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¿Interesado en potenciar tu empresa con Heijunka? Euroinnova te cuenta cómo.
En los últimos años han surgido diversos métodos para optimizar los procesos de producción. Entre ellos, encontramos el método Heijunka, que poco a poco ha copado la atención de empresas y compañías. Los beneficios que ha generado en todo el mundo hicieron que muchos posaran los ojos sobre sus principios y herramientas. Y nosotros, en Euroinnova, te queremos contar un poco más sobre Heijunka para que logres tus objetivos y satisfagas las expectativas de tus clientes. ¡Continúa leyendo para saber más!
Empecemos con que esta palabra es de origen japonés. Su traducción, sencilla pero precisa, es "nivelación". Una primera lectura no dice nada, pero en el contexto del Lean Manufacturing dice mucho. Se trata de "nivelar" la producción para satisfacer la demanda. Este aspecto es sumamente relevante en tanto permite afrontar las necesidades de los clientes mientras se busca reducir las pérdidas y desperdicios durante el proceso de producción. En comparación con la fabricación masiva, pretende disminuir o abandonar, como respuesta a las fluctuaciones del mercado, los lotes. Estos eventualmente provocan sobreproducción, exceso en los inventarios, fatiga en la maquinaria, sobrecarga laboral, entre otros. En este sentido, una definición más acotada indica que es un método o sistema de producción para el mejoramiento de la logística y el orden dentro de una empresa. Estamos, entonces, frente al método Heijunka.
Surge una pregunta importante: ¿cómo surge la desnivelación? Partamos de que la producción necesita personal, maquinaria, tiempos de trabajo, priorización de tareas. Todos estos elementos están interrelacionados, puesto que para elaborar diferentes productos se requieren especialistas, herramientas específicas y dedicación en función de la complejidad de las actividades. Por lo tanto, al existir la priorización de un productos, surge el desbalance. Incluso, ante la escasez de un material o la llegada de pedidos sin un orden lógico, los procesos de producción sufren alteraciones. Justamente, es aquí donde entra a tallar la necesidad de un flujo continuo.
Entonces, ¿cómo lograr la nivelación? Si consideramos que toda empresa debe optimizar el tiempo de trabajo y mejorar la calidad/valor del producto, es necesario aplicar lo que señala el método Kanban. Este consiste en producir cuando haya demanda de los clientes. Esto es, desde luego, un reto, porque anticipar la demanda es difícil. No obstante, una manera de amortiguar los impactos es nivelar la producción. Para esto, se nivela el volumen de ítems (nivelación de volumen) de cada lote y se nivela por tipo (nivelación de tipo) según se añadan nuevas secuencias de productos.
El método Heijunka cuenta con una serie de herramientas para asegurar un adecuado flujo de producción. A continuación, te presentamos las más relevantes.
La producción debe adaptarse a las expectativas y necesidades de los clientes. Por lo mismo, debe establecerse un ritmo de producción. Esto se logra a partir de la obtención de un indicador de frecuencia de compra de los clientes, ya sea por día, semana, etc. El objetivo primario es conocer la cantidad de productos que deben estar listos para cada momento.
Se trata de un diagrama que permite a gestión visual de todo el proceso de producción. Se basa en la tarjetas Kanban, las cuales contienen las actividades de un tiempo determinado.
Es necesario evitar realizar más operaciones de las que se necesitan. En otras palabras, la adecuación sigue de la mano de los pedidos del cliente. De ahí que se logra optimizar los inventarios y el flujo del producto de acuerdo con la demanda.
Se espera, en todo momento, minimizar la diferencia de producción entre periodos. Por lo tanto, si cabe la posibilidad de elaborar el mismo producto cuando la demanda es similar, debe hacerse. Esta nivelación es posible gracias a la aplicación de una matriz comparativa. Con esta se ordenan las cifras de la producción, como los tiempos de demora, personal especializado, etc.
Con el flujo de planta creado, es necesario que la empresa o compañía se enfoque en las máquinas según el producto. Esto es importantísimo en tanto mejora los tiempos. Entonces, conformar células de trabajo permiten liberar procesos uno tras otro, lo que provoca mayor flexibilidad en la producción.
Con todo, el método Heijunka permite manejar lotes reducidos, se fabrican productos en flujos continuos, se nivela la producción y se reduce el inventario. ¿Te gustaría saber más sobre este método y cómo aplicarlo en tu empresa? Euroinnova te cuenta más sobre su oferta educativa 100 % online.
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