario personal, ejercicios de autoconocimiento, entre otros).
La mejor manera de integrar aprendizajes es el debate. Los docentes pueden formar pequeños grupos de trabajo en el que se toma como punto de discusión algún aspecto de la salud, como la nutrición o el deporte. Se plantea una pregunta como “¿Es saludable almorzar una hamburguesa con papas fritas?”. Cada estudiante deberá sostener su postura con argumentos y ejemplos. De hecho, pueden usar herramientas digitales para buscar información en tiempo real, como Google o algún chat de inteligencia artificial (IA). ¿Qué se busca con esta dinámica? Que los estudiantes analicen sus propias ideas con respecto a la alimentación, observen sus hábitos y lleguen a conclusiones sobre el cuidado de la salud. Es una dinámica importante en esta etapa en la que el desarrollo físico y mental depende del bienestar físico y socioemocional.
Lee también sobre ramas de las ciencias de la salud →
¡Muchas gracias!
Hemos recibido correctamente tus datos. En breve nos pondremos en contacto contigo.