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Actualmente, existen en el mercado infinidad de bebidas de tipo light o zero que presumiblemente contienen menos azúcar y, por lo tanto, son más saludables para las personas. Hasta ahora, así sucedía, pero ha sido la OMS la que ha puesto el foco en el aspartamo, uno de sus ingredientes, por considerarlos de tipo cancerígeno.
La consideración de este elemento como cancerígeno por la OMS puede suponer un duro golpe para grandes compañías de refrescos conocidas a nivel mundial. Del mismo modo, también sería un varapalo para una gama de bebidas ligadas a una buena salud que puede quedar en entredicho y que, presumiblemente, reducirían sus ventas considerablemente.
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Las bebidas light o zero tienen en su composición el elemento del aspartamo, desconocido para muchos de los usuarios. Este sustituto del azúcar se compone de fenilalanina, ácido aspártico y metanol. En términos de la OCU, el aspartamo es considerado un edulcorante sintético intenso que tiene la ventaja de endulzar las bebidas 200 veces por encima de otros componentes como la sacarosa.
El problema que se deriva del aspartamo son los efectos nocivos para salud que pueden derivarse de su ingesta como son el dolor de cabeza, el aumento de peso, la degeneración de células cerebrales o trastornos mentales. A estos efectos, se une la posibilidad (aún por demostrar por la OMS) de ser cancerígeno.
El comienzo de las sospechas de los efectos cancerígenos del aspartamo comenzó a finales de 2005 como consecuencia del estudio presentado por la Fundación Ramazzini.
La primera demostración de estos efectos surgió cuando se administró en la comida de ratas Sprague-Dawley cantidades de aspartamo. Pues bien, de ese trabajo se extrajo la conclusión de que los efectos cancerígenos quedaban demostrados si se hacia una ingesta de 20 miligramos por kilogramo de paso. Una cantidad que se situaba por debajo de los 40 miligramos por kilogramo que las autoridades sanitarias europeas consideraban como dosis seguras.
Al respecto, la EFSA seis meses después estableció que el trabajo que mostraba estos efectos cancerígenos presentaba problemas de diseño y las consecuencias no eran lo suficientemente evidentes.
Sin embargo, posteriormente se volvió a experimentar con el aspartamo con 70 hembras y 95 machos de ratas a las que se le administró un consumo diario de 100 o 20 miligramos por kilo de peso, con unos resultados sorprendentes. Y es que, en estos animales se producía un aumento de la aparición de tumores malignos, leucemias y linfomas
¿Qué alimentos contienen aspartamo? Aún hay que esperar a la resolución de la OMS sobre si el aspartamo es malo para la salud de los consumidores. No obstante, existen en el mercado muchos alimentos que contienen este edulcorante. Para identificarlos, entre los ingredientes aparecerá la palabra “aspartamo” o en su defecto, el código E951.
Entre los más habituales se encuentran:
En la lucha por saber la verdad para los consumidores son las grandes empresas de bebidas las que han alzado la voz en favor de sus productos para desmentir los efectos cancerígenos de las bebidas light o zero.
Las empresas y organizaciones de la industria alimentaria permanecen expectantes ante la posible relación entre el aspartamo y el cáncer.
Por un lado, existen compañías que rechazan estos efectos del edulcorante basándose en que agencias reguladoras como FDA y la EFSA han establecido que el consumo es seguro para los humanos. Por otro lado, otras empresas se han anticipado a una resolución que afirme los efectos cancerígenos del aspartamo por la OMS, retirándolos de sus productos. Para ello, han empleado alternativas como el eritritol o la stevia.
La OMS tiene en su mano decretar si el aspartamo es cancerígeno o no. En el caso de un sí, por parte de esta organización, desembocaría en un cambio en la normativa y las políticas de diferentes países y regiones.
En otras palabras, las agencias reguladoras podrían establecer límites estrictos a los edulcorantes en cuanto a su uso en alimentos y bebidas. Incluso podrían tener un distintivo similar al de los productos como el tabaco, con advertencias de que contienen aspartamo.
Los efectos negativos que, para estas empresas, tiene la consideración de los efectos cancerígenos del aspartamo, exigen que la resolución no deje dudas sobre estos efectos y que existe una relación contrastada entre el aspartamo y el cáncer.
¿El aspartamo es malo? El próximo 14 de julio, será la OMS la que responda a una duda que puedes suponer un antes y un después para la industria alimentaria y para los consumidores.
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