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Hoy en día, el Bluetooth es una de esas tecnologías que damos por sentado, pero ¿te has preguntado cómo funciona o por qué se ha vuelto tan indispensable? Desde su creación en los años 90, ha transformado la manera en que conectamos dispositivos: permite una comunicación rápida y sin cables entre teléfonos, auriculares, ordenadores y más. Su simplicidad y eficiencia han hecho que esté presente en todo tipo de actividades cotidianas, desde escuchar música hasta trabajar o conducir. En este artículo, exploraremos qué es el Bluetooth, cómo funciona y por qué sigue siendo clave en un mundo cada vez más conectado.
El Bluetooth es una tecnología que permite establecer conexiones inalámbricas rápidas de baja latencia y a corta distancia entre dispositivos de diverso tipo. Para que sean compatibles entre sí, estos dispositivos deben contar con un chip que permita tanto la transmisión como la recepción de datos, proceso que ocurre gracias a una potencia de banda mínima de 2,4 GHz. Con este tipo de conexión de punto a punto, se prescinde de cableado innecesario, se optimiza el consumo energético de los aparatos electrónicos (low energy) y se favorece la utilización de diversas herramientas al mismo tiempo, como ocurre con los aparatos periféricos, ya sean de entrada o salida. La distancia mínima de conexión es de 10 metros, pero puede llegar a extenderse hasta los 100 en determinados tipos de dispositivos.
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¿Podríamos ser conscientes de la cantidad de dispositivos, aparatos y accesorios que tienen integrado el Bluetooth? Queda claro que son muchos y que gran parte de ellos integran nuestras actividades cotidianas en mayor o menor medida. De hecho, en este momento, mientras lees este artículo, tu móvil podría estar conectador a un altavoz en el que se está reproduciendo tu canción favorita. Aquí te damos un breve resumen de los principales dispositivos que usan Bluetooth.
Los dispositivos con Bluetooth que encabezan la lista son, desde luego, los teléfonos móviles. Antes de integrar esta tecnología, estos contaban con otros medios de transferencia de datos, como la conexión USB o el muy recordado infrarrojo. Como en el mundo de la tecnología menos significa más, las empresas más importantes de telefonía han apostado por integrar en los móviles las herramientas más poderosas para el emparejamiento de dispositivos mediante Bluetooth. De ahí que los smartphones ahora mismo puedan conectarse a casi cualquier aparato.
Hasta hace algunos años, los ordenadores no tenían integrado por defecto el Bluetooth. No obstante, siguiendo el profuso desarrollo de aplicaciones y dispositivos (véase también el internet de las cosas), actualmente, es inconcebible imaginar una computadora o portátil sin este tipo de conexión. Destinado al entretenimiento o el trabajo, el Bluetooth en los ordenadores amplifica la posibilidad de trabajar con aparatos de salida y entrada, lo que facilita la administración de recursos electrónicos sin cableado de por medio.
El ratón o mouse, como se conoce popularmente en Latinoamérica, es uno de los artículos periféricos que más pronto hizo suya la tecnología Bluetooth. Existen en el mercado un sinfín de versiones orientadas no solo al trabajo, sino también al creciente campo del gaming. Con diseños ergonómicos y cada vez más veloces, los usuarios optan por la sensibilidad más alta medida por los DPI y botones programables.
Los teclados con cable aún son muy populares en el mercado, más aún en contextos de oficina o trabajo estacionario. Sin embargo, las versiones con Bluetooth integrado son cada vez más comunes debido a su versatilidad e integración multidispositivo. Así, un teclado con este tipo de conexión puede utilizarse en tabletas (donde es más común), teléfonos inteligentes y portátiles conectados a más de un monitor.
También se encuentran los dispositivos que reproducen música y sonido mediante Bluetooth. Los más comunes son los auriculares y los altavoces, los cuales necesitan emparejarse con otros aparatos, que son los que emiten las señales que deberán ser descodificadas. En el mercado, se encuentran productos de diversa gama, desde los más básicos hasta los más avanzados, orientados para el trabajo profesional.
La tecnología Bluetooth se encuentra integrada en los automóviles a través del car kit. Las funcionalidades más básicas son la reproducción de música y la realización de llamadas, pero también la utilización de aplicaciones de mapas, como Google Maps y Waze. Los coches más modernos llevan integradas pantallas táctiles y tecnología de punta para el control de diversas funcionalidades del coche, las cuales necesitan del Bluetooth para optimizar sus resultados.
Aunque las impresoras suelen trabajar con tecnología Wi-Fi, que hace de las conexiones mucho más rápidas, también cuentan con la opción de emparejamiento por Bluetooth. Con esto, los usuarios pueden controlar este dispositivo, sobre todo, desde algún teléfono inteligente o una tableta.
Las primeras consolas de videojuegos tenían los mandos conectados por cable (véanse Atari, PlayStation, Sega, Nintendo, entre otros). Con la revolución digital y tecnológica desde inicios del siglo XX, las empresas encargadas de su desarrollo promovieron la creación de mandos y controles basados en conexión Bluetooth. Esta optimización no solo condujo a la movilidad y ampliación de las posibilidades de los videojuegos (el caso modélico es el Nintendo Wii), sino también la comodidad de los usuarios.
Tampoco podían dejar de mencionarse las tabletas, los dispositivos electrónicos que engrosan la lista de innovaciones tecnológicas de la última década. Con una potencia similar a la de un ordenador y las funcionalidades más utilizadas de los teléfonos móviles inteligentes, tienen el Bluetooth como algo fundamental. De hecho, al hablar de tecnología de punta, hablamos de tabletas con las versiones más recientes de este tipo de conexión inalámbrica. El más claro ejemplo de esta innovación es AirDrop de Apple, el cual, mediante Bluetooth, permite la transferencia de datos de manera rápida y estable.
Este es un ejemplo de cómo conectar un teléfono móvil a unos auriculares Bluetooth. La interfaz de emparejamiento y gestión de la conexión puede variar entre dispositivos y sistemas operativos; no obstante, en todos los casos, se siguen los siguientes pasos básicos:
Encender Bluetooth > buscar dispositivos > emparejar > conexión
Los accesorios de audio, por ejemplo, tras el emparejamiento, proveen conexión automática. Un caso modélico de esto son los AirPods, los cuales se conectan con el iPhone una vez retirados de su estuche y colocados en las orejas.
Veamos a continuación estos pasos de manera detallada:
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La línea de tiempo del Bluetooth empieza en 1994, cuando la compañía Ericsson inicia su trabajo de desarrollo de una tecnología capaz de conectar dispositivos de manera inalámbrica. Desde entonces, se han lanzado diversas versiones más veloces, multipunto y con mayor rango de conexión en metros, lo que ha impactado positivamente, sobre todo, en la reproducción de audio de alta fidelidad en auriculares y altavoces HQ. Además, introdujeron optimizaciones en torno a la eficiencia energética, de tal manera que el avance entre las versiones clásicas y las versiones low energy es abismal. Si bien ahora los dispositivos más modernos cuentan con la versión 5.4, se espera el próximo lanzamiento de la versión 6.0, dotada de grandes posibilidades para explotar al máximo el internet de las cosas (IoT).
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