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Es cierto que mencionar suelo pélvico y deportes de impacto en la misma frase no tiene connotaciones muy positivas en términos de salud. Por eso, si eres aficionado o aficionada, a deportes como el running, el crossfit, el tabata u otro tipo de entrenamientos por intervalos, el fútbol, el baloncesto, los saltos a la comba, u otros que requieran de carreras y saltos, te interesará leer este post para compaginar tu afición con tu salud.
Antes de profundizar en cómo afecta el deporte a la zona del suelo pélvico, hay que señalar que, fortalecerla, no es solo importante para las mujeres, sino también para los hombres.
Aunque, ciertamente, el suelo pélvico, desempeña funciones fundamentales en el cuerpo femenino, como aguantar los órganos durante el embarazo, los hombres también deben atender a esta zona por motivos que expondremos más adelante.
El mundo del deporte es muy amplio y evoluciona según tendencias, necesidades y retos que los deportistas van desarrollando. Además, la sociedad en general, cada vez está más concienciada sobre la importancia de practicar ejercicio de forma habitual para la salud, y es por eso que, más allá de la competición, la nueva corriente del deporte está orientándose hacia la satisfacción personal, la salud física y mental.
No todos los deportes repercuten negativamente en esta área, existen otras actividades que mejoran la salud del suelo pélvico. ¡Descubre más sobre este tema en el blog de Euroinnova!
Antes de ver por qué el suelo pélvico y los deportes de impacto no se llevan del todo bien, veamos qué se entiende por deportes de impacto.
Los deportes de impacto son aquellos que implican saltos, carreras, giros y otros movimientos bruscos que generan una carga significativa en el cuerpo al entrar en contacto con una superficie rígida, como el suelo o una pared. Estos deportes pueden incluir actividades como el baloncesto, el voleibol, el fútbol, el tenis, el salto de altura, el boxeo, entre otros. Debido a la naturaleza de estos deportes, pueden causar un mayor riesgo de lesiones musculoesqueléticas, especialmente en las articulaciones y huesos. Por lo tanto, es importante que los deportistas tomen medidas para minimizar el riesgo de lesiones, como usar equipo de protección adecuado, estirar y calentar adecuadamente antes de la actividad física y realizar una técnica apropiada en el deporte.
Cómo indicamos, los deportes de impacto pueden afectar negativamente al suelo pélvico debido a la carga repetida que se genera en la zona pélvica durante la actividad física. Esto puede causar un debilitamiento de los músculos del suelo pélvico y provocar problemas como la incontinencia urinaria, el prolapso de los órganos pélvicos y la disfunción sexual. Además, algunos deportes de impacto, como el levantamiento de pesas o el crossfit, pueden requerir la realización de ejercicios que involucran una alta presión intraabdominal, lo que puede aumentar aún más la presión en el suelo pélvico y empeorar los síntomas de debilidad. Por lo tanto, es importante que las personas que practican deportes de impacto presten atención a su suelo pélvico y realicen ejercicios específicos para fortalecer esta zona y prevenir lesiones o disfunciones en el futuro.
Está claro que los deportes considerados de impacto no son nada positivos para mantener el suelo pélvico firme, pero, dentro de este grupo, hay cuatro deportes que, si tenemos el suelo pélvico débil, no deberemos practicar en ninguna circunstancia.
Gimnasia: debido a la alta presión intraabdominal y la realización de movimientos que requieren una gran fuerza en los músculos abdominales y del suelo pélvico.
Levantamiento de pesas: deportes como la halterofilia consisten principalmente en el levantamiento de cargas pesadas, lo que aumenta la presión en la zona pélvica.
Crossfit: esta modalidad de entrenamiento funcional incluye muchos ejercicios consistentes en el levantamiento de cargas pesadas y en la realización de ejercicios de alta intensidad, como burpees o sprint, lo que también ejerce presión excesiva en el suelo pélvico.
Running de larga distancia: debido al impacto repetido que se produce en la zona pélvica durante la carrera, a la larga, también debilita los músculos del suelo pélvico.
Boxeo: los golpes repetidos en la zona abdominal y pélvica, muy fácilmente, pueden llegar a debilitar los músculos del suelo pélvico.
Ciclismo: por la presión constante que se ejerce en el periné durante la práctica del ciclismo, lo que puede generar problemas en el suelo pélvico como incontinencia urinaria o disfunciones sexuales.
Si te gusta el deporte, o eres aficionado a alguno de los anteriormente mencionados, esperamos que este post te haya servido de ayuda para mejorar la salud de tu suelo pélvico. Descubre más sobre salud y bienestar en el blog de Euroinnova o especialízate con nuestro catálogo formativo, cien por cien online, en el área que más te motive.
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