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¿Te apasiona el mundo de las transacciones entre los países? Si la respuesta es sí, el comercio internacional está hecho para ti. Por un momento, imagínate trabajando en un aduana o consiguiendo acuerdos comerciales para tu país. Sin embargo, antes de adentrarte en el mercado laboral es importante que conozcas las teorías del comercio internacional.
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El comercio internacional está adquiriendo una gran importancia en el panorama mundial. Y es que la pandemia y, sobre todo, la guerra entre Rusia y Ucrania, están obligando a los países a buscar nuevas alianzas comerciales para satisfacer las necesidades de sus poblaciones.
En términos generales, el comercio internacional es el intercambio de bienes y servicios entre todos los países del mundo. Como bien sabes, un país acude al extranjero en busca de los bienes y servicios que demande su población y que sea incapaz de producir. Por otro lado, también vende a otros países lo que le sobra o produce en exceso.
Por otro lado, cada país tiene su propia moneda y sus propias leyes. Por este motivo, todos cuentan con un servicio aduanero, que se encarga de vigilar la entrada y salida de bienes de un país. Si hay alguna anomalía en cuanto a impuestos y tributaciones, se encarga de cobrar lo que pertenezca. También, tienen cuidado de que no entre ninguna sustancia, producto o bien ilegal.
El comercio internacional beneficia a todo el mundo desde un punto de vista global. Y es que, gracias a este intercambio de bienes y servicios, cada país puede avanzar prósperamente y satisfacer las necesidades de sus ciudadanos. Por ejemplo, no todos los países cuentan con reservas de petróleo, por lo que acuden fuera de sus fronteras para abastecer a su población.
Como venimos diciendo, el comercio internacional favorece a todos los países. Los países menos desarrollados se aprovechan de la venta de sus bienes y servicios para mejorar sus infraestructuras y servicios, mientras que acceden a un dinero que les permite adquirir otros bienes. Los países más desarrollados siguen creciendo económicamente gracias a este comercio.
Ahora bien, el comercio internacional siempre ha estado en boca de todos, siendo objeto de debate continuamente. Cuestiones como la ética, la eficiencia y el futuro son tratadas y puestas en tela de juicio. De esta manera, se han desarrollado distintas teorías del comercio internacional. ¿Vamos a verlas?
Vamos con la primera de las teorías del comercio internacional. El mercantilismo se desarrolló entre los siglos XVI y principios de XVIII y se caracterizó por un fuerte intervencionismo del Estado y un alto proteccionismo. Al final, se consideraba que una nación era potente según el capital que podía acumular para, después, intercambiarlo con el exterior.
En cuanto a las ideas o conceptos que se potenciaban en el mercantilismo, podemos diferenciar los siguientes:
Seguimos con las teorías del comercio internacional. La teoría clásica reinó entre los siglos XVIII y mitad del siglo XX. En este caso, se rechazó la intervención del Estado y se cambió de pensamiento a seguir. Hicieron hincapié en identificar cómo se distribuía la riqueza que en ver cómo se creaba.
De esta manera, la teoría clásica quería encontrar aquellos campos donde se creaba más valor. Apostando por una intervención del Estado limitada, sostenían que cada persona debía de tener cierta libertad en la búsqueda de su interés propio, ya que también aportaría algo al bien general.
De esta teoría se desprenden otras que vamos a ver a continuación.
Esta teoría fue creada por David Hume, que estipuló que a lo largo plazo, tener mucho dinero era perjudicial para un país porque aumentaban los precios y los salarios. Apuesta por el control de los precios con el fin de que ningún país tenga una cantidad de dinero excesiva y, además, porque cada país mantenga su actividad productiva.
En este apartado se habla del papel del Estado, que no puede intervenir en la asignación de los recursos. Por otro lado, estas teorías del comercio internacional vienen a decir que el Estado debe tener un papel secundario, administrando las leyes necesarias y creando las infraestructuras que se demanden.
Esta teoría fue creada por David Ricardo, que no considera únicamente que productos son más baratos. Antes se pensaba que si un producto era más barato en otro país, era más eficiente. Ahora, se tiene en cuenta el tiempo que se tarda en producir ese bien. Por ejemplo, a lo mejor en España se tarda 80 horas en producir vino, mientras que en Francia tardan 120 horas. Desde este punto de vista, sería más eficiente España.
Michael Porter, en una de estas teorías del comercio internacional que estamos hablando, considera que el factor diferencial está en la tecnología. Los países más adelantados en este sector son los que tienen una ventaja competitiva con el resto.
Esta teoría se dio en la segunda mitad del siglo XIX, el proceso productivo comenzó a especializarse y a introducir mejoras que aumentaron la eficacia. Por esto, se comenzó a analizar cada factor y cómo contribuía al proceso. El fin no era otro que el de corregir e intentar mejorar todos los principios de las teorías del comercio internacional que ya hemos tocado.
Cada país tiene que conocer cuáles son sus puntos fuertes y cuáles los débiles. Y es que, tu país puede tener un gran capital e infraestructuras, las cuáles tendrá que potenciar, mientras que otro país puede contar con una excelente mano de obra, por lo que tendrá que buscar otro tipo de bienes. Al final, esta teoría profundiza en el análisis.
Entramos en el siglo XX para hablar del modelo Keynesiano, que en pocas palabras busca un liberalismo clásico con ciertas intervenciones del Estado. También defendía que cualquier economía se podía reactivar con un aumento de la tasa de empleo y una redistribución de los ingresos.
¿Por qué defendía la intervención del Estado cuando fuese necesario? Porque había que otorgarle cierto poder en los momentos en los que la economía entraba en crisis. Y es que tenía que aumentar el gasto para contrarrestar dicha crisis. Por otro lado, apostaba por los aranceles y por la necesidad de tener tasas de cambio variables.
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