En el mundo de la atención médica, existe un enfoque sanitario y social que va más allá de las prácticas tradicionales para priorizar las particularidades de cada paciente. Estamos hablando de la atención integral centrada en la persona (APC), un modelo que pone a los individuos en el centro y que se basa en el respeto a la dignidad, los derechos, las preferencias y las necesidades las persona, potenciando así su autonomía y participación.
Más adelante, te explicamos exactamente en qué consiste este modelo, desde sus fundamentos hasta su aplicación práctica. ¡Quédate en Euroinnova que te lo contamos!
¿Qué es la atención integral centrada en la persona?
Su propio nombre lo indica: la atención integral centrada en la persona pone el foco en cada uno de los individuos, centrándose en sus características individuales y las necesidades específicas en las que necesita ayuda. En este sentido, su objetivo es mejorar la calidad de vida de las personas que reciben cuidados, especialmente las que se encuentran en situación de fragilidad o dependencia.
Como modelo, la ACP no solo ofrece servicios médicos, sino que implica establecer una relación de confianza entre la persona atendida, sus familiares y los profesionales que la cuidan. En definitiva, se trata de un enfoque integral que abarca todas las dimensiones del individuo, es decir, tiene en cuenta sus valores, preferencias y circunstancias personales. Es por eso que la ACP se convierte en un cambio innovador en la práctica médica, pues el paciente se convierte en colaborador activo en su propio cuidado.
Fundamentos de la atención integral centrada en la persona
La clave del modelo de atención centrado en las personas es que reconoce la autonomía y dignidad del individuo. Y es que parte de la base de que todas las personas tienen derecho a participar en las decisiones relacionadas con su salud. Además de esto, la ACP se sustenta en valores que orientan la práctica profesional:
- Reconocimiento de la individualidad: cada persona es vista como única, con sus propias experiencias, valores y preferencias que influyen en su atención médica. Entiende que, aunque el contexto de dos personas sea el mismo, no los afecta igualmente, por tanto, son elementos que deben ser respetados y valorados.
- Participación activa del paciente: se fomenta la colaboración entre el paciente, su familia y el equipo médico en la toma de decisiones relacionadas con su cuidado y tratamiento. En este sentido, la persona debe participar en el diseño, la planificación y la ejecución de su plan de atención.
- Enfoque en la prevención y el bienestar: se prioriza la prevención de enfermedades y la promoción del bienestar general con el objetivo de mejorar su proyecto de vida a largo plazo. Para ello, se tiene en cuenta la interconexión entre la salud física, emocional y social de las personas. En el caso de los adultos mayores, el campo de la gerontología es el que se encarga de hacer este análisis integral
- Preservación de los vínculos afectivos y sociales: se entiende que estas conexiones contribuyen de manera fundamental a su bienestar emocional y psicológico.
Aplicación del modelo de atención integral centrada en la persona
La puesta en marcha de este modelo implica un cambio significativo en la forma en que se presta el cuidado de la salud. Uno de los principios básicos es que, desde la primera interacción con el paciente, se fomenta una comunicación abierta y honesta que permita construir un ambiente de confianza.
En particular, también es necesario adoptar estrategias y herramientas que faciliten la aplicación del modelo de atención integral centrada en la persona. A continuación, te compartimos algunas ideas:
- Entrevistas centradas en el paciente que permitan una valoración integral y multidimensional de la persona para comprender sus necesidades, preferencias, valores y metas en relación con su salud y bienestar.
- Planificación compartida del cuidado que involucre tanto a las personas atendidas como a sus familias. Este plan debe ser personalizado para que contemple sus objetivos, los recursos con los que cuenta y sus apoyos.
- Registro de historia clínica completa para tener detallada la información médica, social y emocional relevante, para garantizar una atención integral y personalizada.
- Equipos multidisciplinarios que incluyan a médicos, enfermeras, trabajadores sociales y terapeutas, para garantizar la continuidad y la coherencia de la intervención.
- Promover la formación y la sensibilización de los profesionales sobre el modelo de atención integral centrada en la persona, estimulando su compromiso, su motivación y su trabajo en equipo. Por ejemplo, en el caso específico de quienes trabajan en una residencia de mayores, es necesario desarrollar habilidades para facilitar una atención personalizada, participativa y adaptada a las necesidades de cada persona mayor.
Calidad de vida en la atención integral centrada en la persona
Si llegaste hasta aquí es probable que compartamos una certeza: la atención integral centrada en la persona influye positivamente en su calidad de vida. Esto se ve reflejado en distintas dimensiones que ahora te resumimos:
- Salud física: este enfoque se centra en la prevención de enfermedades y en la gestión efectiva de las condiciones médicas que presenta la persona para fomentar un estilo de vida saludable.
- Nivel de independencia: se respeta y se promueve la autonomía de las personas. Para ello se brinda el apoyo necesario y los recursos para que puedan tomar decisiones informadas sobre su salud, y también se potencia su participación en las actividades de la vida cotidiana.
- Estado psicológico: el bienestar emocional y mental también es prioridad. Por eso, se brinda apoyo psicológico cuando es necesario y se atienden las necesidades emocionales, cognitivas y afectivas de la persona, promoviendo su autoestima, su autoconfianza, su seguridad y su felicidad.
- Relación con los elementos esenciales de su entorno: con este modelo se adapta el entorno físico, material y social del individuo para que sea cómodo y seguro. Una de las opciones que se ajusta a este criterio es la vivienda tutelada para adultos, donde los residentes pueden disfrutar de su autonomía, a la vez que recibir una atención personalizada, integral, continua y coordinada, siguiendo el modelo de atención integral centrada en la persona
- Relaciones sociales: mantener el vínculo con los familiares, amigos y miembros de la comunidad es esencial para fomentar el sentido de pertenencia del individuo, así como su integración y su apoyo social.
¿Quieres aprender más sobre la atención integral centrada en la persona? Si es así, no te pierdas este Máster en Atención Sociosanitaria a la Dependencia disponible en Euroinnova y 100% online. ¡No te pierdas esta oportunidad única de formarte!
Otras titulaciones que te pueden interesar
Te compartimos otras titulaciones que te pueden ayudar a complementar tu formación profesional: