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¿Pensando en cómo recordar con más facilidad lo estudiado? ¿Cuáles son las técnicas y estrategias más utilizadas para consolidar el conocimiento? ¿Investigando sobre los consejos respaldados científicamente para lograr un aprendizaje profundo y significativo? Pues, sigue leyendo, ya que en este artículo detallamos los tipos de hábitos de estudio que nos ayudarán a planificar jornadas de estudio más efectivas para rendir estupendamente en cualquier evaluación.
El aprendizaje es uno de los temas más estudiados en la educación, ya que su proceso y la manera correcta de comprender la información es la base para el conocimiento. Sin embargo, en la actualidad hemos visto surgir otro tipo de modalidades, como las clases virtuales, que han modificado drásticamente nuestra manera de relacionarnos no solo con la información, sino entre profesores y alumnos. No obstante, se trate de una educación tradicional o la educación virtual, la clave del éxito estudiantil se encuentra en la organización y la disciplina, junto con utilizar estrategias de aprendizaje.
Aprender qué es un hábito de estudio y su importancia, así como los tipos que existen, podría significar un avance y un seguro crecimiento de ese rendimiento académico de tu niño, hijo o estudiante, así que con paciencia y constancia, y mucha perseverancia, podremos comenzar a incrementar el potencial de aprendizaje en el aula de clases.
A la hora de regresar del colegio, es seguro que tengas algunas tareas que realizar, por lo que deberás organizar tu espacio y tiempo para comenzar a desarrollarlas, y es aquí donde entran los tipos de hábitos de estudio que debemos aplicar, o en otro caso, enseñar a aplicar para un correcto desenvolvimiento y desarrollo académico.
Se pueden definir a los hábitos de estudio como todas aquellas conductas académicas que los estudiantes (de todos los niveles) emplean con regularidad para la consolidación de conocimientos.
Esto quiere decir que todos los tipos de hábitos de estudio buscan moldear al estudiante a cierta característica educativa, por lo que esto determinará qué tan rápido o qué tan lento el estudiante aprenda un tema, o varios temas.
Es importante reconocer cuáles hábitos de estudio se adoptan a cada estudiante, debido a que todos son distintos y todos tienen diferentes capacidades retentivas, esto significará que la elección correcta de la técnica de estudio a aplicar, será la que defina el éxito del progreso.
Dentro de los tipos de hábitos de estudio encontraremos las técnicas, que son las que serán empleadas de forma práctica por parte del estudiante, para que este pueda alcanzar el objetivo académico que se ha propuesto.
Podemos definir a las técnicas de estudios como todos aquellos métodos que facilitan el aprendizaje, que ayudan a incrementar el proceso de comprensión, memorización y por ende, el rendimiento académico.
Esto quiere decir que los hábitos son todas esas técnicas que se practican con regularidad. Contar con hábitos diarios de estudio y técnicas para organizar y facilitar la memorización de información nos ayuda a sentirnos más confiados y con mayor autoestima y motivación, ya que contamos con una estructura lógica y sólida para enfrentarnos a cualquier evaluación; sobre todo cuando se es estudiante universitario y el cúmulo de datos e información que se maneja es abrumador.
Uno de los consejos más habituales cuando hablamos de los tipos de hábitos de estudio es subrayar las partes más importantes de un texto o resumir las palabras del autor utilizando nuestras palabras. De esta manera, al subrayar los aspectos más importantes con un color, en el momento de la recuperación de la información en nuestra memoria resulta mucho más sencillo, ya que las palabras se codificaron distintas.
Algo similar ocurre con el resumen con nuestras palabras, es una manera eficaz de recuperar información valiosa, ya que todo el procedimiento de escribir y resumir crea nuevas vías mnémicas en nuestro cerebro que facilitaran la evocación del contenido.
Realizar una síntesis de un tema, o un resumen, puede ayudar a la capacidad analítica y sobre todo de memoria si realizas un esquema con el que puedas guiarte. De este modo, realizar un mapa mental ayuda a la memoria visual a recordar mejor términos y conceptos que de otra forma se vería subsumidos por la cantidad información.
Puedes utilizar las fichas de estudio para datos puntuales o cosas que necesites recordar muy bien, pero no para explicaciones largas. Se utilizan mayormente para ecuaciones, fechas, vocabulario y datos.
La organización es importante, y tener tu propia área de estudio puede significar mayor concentración al realizar las tareas.
Planifica el tiempo en el que realizarás actividades o estudiarás, así que debes establecer el horario y los días de estudio. Uno de los errores más usuales o malos hábitos de las personas que comienzan a implementar los tipos de hábitos de estudio es planificar todo muy cerca de las fechas de evaluación; en cambio, el procedimiento correcto es desplegar un temario bien dispuesto, con sus horas de práctica y teoría con antelación al examen, para garantizar el mejor provecho del tiempo.
