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El mundo se encuentra en constante cambio y, en la actualidad, los procesos de reclutamiento laboral no se circunscriben a la trayectoria profesional y estudios especializados únicamente, sino que también se toman en consideración las destrezas y habilidades de un profesionista, constituyendo estos, parte de los atributos necesarios para lograr el éxito.
Las habilidades de un profesionista, o las destrezas profesionales, son un conjunto de actitudes, tacto y maestría para relacionarse y ofrecer ideas innovadoras, todo esto, con el objeto de desempeñarse y utilizar mejor los recursos aprendidos en el campo laboral.
El mundo actual, acelerado por los cambios y la competitividad, ha hecho imprescindible modificar los parámetros y requisitos en la selección del personal optativo para un puesto de trabajo. Es cierto que un currículo profesional certificando nuestro dominio técnico y formación académica puede abrirnos paso entre la gran demanda de postulaciones, pero hoy en día ya no lo es todo.
No obstante, en las entrevistas de trabajo, los seleccionadores de candidatos exploran las diferentes destrezas y habilidades de un profesionista. En efecto, contar con diferentes recursos, como la asertividad en la comunicación, la resolución de conflictos de forma pacífica y aportar innovación y creatividad a los problemas, es una ventaja en la consecución del éxito laboral.
Son las más valoradas en la actualidad para ocupar un puesto de trabajo. Son aquellas que se logran demostrar al momento de ejecutar el trabajo, y no están relacionadas únicamente con los conocimientos, sino además con poner en práctica la combinación de habilidades sociales, de comunicación y capacidad de acercamiento con los demás.
Estas habilidades de un profesionista son altamente reconocidas por las empresas, pues generan un ambiente de trabajo bastante agradable y un clima organizacional de entendimiento y cooperación.
El buen desenvolvimiento en un área de trabajo, está fuertemente cifrada en las habilidades de un profesionista. La capacidad de flexibilidad y de adaptación son dos elementos muy valorados en el mundo de los adelantos tecnológicos y el cambio constante, en este apartado, desarrollaremos estos puntos y algunos más.
Las cinco habilidades blandas que más buscan los empleadores son las siguientes:
La capacidad de transmitir información importante y el que surjan nuevas ideas, además de poder hablar en público y expresarse en forma adecuada es clave. Comunicarse en forma eficiente y correcta es un aspecto de importancia para las empresas y es por ello que dentro de ellas se valoran inmensamente estas habilidades de un profesionista.
Las instituciones laborales cada vez más han dado paso a modelos interdisciplinarios, es decir, las organizaciones emplean departamentos con profesionales de diferente índole y provenientes de cuerpos de conocimiento heterogéneos. Por este motivo, ser capaz de integrar equipos de trabajo con buena comunicación y proactivos es una habilidad esencial para los reclutadores de talento profesional.
Las relaciones personales y, sin duda, la dinámica dentro de un equipo de trabajo debe soportar distintas presiones y tiempos de entrega. Por esta razón, poseer la habilidad de dialogar, expresar ideas y saber afrontar emociones negativas es vital para la comunicación entre el personal.
Al mismo tiempo, en esta articulación de destrezas profesionales se practica la empatía y la forma de comprender el otro. Todas estas habilidades de un profesionista son primordiales para pertenecer a un empleo.
Entre las habilidades de un profesionista, estas dos características siempre vienen aparejadas y son útiles para afrontar las diversas situaciones laborales. De este modo, la adaptación se apoya mucho en la creatividad y esta, a su vez, en la adaptación.
Dentro de una empresa ocurren cambios de estrategias, eventos imprevistos y dificultades que surgen en el momento, por supuesto, en estas circunstancias se requiere de la toma de decisiones y de un profesional dotado de pensamiento flexible, creativo y crítico.
Es usual que muchos trabajadores respondan a las demandas del ambiente de forma mecanizada y rutinaria, sin embargo, ser capaz de aportar nuevas perspectivas y alternativas diversas es una competencia laboral muy valorada.
Entre las habilidades de un profesionista esta se refiere a la capacidad de planificación, organización y ejecución de tareas. Entre el gran cúmulo de información manejado en cualquier ámbito industrial, se necesita empleados con recurso de análisis, síntesis de información y, precisión a la hora de actuar.
Al mismo tiempo, la mayoría de los procesos laborales están automatizados y con equipos digitales que necesitan una manipulación precisa y eficaz.
Siempre se toman decisiones en nuestra vida cotidiana, tanto a nivel personal como profesional. Es necesario contar con personas que tengan la capacidad de tomar decisiones correctas en situaciones que sean complicadas.
Dentro de las habilidades de un profesionista también deben estar las digitales. Estas implican el uso creativo y crítico de las tecnologías de la información y la comunicación para lograr objetivos relacionados con el trabajo. Con la llegada de la tecnología, las habilidades digitales son muy tomadas en cuenta dentro de las organizaciones, empresas o en cualquier área laboral.
Suponen en sí los conocimientos y estrategias que se requieren para el uso de los medios digitales y de las tecnologías de la información y comunicación. Está apoyada en el uso de ordenadores y similares para la participación en redes de colaboración mediante Internet.
Es recomendable capacitarse en el área, pues de esta forma podrás adaptarte y desenvolverte en el entorno digital. Recuerda que los reclutadores las tomarán en cuenta durante el proceso de selección. El éxito siempre dependerá de tu formación, pero también de las habilidades y competencias, además de las destrezas con las que cuentes.
Dentro de las habilidades digitales del siglo XXI se encuentran:
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Las habilidades de un profesionista son altamente apreciadas, pero también lo son las competencias con las que cuenta. Antes de señalar cuáles son algunas de estas competencias laborales más valoradas dentro de las empresas, es necesario establecer la diferencia entre una habilidad y una competencia. La habilidad es la capacidad de la persona de realizar una tarea, y la competencia es la ejecución de esa tarea, pero con experiencia y conocimiento.
Un profesional exitoso cuenta con habilidades y competencias bien definidas. Existen distintos tipos de competencias laborales:
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