¿Qué es el desbaste en el tratamiento de aguas residuales?

Sabemos que el tratamiento de aguas residuales es importante para garantizar no solo la protección de los recursos naturales, sino la salud pública. Así que uno de los primeros pasos para ese tratamiento es el desbaste. ¿Lo sabías?

¿En qué consiste el desbaste?

El desbaste es el paso 1 en el tratamiento de aguas residuales y consiste en remover materiales sólidos y flotantes que sean de gran tamaño y que estén presentes en el agua, antes que esta ingrese a otras etapas del tratamiento. Los residuos sólidos son por lo general palos, ramas, plásticos, telas y otros objetos que por lo regular dañan o taponan los equipos que se usan en el proceso de tratado. 

¿Cómo influye el desbaste en las aguas residuales?

Es importante que sepas que el desbaste influye en las aguas residuales así: 

• Protege los equipos. Ya mencionamos que los grandes objetos pueden obstruir los equipos y dañar la maquinaria, el desbaste ayuda a prevenir esas obstrucciones. 

• Previene los daños en los procesos. Al ayudar a evitar obstrucciones permite que los procesos no se dañen y, por tanto, las etapas de sedimentación, filtración y desinfección, puedan llevarse a cabo sin problemas. 

• Es positivo para el medio ambiente. Pues mejora la calidad de vida del afluente, contribuyendo a mejorar la calidad de agua tratada. Es decir, elimina los residuos contaminantes. 

Como ves, el objetivo del desbaste es garantizar un proceso de tratamiento óptimo tanto para el consumir, como para la planta que genera el proceso. Además, previene olores y problemas higiénicos, pues la remoción de materiales en descomposición minimiza la contaminación. 

¿Cómo funciona el desbaste en aguas residuales?

Para explicarlo mejor, el desbaste funciona con una filtración de agua sobre un soporte que elimina los objetos grandes o sólidos, a través de unas rejillas o elementos formados en paralelo y que trabajan como colador. En este funcionan unos discos de desbaste que son herramientas abrasivas que funcionan aplanando un cordón de la soldadura, así se logra que la superficie por donde pasa el agua permanezca limpia y por ende el agua salga de mejor calidad desde el inicio del proceso. 

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¿Qué es el tamizado de aguas?

El tamizado de aguas es un proceso fundamental en el tratamiento de aguas residuales y potables. Consiste en la eliminación de sólidos gruesos y partículas suspendidas mediante el uso de mallas o rejillas de diferentes tamaños. Este procedimiento es esencial para asegurar la calidad del agua y proteger los sistemas de tratamiento posteriores, como bombas y equipos de filtración, de posibles daños o bloqueos.

El proceso de tamizado se puede llevar a cabo en diferentes etapas del tratamiento del agua, ya sea al inicio del proceso de purificación o como un pretratamiento antes de métodos más avanzados. Existen diversas técnicas y equipos utilizados en el tamizado, tales como:

1. Rejas de limpieza manual o automática. Utilizadas para retener sólidos de gran tamaño.

2. Tamices rotativos. Empleados para capturar partículas más finas en sistemas industriales y municipales.

3. Filtros de tambor. Adecuados para la eliminación de sólidos en procesos industriales específicos.

Diferencias entre tamizado y desbaste

Aunque el tamizado y el desbaste son procesos similares, presentan diferencias clave en su aplicación y propósito.

1. Tamizado

• Objetivo. Eliminar partículas y sólidos finos.

• Equipos. Utiliza tamices con mallas de diferentes tamaños.

• Aplicación. Se puede implementar en diversas etapas del tratamiento de aguas, desde el inicio hasta procesos intermedios y finales.

2. Desbaste

• Objetivo. Remover sólidos de mayor tamaño y materiales voluminosos.

• Equipos. Rejas o barras que separan objetos grandes como ramas, plásticos y otros desechos gruesos.

• Aplicación. Generalmente, se emplea como una primera etapa de pretratamiento para proteger el equipo y evitar obstrucciones.

El tamizado de aguas es una práctica esencial para garantizar la eficacia de los sistemas de tratamiento y la calidad del agua tratada. Su correcta implementación contribuye significativamente a la sostenibilidad y eficiencia de las operaciones de tratamiento de aguas.

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