Bariatría y cirugía Bariátrica: una forma efectiva para la pérdida de peso

La cirugía bariátrica, también conocida como cirugía de pérdida de peso, ha ganado popularidad en los últimos años como una opción efectiva para aquellos que luchan con la obesidad severa. Esta intervención quirúrgica ofrece una solución a largo plazo para la pérdida de peso y puede tener un impacto significativo en la salud y calidad de vida de los pacientes.

En este artículo, exploraremos en detalle qué es bariátrica, los diferentes tipos de procedimientos, los requisitos para ser candidato, los beneficios y los riesgos asociados. Si estás considerando la cirugía bariátrica como una opción para alcanzar tus metas de pérdida de peso, sigue leyendo para obtener información que necesitas.

¿Qué es la bariatría? 

La bariatría es una rama de la medicina que se ocupa del tratamiento de la obesidad y las enfermedades relacionadas con el exceso de peso. El término "bariatría" se deriva de la palabra griega "baros", que significa "peso". 

Esta se centra en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de los pacientes con obesidad, brindando opciones médicas y quirúrgicas para ayudarles a perder peso y mejorar su salud. Los profesionales de la bariatría son médicos especializados en el manejo integral de la obesidad y sus complicaciones. 

En este nicho se utilizan diversas estrategias para el manejo de la obesidad, que pueden incluir cambios en el estilo de vida, modificación de la dieta, programas de ejercicio físico, terapia conductual y farmacoterapia. La cirugía bariátrica es una opción quirúrgica que se considera cuando los métodos no quirúrgicos no han sido efectivos o cuando la obesidad es de grado severo. 

Requisitos para la cirugía bariátrica 

Los requisitos pueden variar según el país, el centro médico y el cirujano que realiza el procedimiento. Sin embargo, a continuación, se presentan los más comunes que se suelen solicitar: 

1. Índice de masa corporal (IMC). Por lo general, se requiere que los pacientes tengan un IMC de al menos 40 o un IMC de 35-39.9 junto con enfermedades relacionadas con la obesidad, como la diabetes tipo 2, hipertensión arterial o apnea del sueño. El IMC se calcula dividiendo el peso en kilogramos por el cuadrado de la altura en metros. 
2. Edad. La mayoría de los cirujanos bariátricos prefieren que los pacientes tengan al menos 18 años de edad. Sin embargo, en casos excepcionales, se puede considerar la cirugía en adolescentes con obesidad extrema y problemas de salud graves. 
3. Historial médico. Se evaluará el historial médico del paciente, incluyendo cualquier afección médica preexistente y tratamientos previos para la obesidad, como dietas y programas de pérdida de peso supervisados. 
4. Evaluación psicológica. Serán evaluados por un profesional de la salud mental para determinar si están mental y emocionalmente preparados para la cirugía y para adaptarse a los cambios de estilo de vida requeridos después del procedimiento. 
5. Compromiso de cambio de estilo de vida. Se espera que las personas estén dispuestos a realizar cambios significativos en su estilo de vida después de la cirugía, incluyendo una dieta saludable, ejercicio regular y seguimiento médico a largo plazo. 
6. Evaluaciones médicas adicionales. Dependiendo de la situación del paciente, pueden ser necesarias evaluaciones adicionales, como pruebas de laboratorio, evaluaciones cardíacas, estudios del sueño y evaluación de la capacidad pulmonar. 

Beneficios de la bariatría

Podemos destacar que la bariatría puede tener varios beneficios para las personas que sufren de obesidad severa. Aquí hay algunos de los beneficios más comunes asociados: 

Pérdida de peso sostenida

Puede ayudar a las personas a perder una cantidad significativa de peso y mantenerlo a largo plazo. Esto se debe a que los procedimientos restringen la cantidad de alimentos que el estómago puede contener y/o limitan la absorción de nutrientes, lo que conduce a una reducción en la ingesta calórica total. 

Mejora de las condiciones de salud relacionadas con la obesidad 

La pérdida de peso resultante de la cirugía puede tener un impacto positivo en varias condiciones de salud relacionadas con la obesidad, como la hipertensión arterial, el colesterol alto, la apnea del sueño, la enfermedad del hígado graso no alcohólico y la osteoartritis. 

Control de los niveles de azúcar en la sangre

Muchas personas con obesidad severa también sufren de diabetes tipo 2. El procedimiento que alteran el sistema digestivo, como el bypass gástrico, puede mejorar significativamente el control de los niveles de azúcar en la sangre y, en algunos casos, incluso conducir a la remisión de la diabetes. 

Mejora de la calidad de vida 

La pérdida de peso y la mejora de las condiciones de salud pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas. Después del procedimiento, muchas personas experimentan un aumento en la energía, la movilidad y la autoestima, lo que les permite participar en actividades que antes les resultaban difíciles debido a su peso. 

Reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares y mortalidad 

La obesidad está asociada con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, como enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular, así como una mayor probabilidad de muerte prematura.  

Se puede reducir significativamente esto al promover la pérdida de peso y mejorar los factores de riesgo relacionados, como la presión arterial y los niveles de colesterol. 

Riesgos asociados a la cirugía bariátrica

Al igual que cualquier procedimiento quirúrgico, conlleva riesgos y consideraciones importantes que deben tenerse en cuenta. Por ejemplo: 

1. Infecciones. Existe el riesgo de infecciones en el sitio quirúrgico. Se toman precauciones durante la cirugía para minimizar esto, pero aún existe la posibilidad de que se produzca una infección. 
2. Sangrado. Durante la cirugía, existe la posibilidad de que se produzcan hemorragias. El equipo médico está preparado para controlar y detener cualquier sangrado, pero en casos raros, puede ser necesario realizar transfusiones sanguíneas o cirugía adicional. 
3. Coágulos sanguíneos. La cirugía bariátrica puede aumentar la probabilidad de desarrollar coágulos sanguíneos en las piernas, conocidos como trombosis venosa profunda (TVP). Estos coágulos pueden desprenderse y viajar a los pulmones, lo que puede ser potencialmente mortal y se conoce como embolia pulmonar. 
4. Fugas. Después de la cirugía, existe el riesgo de que se produzcan fugas en las suturas o grapas utilizadas para cerrar el estómago o el intestino. Esto puede provocar infecciones graves en el abdomen y requerir una cirugía adicional para solucionar el problema.

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Curso en Cirugía de la Obesidad