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Dentro de la extensa lista de pasatiempos que tienen a los juegos de palabras como base, los autodefinidos ocupan un lugar privilegiado por sus reglas sencillas y por ser muy entretenidos. Son de fácil acceso y se encuentran en diferentes formatos. Es más, se venden en puestos de periódicos y librerías, y también están disponibles en internet.
En este post, te contamos un poco más de en qué consisten los autodefinidos, sus instrucciones y sus beneficios.
Los autodefinidos son un tipo de pasatiempo cuya dinámica se centra en completar filas con palabras que responden a una pista. Una particularidad de este juego es que las filas –dispuestas de manera vertical y horizontal– se cruzan; esto obliga a que las casillas que las componen deban rellenarse correctamente para formar palabras completas con sentido. Es decir, si el jugador yerra en la palabra, aunque este calce perfectamente con el número de casillas será más complicado o imposible descifrar las demás pistas.
Ahora bien, este tipo de entretenimiento recibe la atención de muchas personas debido a la existencia de diferentes niveles y formatos; incluso, se proponen autodefinidos de pequeño, medio o gran tamaño. Esta versatilidad hace que sean más accesibles, incluso, que algunos tipos de crucigramas. Se distribuyen en libros de pasatiempos que contienen sopas de letras, sudokus, entre otros, y en ocasiones se incluyen en algunos diarios que poseen secciones de entretenimiento.
Los autodefinidos se diferencian de los crucigramas, principalmente, por la manera en la que se disponen las pistas. Así, mientras que, en los crucigramas tradicionales, las pistas se hallan fuera del cuadrante que agrupa a las casillas, en los autodefinidos, por su parte, estas señas están integradas en casillas adyacentes donde inicia la palabra que deberá introducirse. En este caso, la casilla con la pista cuenta con una flecha que indica la dirección en la que se colocarán las letras (derecha, izquierda, arriba, abajo). Entonces, se observa lo siguiente:
Los crucigramas disponen las pitas fuera del tablero. Estas están enumeradas y se agrupan por la forma en la que se encuentran en las filas de casillas: horizontales y verticales. Así, cada fila en el tablero marca el número que le corresponde.
Los autodefinidos integran las pistas en casillas adyacentes a los espacios que corresponden a la palabra.
En cualquier caso, el jugador se encarga de hacer relaciones y comprobaciones para completar correctamente el juego. La elección entre un autodefinido y un crucigrama dependerá de las preferencias del jugador.
Estas son los aspectos que caracterizan a los autodefinidos:
Pistas integradas. Las definiciones o señales se encuentran dentro del tablero.
Señalización. Las casillas que contienen las pistas cuentan con flechas que indican la orientación que deberá seguir la palabra.
Niveles. Como ocurre con cualquier pasatiempo, cuenta con diferentes niveles para adaptarse a las preferencias o experticia de los jugadores.
Formato breve. Los tableros suelen ser pequeños o medianos, pero hay versiones de mayor envergadura, lo que incremente su dificultad.
Disponibilidad. Las versiones virtuales son tan comunes como las impresas; de hecho, se venden pequeños libros con un gran número de autodefinidos.
Pasatiempo educativo y estimulante. Permite mejorar habilidades lingüísticas y ejercitar la mente mediante la concentración y el razonamiento.
Para completar un autodefinido, se deben seguir los siguientes pasos:
Estudiar el diagrama. Lo primero que debe hacerse es completar una visión general del diagrama para identificar las temáticas y la complejidad de casa pista.
Escoger pistas sencillas. Los autodefinidos se completan en función de los aciertos en torno a las pistas, por lo que se recomienda iniciar por las palabras que pueden adivinarse con mayor facilidad.
Seguir el sentido de la pista. Las casillas con pistas poseen flechas que indican la orientación que seguirá la palabra.
Seguir el contexto. Conforme se completan las casillas, es más fácil inferir las palabras restantes.
Verificar la coherencia. También es relevante verificar la coherencia de las palabras que van llenando el diagrama, ya que podría haber fallos que impedirían terminarlo.
Existen tres niveles de autodefinidos: básico, intermedio y avanzado. Cada uno de ellos está hecho para adaptarse a la experiencia y conocimientos del jugador.
En este nivel, los tableros presentan pistas sencillas y, por lo tanto, palabras cortas. La resolución es mucho más sencilla debido a que no existe una gran complejidad en torno a las definiciones o las relaciones entre palabras que completan las casillas. Se incluyen, por tanto, palabras que forman parte del lenguaje cotidiano, así como conceptos generales que son parte del conocimiento de las personas. Este nivel, asimismo, es ideal para quienes deseas iniciarse en este pasatiempo.
Se trata de un nivel que incrementa considerablemente la complejidad del juego. Incluye no solo conceptos básicos, sino también vocabulario técnico y otras palabras. Las pistas, en este sentido, incluyen referencias incluso más específicas, lo que hace que los jugadores deban incrementar el nivel de razonamiento para encontrar la palabra correcta. Este nivel permite acercarse al nivel avanzado.
El nivel avanzado incluye palabras incluso más extensas, definiciones complejas, pistas específicas e introduce referencias a otros campos de conocimiento, como cuestiones científicas, literarias, culturales, políticas, entre otros. Esto implica un conocimiento más profundo no solo del idioma, sino también de otras áreas. Los autodefinidos de este nivel están orientados a jugadores expertos.
Los autodefinidos poseen dos funciones principales: el entretenimiento y el ejercicio cognitivo.
Los autodefinidos, en cuanto pasatiempos, están orientados al entretenimiento de diversos públicos, sobre todo, adultos. Dependiendo de su formato, sea físico o digital, es accesible, comprensible y no exige demasiado tiempo para su resolución, salvo en el caso del nivel avanzado. Además, hay una gran variedad opciones, lo que hace que sean ideales para momentos de ocio.
Los autodefinidos combinan el entretenimiento con el ejercicio cognitivo, ideal principalmente para personas que requieren entrenar la memoria, la concentración y el razonamiento. Las pistas, de hecho, exigen la realización de asociaciones, evaluación de la coherencia de las palabras, comprobar errores o validar aciertos. En este sentido, son útiles para niños y adolescentes como parte del desarrollo de habilidades lingüísticas y del pensamiento lógico (estimulación cognitiva), pero también lo son para adultos mayores para no perder habilidades cognitivas.
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