Nunca estudies estando cansado y menos con sueño, esto repercutirá de manera negativa en el proceso de aprendizaje.
Realizar apuntes es una excelente herramienta dentro de los tipos de hábitos de estudio, esta se refiere a realizar apuntes en clases y pulirlos en casa, esto mejorará la comprensión de los temas que son tratados. Incluso si es una palabra o tu propia explicación del procedimiento, anótalo.
Entendemos que son hábitos de estudios bien planificados los que nos proporcionan las mayores probabilidades de alcanzar nuestras metas y que podemos irlos reforzando para hacerlos más efectivos, pero sabemos también que existen otros que no nos aportan ningún beneficio y que, por el contrario, nos generan serios problemas de salud o inestabilidad mental, como el consumo de sustancias prohibidas, cigarrillos, la ejecución de juegos de envite y azar, entre otros.
Adquirir hábitos que nos proporcionen bienestar, requiere tiempo y esfuerzo hasta que se tornen en costumbres que se vuelvan rutinarias. En la medida en que obtengamos buenos resultados producto de los buenos hábitos, su práctica se hará más frecuente de manera casi automática. Por otra parte, abandonar malos hábitos también requiere un trabajo arduo, que puede involucrar técnicas multidisciplinarias para su erradicación.
Habiendo explicado cómo formar el hábito de estudio en nuestras vidas, podemos pasar ahora a describir una lista de recomendaciones de hábitos que puedes incluir en tu rutina de modo que puedas fortalecer y aumentar tu proceso de aprendizaje, lo cual se verá reflejado en el rendimiento académico. Entre ellos se encuentran los siguientes:
Aplicar técnicas de planificación y organización del tiempo te ayudará a aprovechar las sesiones de estudio y hacerlas más eficientes. Con un plan de estudio puedes organizar el horario de tus sesiones, las horas que invertirás y los días, además al usar el calendario te beneficiará para organizar los tiempos de entrega de trabajos, así como, las fechas de actividades importantes.
Esta acción es un buen hábito de estudio que permite analizar, retener y reflexionar lo que escuchamos en clase a medida que vamos escribiendo. Igualmente, revisar y leer regularmente los apuntes nos permitirá refrescar la información pudiendo pasarla a nuestra memoria a largo plazo.
Implementar una metodología de administración del tiempo lo cual beneficia a la capacidad de concentración. Se puede aplicar la Técnica Pomodoro que consiste en considerar cada 25 minutos de concentración como un “pomodoro” y, por cada uno de estos hacer descansos de 5 minutos.
Este hábito de estudio significa leer de manera regular libros complementarios a los temas de estudio, tomar notas de lo leído, revisar los materiales dados en clase. También involucra que el estudiante practique la comprensión lectora para que pueda explicar lo leído con sus propias palabras.
Es bueno para tu proceso de aprendizaje el aplicar técnicas como son: mapas conceptuales o mentales, resaltar información, realizar resúmenes analíticos, crear fichas y cuadros comparativos para procesar eficientemente los contenidos dados en clase o leídos en libros.
Ahora bien, crear el hábito de estudio puede ser un poco engorroso, sin embargo mantener uno es el verdadero reto. Por lo tanto, podemos decirte que lo más importante es la disciplina y la motivación para seguir adelante con el fin lograr las metas de estudio trazadas. Igualmente, podemos aplicar otros hábitos que nos ayudarán a estar en buenas condiciones para el estudio, como son los siguientes:
Implementar los tipos de hábitos de estudio, permite organizar eficazmente una rutina diaria de aprendizaje óptima, a la vez que conocer los métodos de memorización y síntesis de la información, nos ayuda a rendir estupendamente en cualquier evaluación y garantizar nuestro perfil de buen estudiante. Sin embargo, existe otro recurso que puede agilizar nuestras jornadas de estudio: la educación virtual y las nuevas tecnologías; tomar un curso vía online no solo es más barato y nos proporciona más comodidad, como flexibilización en el horario o visualizarlo desde casa, también es un contacto con la metodología a distancia que nos preparara para la educación del futuro.
En la actualidad, existen distintas plataformas educativas digitales con un cargado catálogo de cursos y especializaciones en cualquier tema, no obstante, la más destacada es la Escuela de Negocios Especializada en la Formación en línea de Euroinnova por su impresionante repertorio de temas educativos y el aval de las más prestigiosas universidades alrededor del mundo. En su plataforma no solo encontrarás consejos sobre los hábitos saludables de estudio, sino especializaciones en distintas materias de tu elección, como un curso en lingüística o matemáticas avanzadas.
Euroinnova tiene un Curso de Técnicas de Estudio con modalidad online, el cual tiene una duración de 150 horas y puede prepararte de la mejor manera para que afrontes todas las dificultades a la hora de estudiar o ayudar a otros a realizar lo mismo. Conocer y aplicar los tipos de hábitos de estudio podría ayudarte en gran manera en tu estadía en el plantel educativo.
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