Maestría en Administración. RVOE SEP: M-010/2023 (16/05/2023) + Master Europeo en Administración. Especialización en Negocios Deportivos
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Empecemos por lo básico. El deporte es una de esas cosas raras que realmente no se pueden explicar. Empezando por su popularidad en todo el mundo hasta la increíble cantidad de dinero que se gasta y se genera con el deporte y sus derivados como los equipos deportivos. Es sencillamente increíble.
Dibujemos rápidamente el panorama deportivo moderno. En 2021 la LIGA BBVA MX, tuvo 33,5 millones de espectadores solamente en México y eso representaba menos del 70% de su audiencia total. Por otro lado, 84 millones de personas vieron competencias de eSports.
Y este fenómeno no se limita solamente a México. Se calcula que la final de la Copa del Mundo 2022 de fútbol será vista por 700 millones de personas en todo el mundo. ¿Demasiadas cifras?
Digámoslo así: mucha gente ve deportes y una audiencia de cientos de millones requiere de (sorpresa) marketing. El marketing deportivo es una combinación de todas las posibles técnicas de marketing destinadas a atraer a los aficionados al deporte.
La única diferencia entre el marketing tradicional y el marketing deportivo es que este último se dirige a un público específico. Aunque no llamaríamos específico a un conjunto de miles de millones de personas.
No solamente se trata de publicidad deportiva. El marketing deportivo puede ser cualquier cosa y todo a la vez. En pocas palabras, es una forma de comercializar un producto, un servicio o incluso un atleta, dentro de una categoría específica deportes.
El objetivo, es ayudar a los deportistas a aprovechar las conexiones emocionales que los aficionados, los consumidores y el público objetivo tienen dentro de esa categoría crear una imagen de marca que los ayude lograr objetivos que van desde recaudar dinero para una organización benéfica hasta asociarse con una marca que busca aumentar su influencia dentro del mercado deportivo.
Suena bastante sencillo, ¿verdad? El marketing deportivo tiene un amplio abanico de posibilidades. Tanto, que intentar definirlo por completo es bastante complicado y las mismas personas involucradas dentro de industria del deporte te responderán de manera distinta sobre lo que consideran que significa este concepto.
El marketing deportivo existe porque los deportes tienen un público enorme, no es simplemente promoción de eventos de gran envergadura. Pero, ¿por qué es un campo que necesita una atención especial? ¿Por qué necesita agencias centradas exclusivamente en el marketing deportivo?
No todos los deportistas necesitan tener agencias de marketing especializadas, pero ayuda tener una agencia o un representante de marketing que entienda lo que significa desarrollar y gestionar un marketing de deportistas.
Ningún atleta es igual en lo que intenta conseguir a través del marketing y la marca, así que saber manejar las necesidades y emociones de cada atleta es imprescindible.
Lo que parece marcar la diferencia entre los distintos tipos de marketing deportivo, es el nivel de conocimientos del sector. El marketing deportivo es un poco diferente de, por ejemplo, marketing de productos de consumo masivo. Su mero consumo es ampliamente conocido. ¿Pero su detrás de escena? No tanto.
Otro aspecto importante es que el marketing deportivo tiene mucho que ver con las marcas personales.
Los deportistas son las estrellas y no una entidad deportiva como una liga o un conglomerado. La gente se enamora de ellos. Los ven. Los alientan. Eso es lo que interesa al público. Así que el marketing deportivo tiene que apelar a eso. Para abarcar plenamente quién es el atleta representado y qué quieren ver sus seguidores.
Las agencias y empresas de marketing deportivo saben mucho de su campo y son ampliamente solicitades por distintas entidades deportivas. Desempeñan un papel fundamental a la hora de asesorar a las empresas sobre sus objetivos. Sugieren productos o servicios deportivos en los que sus clientes deberían invertir y aquellos de los que deberían alejarse.
También hacen de intermediarios entre las marcas y los jugadores. Como los deportistas tienen personalidades tan diferentes, atraen a seguidores distintos. La audiencia es enorme. Así que las marcas pueden permitirse el lujo de segmentar. Eligen a los deportistas en función del perfil de sus seguidores y ajustan sus estrategias de marketing deportivo acorde a estos.
No basta con saber con ser un experto en marketing o redes sociales. Incluso una formación basada solamente en deportes se hace insuficiente. El gestor de marketing de un equipo tan importante como el Real Madrid, por ejemplo, debería tener competencias que le permiten trabajar con licencias de imágenes y marcas.
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