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Si te interesa el mundo del cine y la fotografía, probablemente hayas oído hablar sobre el timelapse, aunque sea con otro nombre. En este artículo te explicaremos qué es un timelapse, también conocido como técnica de cámara rápida en español. ¿Quieres conocer técnicas rompedoras de fotografía y vídeo para darles otra perspectiva a tus creaciones? ¡No dudes en leernos!
Para empezar, podemos definir el timelapse como una técnica cinematográfica en la que produce la sensación de que el tiempo se acelera para que parezca que los acontecimientos avanzan más rápidamente. Los timelapses se utilizan sobre todo para captar fenómenos naturales que ocurren a paso de tortuga a nuestros ojos.
Por ejemplo, se puede aplicar un timelapse para amenizar una escena de nubes desplazándose por el cielo o de plantas florecientes. Fuera del entorno estrictamente natural, el timelapse se puede emplear para mostrar cambios en el escenario, tráfico en carretera y movimientos migratorios animales.
Es muy útil para crear documentales de investigación científica, vídeos publicitarios y películas con un pronunciado toque dramático. También es muy común en escenas de cualquier formato en las que se quiere transicionar rápidamente desde el día a la noche, o conceptualizar el pasar sucesivo de los días.
Aunque los productores de cine decidan implementar un timelapse predominantemente por una razón concreta, existen otros propósitos secundarios para decantarse por esta técnica de cámara rápida. La principal razón para ello es para comprimir una escena que de otra manera resultaría demasiado lenta y extensa. En ocasiones, el timelapse es la única opción cinemática posible para no aburrir al especatador.
Más allá de esto, un timelapse bien construido sirve para expresar o reforzar ciertos detalles o características de los personajes, lugares y acontecimientos en una película. El timelapse, en su dinamismo, le permite al espectador escrutar las acciones de un sujeto o detectar cambios tanto sutiles como significativos en escenarios.
Por ejemplo, si queremos incidir en la personalidad paranoide de un personaje, el timelapse puede resultar idóneo. Al grabar una escena en la que un personaje corra de un lado para otro, se encuentre en una situación límite y/o esté rebuscando vehemente en busca de algún objeto deseado, puedes aprovechar un timelapse con saltos en el tiempo para intensificar este rasgo inherente del personaje.
Desde que se implementó la técnica de cámara rápida o timelapse por primera vez, los directores de cine y los fotógrafos están maravillados con este truco, ya que aporta mucho dinamismo a las producciones y condensa lo que serían escenas anodinas y largas en secuencias animadas y atractivas al ojo humano. ¡Por eso cada vez hay más gente que quiere aprender a hacer timelapse!
Para ello, necesitarás tener a mano:
Evidentemente, no puedes grabar un timelapse sin una buena cámara. Es por ello, que las cámaras DSLR o réflex de alta calidad aportan mejores resultados en todos los aspectos. No obstante, no todo el mundo puede costearse estos dispositivos, por lo que cualquier otra cámara decente puede servir.
Un smartphone o tablet pueden resultar insuficientes para hacer un timelapse por muy buena que sean sus funcionalidades fotográficas, puesto que no disponen de la potencia necesaria para sacar fotografías de larga exposición en escenarios de baja iluminación. Estos pueden ser un plano nocturno o en interiores sin ventanas.
Tu trípode debe venir con patas ajustables para que se pueda adaptar a la altura de cada uno de los personajes o elementos que se quieran grabar. De esta forma, sacarás fotos y vídeos más estables, mejor enfocados y más precisos. Además, si quieres hacer un timelapse de larga exposición, es requisito indispensable contar con un soporte estático como un trípode.
Es decir, una forma de control remoto para poder sacar fotos y grabar de forma más precisa y cómoda. Las cámaras más modernas disponen de aplicaciones propias para conectarse con los teléfonos móviles, por lo que mediante esta funcionalidad puedes permitirte sacar fotos en diferentes intervalos a golpe de dedo.
Si tienes a tu disposición todos estos elementos, ¡estás más que preparado para hacer un timelapse de película!
Si quieres crear un timelapse clásico y profesional, te recomendamos que emplees un soporte fijo en tu cámara DSLR. Las fotografías estáticas posibilitan un mayor tiempo de exposición y generan ondas y borrones a partir del movimiento que embellecen la foto. Además, otra ventaja de la fotografía frente a los vídeos es que la resolución de tus producciones será mucho mayor lo que, a su vez, presupone mayor libertad para agrandar o achicar detalles en la foto (zoom).
Ten en cuenta que si quieres crear un timelapse muy detallado o muy largo, deberás repetir la misma fotografías cientos de veces desde un mismo punto y después editarlas. En este caso, te recomendamos que inviertas en sistemas de almacenamiento grandes para poder guardar todos tus fotogramas.
Así pues, te recomendamos seguir los siguientes pasos:
Cristina Polo Calvo
COPYWRITER
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