¿Qué comer y qué no comer después de un bypass gástrico?

El bypass gástrico es un tipo de cirugía bariátrica que se realiza para ayudar a las personas con obesidad mórbida a perder peso y tratar condiciones médicas relacionadas con la obesidad, como la diabetes tipo 2 y la hipertensión. Durante el procedimiento, el cirujano crea una pequeña bolsa en la parte superior del estómago, utilizando grapas quirúrgicas o una banda ajustable. Luego, se conecta esta bolsa directamente al intestino delgado, desviando una parte del estómago y el intestino delgado. El objetivo principal de esta cirugía es ayudar a las personas con obesidad mórbida a perder peso significativo y a mejorar su salud general.

Cuidar la alimentación después de esta operación es esencial para garantizar una recuperación segura y efectiva, así como para optimizar los resultados a largo plazo. Para ello, hay que seguir las recomendaciones dietéticas del equipo médico, consumir alimentos nutritivos y evitar aquellos que puedan causar molestias o complicaciones. A continuación, te contamos cuáles son los alimentos prohibidos para después de un bypass gástrico.

¿Qué alimentos debo evitar después de un bypass gástrico?

Los diferentes tipos de cirugías bariátricas, como el bypass gástrico, la gastrectomía en manga y la banda gástrica ajustable, implican alteraciones en la anatomía del estómago y, en algunos casos, del intestino delgado. Es decir, después de esta operación relativamente agresiva, la persona deberá modificar significativamente su dieta para poder ir aclimatando el cuerpo a su nueva configuración gástrica y seguir motivando una pérdida de peso razonable, que es el objetivo último de esta operación. Es por eso que hay una serie de alimentos prohibidos desde el punto de vista médico que no deben consumirse después de un bypass gástrico:

• Bebidas gaseosas o carbonatadas: Estas bebidas tienden a causar hinchazón, molestias estomacales e incluso aumentar el riesgo de desarrollar síndrome de dumping, una condición en la que los alimentos se mueven demasiado rápido desde el estómago al intestino delgado y que provoca síntomas como náuseas, sudoración y diarrea.

• Comidas picantes o muy condimentadas: Estas comidas irritan el revestimiento del estómago, causan molestias y aumentan el riesgo de úlceras. Después de la cirugía, el sistema digestivo está más sensible de lo normal, por lo que es importante evitar alimentos irritantes.

• Alimentos fritos o rebozados: Estos alimentos son altos en grasas y calorías vacías, por lo que dificultan la pérdida de peso y aumentan el riesgo de complicaciones como el reflujo ácido y la obstrucción intestinal. Además, al cuerpo le cuesta más digerir este tipo de grasas después de la cirugía de bypass gástrico.

• Café y té: Estas bebidas estimula la producción de ácido estomacal, que irrita las paredes del estómago y causa molestias. Además, el contenido de cafeína en el café y el té tienen efectos diuréticos, lo que hace que vayamos más al baño y que nos deshidratemos más rápido, especialmente en los primeros días después de la cirugía.

• Alcohol: Después de un bypass gástrico, una parte significativa del estómago y del duodeno (la primera parte del intestino delgado) se omite o se excluye del flujo normal de alimentos. Como resultado, el alcohol llega al intestino delgado más rápidamente y en mayor concentración que antes de la cirugía.

• Harinas refinadas, bollería y dulces de alto contenido calórico: Estos alimentos son altos en calorías, azúcares simples y grasas poco saludables, por lo que son contraproducentes para perder peso. A su vez, aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 y otras enfermedades cardíacas.

• Alimentos altos en grasas en general (carnes grasas, mantequilla, margarina y aceites vegetales): Después de la cirugía de bypass gástrico, es importante limitar la ingesta de grasas para facilitar la digestión y promover la pérdida de peso. Los alimentos grasos son más difíciles de digerir después de la cirugía y suelen ser causa de molestias y malestar general.

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Dieta para después de una operación de bypass gástrico

Como ya has visto, hay muchos alimentos que comemos normalmente que están desaconsejados para las personas que se han sometido a una operación de bypass gástrico. Y es normal, ya que el cuerpo necesita de un período de adaptación para acostumbrarse al balón gástrico que se aloja en el estómago. Así pues, es posible que la persona tenga que cambiar sus hábitos alimenticios radicalmente y seguir una dieta estricta en la que se vayan incorporando alimentos más sólidos de forma progresiva. Te dejamos un plan de dietas que hemos diseñado nosotros para cada etapa posterior a la operación de bypass gástrico:

Dieta líquida

Duración: 1-2 semanas, dependiendo de la recomendación médica y la tolerancia del paciente.

• Caldos claros: caldo de pollo o de verduras sin grasa.
• Jugos de frutas naturales sin azúcar añadido.
• Batidos o licuados de frutas sin azúcar y sin lácteos enteros (preferiblemente con leche descremada o bebidas vegetales bajas en calorías).
• Infusiones sin cafeína: té de hierbas, té verde descafeinado, agua de jengibre.
• Gelatina sin azúcar añadido.
• Agua pura, consumida entre las comidas para mantenerse hidratado.

Dieta semilíquida

Duración: 1-2 semanas, según la tolerancia del paciente.

• Purés suaves de verduras: calabaza, zanahoria, calabacín, etc.
• Yogur griego bajo en grasa o sin grasa.
• Sopas cremosas sin trozos grandes de alimentos.
• Batidos o licuados de frutas y verduras con mayor consistencia.
• Pudines o flanes bajos en azúcar y grasas.
• Agua, infusiones sin cafeína y jugos naturales sin azúcar.

Dieta sólida

Duración: A partir de la tercera semana, bajo supervisión médica.

• Proteínas magras: pechuga de pollo a la plancha, pescado blanco al horno, tofu.
• Verduras cocidas al vapor o al horno.
• Frutas frescas y crudas (evitar las frutas demasiado fibrosas).
• Cereales integrales: arroz integral, quinoa, cuscús integral.
• Legumbres cocidas: lentejas, garbanzos, judías.
• Lácteos bajos en grasa: yogur natural desnatado, leche descremada.
• Evitar alimentos fritos, muy condimentados, grasos o altos en azúcares añadidos.

Consejos dietéticos para después de una cirugía bariátrica

Uno de los consejos más importantes es aprender a escuchar a tu cuerpo y reconocer las señales de hambre y saciedad. La cirugía bariátrica altera la anatomía del sistema digestivo y puede cambiar la forma en que percibes el hambre y la plenitud. Tomarse el tiempo para comer lentamente, masticar bien los alimentos y prestar atención a las señales de saciedad te ayudará a evitar que comas en exceso y a que desarrolles una relación más saludable con la comida.

Además, hay que priorizar la calidad de los alimentos que se consumen en lugar de simplemente contar calorías sin ton ni son. Decántate por los alimentos integrales y nutritivos, como frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros, en detrimento de los alimentos procesados, altos en azúcares y grasas saturadas.

Otro aspecto importante de la educación alimentaria después de la cirugía bariátrica es aprender a identificar y manejar los desencadenantes emocionales y conductuales del comer en exceso. La cirugía reduce el espacio del estómago y produce una sensación de saciedad que nos impulsa a comer menos, pero no aborda las causas subyacentes de los atracones con raíces emocionales o compulsivas.

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