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El Benchmarking es una técnica con un planteamiento muy sencillo: analizar que están haciendo otras empresas que tienen éxito para poder replicarlo. No se trata de copiar una acción concreta, si no más bien fijarse en los procesos y métodos personalizándolos a las necesidades específicas de la empresa.
¿Te interesa el tema? En este artículo profundizamos más sobre el benchmarketing y las razones que finalmente te convencerán para aplicarlo.
Ya sabemos a grandes rasgos qué es el Benchmarking, se trata de tomar como referencia los puntos fuertes de otras empresas, las cuales no tienen que ser necesariamente del mismo sector, analizar e identificar las buenas prácticas para, posteriormente, implementarlas y adaptarlas a tu empresa con el fin de mejorar estrategias, flujos o metodologías.
¿Cómo? En primer lugar, es fundamental saber qué se quiere comparar para buscar empresas que nos puedan servir de referencia.
Una vez tengamos esto claro, determinaremos el tipo de Benchmarking que vamos a emplear (hablamos más extensamente sobre esto en el siguiente apartado)
Hechos estos pasos previos, ahora si, procedemos al análisis y evaluación comparativa de la estrategia, que nos permitirá obtener resultados.
Finalmente, se lleva a cabo una profunda valoración de los mismos y se implementan las propuestas que se han definido como las mejores.
Este plan de acción es clave para el éxito empresarial por varias razones:
Por todo lo anterior, el Benchmarking es una herramienta poderosa para impulsar el éxito empresarial mediante la adopción de las mejores prácticas y la mejora continua.
Como adelantábamos, existen diferentes tipos de Benchmarking, a continuación explicamos cada uno de ellos para que puedas elegir el que más se adapte a tus necesidades
Consiste en comparar los procesos y resultados entre diferentes departamentos o unidades de una misma organización. Ideal para grandes empresas con múltiples divisiones, permite identificar las mejores prácticas internas y replicarlas para mejorar la eficiencia en toda la compañía.
Implica analizar y comparar los procesos de la empresa con los de otras organizaciones del mismo sector o incluso de sectores diferentes. Ayuda a entender cómo las prácticas líderes pueden ser adaptadas para optimizar las operaciones y ganar competitividad.
Se centra en estudiar empresas de cualquier sector que sean sobresalientes en áreas específicas, como logística o atención al cliente. Este enfoque rompe barreras industriales y promueve la innovación mediante la adopción de ideas aplicables a cualquier negocio.
Analiza directamente a los competidores más relevantes del mercado. Permite evaluar sus fortalezas y debilidades, identificar oportunidades de mejora y desarrollar estrategias que den una ventaja clara en la industria.
Cada tipo de benchmarking tiene unas características específicas que lo hacen adecuado según los objetivos específicos de la empresa. ¡Asegúrate de elegir aquel que tenga el enfoque que mejor impulse tu crecimiento!
Planificación: Define claramente qué deseas medir, a quién compararás y cómo lo harás. Establece objetivos concretos y forma un equipo responsable del proyecto.
Recopilación de datos: Investiga y obtén información relevante sobre las prácticas y resultados de las empresas a analizar, ya sean internas o externas.
Análisis: Identifica las brechas de rendimiento y detecta las áreas en las que tu negocio puede mejorar aplicando las mejores prácticas observadas.
Implementación: Adapta las estrategias y procesos destacados para tu propia organización, asegurándote de personalizarlas según tus necesidades.
Seguimiento y evaluación: Mide los resultados tras la implementación y realiza ajustes según sea necesario para garantizar mejoras sostenibles.
Toyota es conocida por su método just in time, o lo que es lo mismo, producir solamente lo necesario, en el momento oportuno. El objetivo principal de este método de producción es eliminar los costes a través de la reducción de desperdicios en el proceso. Para su desarrollo estudiaron empresas como Ford para adoptar prácticas como la fabricación en línea, que finalmente convirtió a Toyota en un líder en la eficiencia automotriz.
Otro caso llamativo es el de Apple y su diseño revolucionario. Para encontrar este estilo diferenciador, así como la apuesta por la experiencia del usuario, analizan a competidores y empresas de sectores externos, como el diseño industrial, para desarrollar productos innovadores que destacan por su simplicidad y usabilidad, redefiniendo los estándares en tecnología.
Un ejemplo de Benchmarking interno es el de McDonald's. Esta empresa analiza el desempeño de sus franquicias, analiza aspectos como la velocidad de servicio, limpieza y satisfacción del cliente. Estas comparaciones internas les permiten identificar las prácticas más efectivas y replicarlas en todas sus ubicaciones globales.
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