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A gran parte de las personas les gusta comer pan, bien sea porque resulta más sencillo que preparar cualquier otra cosa o simplemente porque les gusta, pero son pocos son los que se detienen a pensar en todo el trabajo que representa el oficio de panadero.
En algún momento algún integrante de la familia en sus casas se han dado a la tarea de hacer pan y muchas veces esto puede resultar un completo caos, bien sea porque no levanta lo suficiente la levadura o porque el pan puede quedar con un sabor extraño.
Es en este punto que todos se hacen conscientes que el oficio de panadero no es para cualquiera, ya que ellos son los que conocen el tiempo que debe llevar el pan en el horno y la textura correcta de la masa, para que se puedan degustar panes deliciosos.
Teniendo estos factores en cuenta puede hasta parecer terrorífico pensar en este oficio, pero es algo que con tiempo y mucha energía se puede aprender, ya que hay muchos que prefieren hacer todo en casa con sus propias manos.
En la Edad Media, solo los castillos y los monasterios tenían panaderías, ya en el siglo XVII, Francia se convirtió en el centro de la producción de pan de lujo, con más de 20 tipos de pan. Por supuesto, no todos los presupuestos son opciones asequibles.
Más tarde, se permitió a los panaderos tener su propio horno y, con la invención del nuevo proceso de molienda, la industria de la panadería recibió un fuerte impulso. A medida que las ciudades, comienzan a tener importancia se van dando las asociaciones o gremios de artesanos, el gremio de panaderos crece y se fundamenta en el hecho de que el pan es el alimento, convirtiéndose en una asociación de profesionales.
Con la automatización del proceso en el siglo XX, se ha facilitado el proceso productivo, se ha reducido la mano de obra, se ha mejorado el sistema y se ha incrementado la productividad, dejando en un segundo plano la práctica manual de la panificación. Pero durante mucho tiempo la panificación ha sido una actividad familiar y de campo, en las últimas décadas se ha vuelto a demandar el pan tradicional, es decir, los artesanos que conservan los métodos tradicionales.
Esta es una profesión que a pesar que se pueda ver sencilla, no lo es del todo ya que en el mundo todo cambia a diario por lo que las técnicas, las temperaturas y las máquinas de las panaderías también lo hacen, esto requiere que los panaderos estén en constante formación.
El oficio de panadero es algo imprescindible, pues son los que se encargan de realizar pan y hasta pasteles, se debe tener en cuenta que los conocimientos que poseen son muy amplios ya que no todos los alimentos deben seguir el mismo proceso.
Antes únicamente se encargaban de una sola cosa, de velar que las panaderías estuvieran abastecidas de forma correcta, pero es importante que se tenga en cuenta que hoy en día deben cumplir con diferentes competencias.
Lo que hace que el oficio de panadero sea un poco más demandante, y es que ellos son los encargados de velar para que la materia prima se encuentre en óptimas condiciones al momento de recibirla ya que esto repercute de manera directa en la elaboración de los alimentos.
Aunque básicamente todos los panaderos preparan y hornean pan, tortas, pasteles, entre otros derivados salados y dulces, sus funciones van a depender del método de elaboración y de las nuevas tendencias en este ramo.
Según el método, las funciones del oficio del panadero pueden dividirse en dos: panadería artesanal y panadería industrial.
La panadería artesanal, son aquellas cuyo tamaño es más pequeño, así como su producción, sin embargo, trabajan con más variantes en los productos elaborados y por supuesto más detalles. El oficio del panadero artesanal, está más orientado a la creatividad de la elaboración de coberturas, glaseados, nuevos sabores y diseños del pan, repartiendo sus productos en bicicleta.
Mientras que la panadería industrial, se refiere al trabajo automatizado para producir en masa, siendo los más comunes la bollería y el pan prehorneado. Las funciones del oficio del panadero industrial están centradas en el manejo de maquinarias y al proceso de elaboración en cantidad: crecimiento de la masa, moldeado, horneado, refrigeración y empaque.
A nivel general todos los panaderos deben regirse y cumplir las normas de salud, seguridad e higiene cuando de de manipular alimentos se trata. Utilizan ropa adecuada de protección (delantal, gorro y guantes), cabello recogido y zapatos apropiados.
Cuando hablamos de un oficio, podemos pensar que no debe tener un perfil profesional, pero por el contrario para cumplir correctamente con el oficio de panadero, es necesario cumplir con el siguiente perfil:
Estos cuentan con una formación técnica, la respuesta es sí, deben pasar una serie de exámenes y contar con un mínimo de 2000 horas en un trabajo de este rubro para que pueda optar por el título en técnico en panadería.
Por lo que a pesar que muchos tomen el oficio de panadero a la ligera, este requiere de gran compromiso por parte de los interesados, con el fin de mantenerse actualizados, de esta forma pueden innovar en cuanto a la preparación de sus alimentos.
En la mayoría de los casos este tipo de creatividad repercute directamente en la cantidad de clientes que pueda tener una panadería y bollería, ya que si la receta y la textura del pan son buenas la clientela seguirán acudiendo a buscar más.
Gracias al oficio de panadero es posible que las panaderías diversifiquen en gran manera la oferta de productos que tienen, teniendo el personal capacitado para poder trabajar y la indumentaria requerida, esto resulta una gran inversión.
Existen diferentes institutos los cuales buscan preparar a las personas para el campo laboral, muchos ofrecen la oferta del oficio de panadero para aquellas personas que realmente están interesadas, tanto formación en este oficio como cursos que complementan las habilidades e innovación del panadero.
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