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Imagínate un mundo donde el secreto para controlar tus antojos y mantener una alimentación saludable está al alcance de tus manos, específicamente, en la pantalla de tu dispositivo. En un estudio sorprendente que desafía nuestra percepción de la comida, se ha descubierto que la clave para comer menos podría estar en una galería de imágenes apetitosas.
¿Quién no ha pasado un buen rato mirando fotografías y videos de deliciosas recetas en Instagram o TikTok? Patatas fritas, hamburguesas, postres, carnes y muchos otros alimentos aparecen en nuestras redes sociales a diario. Si crees que esto solo te hace tener más hambre, la ciencia podría estar en desacuerdo.
Una investigación reciente, publicada en la Revista Appetite, sugiere que mirar imágenes de comida en línea puede generar saciedad. Los investigadores concluyeron esto después de realizar experimentos con más de mil personas, y notaron que aquellas que veían la misma imagen de comida más de 30 veces sentían menos apetito.
Además, estas personas comían menos porque se servían porciones más pequeñas de los alimentos que habían visto en las imágenes y se sentían más satisfechas con lo que comían.
"En nuestros experimentos, demostramos que cuando los participantes vieron la misma imagen de comida 30 veces, se sintieron más saciados que antes de ver la imagen", señaló Tjark Andersen, autor del estudio e investigador en ciencias de los alimentos en la Universidad de Aarhus en Dinamarca.
Esto ocurre porque la manera en que percibimos la comida y las percepciones cerebrales influyen en la saciedad. Aunque parezca que solo nos llena comer, hay varios factores que influyen en este proceso. Cuando pensamos en comida, se activan ciertas áreas de nuestro cerebro, similares a cuando estamos comiendo.
Esta investigación es interesante porque uno de los grandes problemas actuales es el aumento de la obesidad y el alto consumo de alimentos poco saludables, como los ultraprocesados. De acuerdo con la OMS, "desde 1975, la obesidad casi se ha triplicado en todo el mundo".
Conocer cómo influyen diferentes factores en la elección de alimentos podría ayudar a controlar el consumo excesivo de comida. Comer menos y más saludable, dependiendo de los requerimientos nutricionales de cada persona, podría ayudar a tratar la obesidad. Sin embargo, es importante señalar que muchas veces el consumo excesivo de comida está relacionado con factores emocionales. Por eso es valioso comprender la interacción entre el cerebro y los alimentos.
Existen otras recomendaciones para moderar el apetito y mantener una dieta saludable, fundamental para el cuidado de la salud. Ingerir alimentos ricos en fibra, como frutos secos y alimentos saludables, ha demostrado ser efectivo para reducir la sensación de hambre. Estudios han demostrado que masticar bien los alimentos y beber un vaso de agua antes de las comidas pueden ayudar a controlar la cantidad de comida que consumimos.
Estas estrategias no solo promueven la saciedad, sino que también fomentan una elección consciente de alimentos, facilitando el camino hacia una alimentación más saludable. Si te interesa el mundo de la nutrición, te invitamos a conocer nuestra oferta formativa en esta área.
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