Curso de Biblioteconomía y Documentación (Titulación Universitaria + 6 ECTS)
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Las bibliotecas escolares o bibliotecas educativas son espacios educativos de documentación, información y formación. Los recursos bibliográficos aquí disponibles se ponen a disposición de toda la comunidad escolar para apoyar el proceso de enseñanza-aprendizaje, entre otros objetivos. Para ello, se precisan de profesionales especializados que organicen y gestionen el espacio. ¡Descubre cuáles son las funciones de un bibliotecario escolar! ¡A por ello!
Dentro de la biblioteconomía contamos con un gran abanico de posibilidades y de salidas laborales. De hecho, los programas didácticos de biblioteconomía y archivística son variados: existen cursos que te facilitan una visión más general del sector y otros que sirven para especializarte en la documentación en bibliotecas o archivos documentales.
Además, ya puedes dejar de preocuparte por la falta de tiempo. Y es que, nuestra formación sigue una modalidad a distancia y 100% online, lo cual significa que nos adaptamos a ti y a tu ritmo de vida teniendo en cuenta tu situación personal y profesional. Así que, puedes especializar tu profesión sin miedo. ¿Estás preparado? ¡Descubre las funciones de un bibliotecario escolar!
Una biblioteca escolar es una colección de obras de ámbito educativo elegidas según ciertos principios directivos, puestas en orden materialmente y catalogadas según un cierto sistema. Por supuesto, deben ser fácilmente accesibles a los estudiantes y con seguridades de conservación en el estado que sus autores y editores entregaron las obras.
Una biblioteca es una colección de material organizada para que un grupo de usuarios accede a ella. "
Eso sí, debemos tener en cuenta que esta institución cuenta con personal encargado para los servicios y programas relacionados con las necesidades de información de los lectores. Especialistas con diferentes funciones, como el gestor de proyectos o bibliotecario. ¿Te gustaría convertirte en todo un profesional en bibliotecas escolares?
Un aspecto importante que debes tener en cuenta antes de especializar tu profesión y que debes conocer bien son las funciones de un bibliotecario escolar. Veamos:
El bibliotecario es responsable de organizar y clasificar los libros, revistas, periódicos, películas y otros materiales de la biblioteca, para que los usuarios puedan encontrarlos fácilmente. Para ello deberá tener divididas las estanterías por secciones con sus respectivas señalizaciones (carteles y letreros que guíen a los usuarios), especialmente si el tamaño de la biblioteca es grande y tiene varias plantas.
El material de una biblioteca, además, debe estar ordenado de forma lógica, que haga que el usuario pueda encontrar el libro que busca de forma intuitiva. Por ello, entre las funciones de un bibliotecario distinguimos el ordenar los libros alfabéticamente, por tipología y/o por temática para facilitarle la experiencia al usuario.
El bibliotecario también es responsable de catalogar y etiquetar los materiales. Más allá de cuestiones organizativas como la anteriormente descrita, etiquetar el material ayuda a cuantificarlo, a detectar necesidades bibliográficas que puedan suplirse y a identificar cada libro de forma individualizada. Para ello, cada libro ha de tener un código único. También puede marcar cada libro con alguna seña en función de sus características de préstamo, por ejemplo, si unos libros se dejan prestados durante más tiempo que otros, o cuáles requieren una prórroga.
El bibliotecario es responsable de prestar y devolver los materiales a los usuarios, y de mantener un registro preciso de los préstamos. En las bibliotecas más tradicionales se llevaba un registro manual de los libros. Para ello se utilizaba una hoja de papel con cuadrículas en las que se iba marcando la disponibilidad de los libros, su fecha de devolución y la identidad del prestatario.
En la actualidad esto ha dejado de ser así en la mayor parte de las bibliotecas, puesto que la tecnología se ha impuesto. Sin embargo, el fondo es el mismo: se dispone de una base de datos en las que se registra la disponibilidad de los libros, los datos del prestatario y otros muchos datos relevantes. La gran ventaja es que toda esta información es muy accesible y permite tener un control más riguroso de la bibliografía de la biblioteca. Así pues, una de las funciones de un bibliotecario escolar también es manejar el software de catalogación y gestión bibliotecaria.
El bibliotecario está disponible para ayudar a los usuarios a encontrar información en los materiales de la biblioteca y en otros recursos. Esto no significa que el bibliotecario tenga que saber donde se ubican todos y cada uno de los libros en cada rincón de la biblioteca, pero sí saber darle cierta orientación a los usuarios. Es decir, aunque no conozca el título del libro, en función de su tipología y temática deberá poder redirigir al usuario hacia la estantería aproximada en la que se encuentra su libro.
A su vez, siempre que un usuario le pregunte por un libro y/o sus características, deberá saber cómo y dónde buscarlo para confirmarle al usuario su disponibilidad. Para ello, la base de datos bibliográficos de las bibliotecas es indispensable, puesto que mediante una búsqueda rápida el bibliotecario puede saber los pormenores del libro requerido y trasmitírselo al usuario.
El bibliotecario puede planificar y organizar eventos en la biblioteca, como charlas, talleres, exposiciones y clubes de lectura. No obstante, esta función no es exclusiva ni obligatoria cumplirla para un bibliotecario. Aun así, los bibliotecarios que tienen verdadera pasión y quieren salpimentar un poco su jornada laboral, pueden contactar con diferentes personalidades del ámbito literario, locales mayormente, para que den a conocer sus obras y fomentar la cultura y los hábitos de lectura en su entorno.
Especialmente si se trata de bibliotecas pequeñas prácticamente autogestionarias, el bibliotecario deberá tener en cuenta el espacio que se va a ocupar para el evento, su temporalización y su preparación. Así pues, movilizará todos los recursos humanos y materiales que sean necesarios para que el evento cultural y/o literario salga cómo se había planeado. No suelen tratarse de eventos enormes y complejos, por lo que sus excelentes dotes organizativas bastarán para cumplir con esta función de un bibliotecario.
El bibliotecario también es responsable de mantener la biblioteca limpia y organizada, y de asegurarse de que los materiales estén en buenas condiciones. En el caso de las bibliotecas pequeñas, no es de extrañar que el bibliotecario se encargue de la limpieza del establecimiento en su totalidad. No obstante, en las bibliotecas más grandes, habrá un equipo de limpieza contratado para ello.
En cualquier caso, un bibliotecario debe velar por el buen estado de la biblioteca y contribuir con su conservación en la medida de lo posible. Aunque no tenga que ocuparse de barrer y fregar el suelo, sí puede velar por el buen orden de las mesas, la colocación correcta de las sillas, la disposición adecuada de los libros y limpiar cualquier imprevisto de limpieza que pueda surgir en una biblioteca (no es raro que a alguien se le derrame un café de vez en cuando).
Ahora que ya conoces las funciones de un bibliotecario escolar, solo te queda saber un dato que te hará tomar la decisión acertada. Vamos a conocer algunas de las principales ventajas de trabajar en una biblioteca:
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