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Habitualmente si juntamos a niños y niñas con bacterias, hongos, parásitos u otras infecciones además de ser una mala combinación, puede ser terrible en cuanto a la posibilidad de contraer enfermedades infecciosas. Corresponde, por lo tanto, a la Infectología Pediátrica tratar estas enfermedades que afectan a la población infantil y adolescente.
Los profesionales de la Medicina que desean especializarse en Infectología Pediátrica deberán de profundizar en áreas como la microbiología, las enfermedades infecciosas, o laboratorio clínico. En este sentido es fundamental cursar un Master en Infectología Pediátrica que aborde todas estas temáticas para dotar al alumnado de un perfil profesional experto sobre esta área de la Medicina, que requiere de un tratamiento especial para los pacientes de menor edad.
Al igual que la Infectología se centra en el estudio de las enfermedades infecciosas, la Infectología Pediátrica tiene su origen en la proliferación de casos infecciosos entre la población infantil y adolescente. Por lo tanto, esta rama de la Medicina se encarga de dar un trato adecuado a este sector de la población mediante el estudio del comportamiento de estas enfermedades, diagnosticarlas o tratarlas. Del mismo modo se encargará de llevar a cabo actuaciones tendentes a rehabilitar a esta población, prevenirla de enfermedades y llevar a cabo su control.
Desde una perspectiva profesional esta rama de la Medicina analiza y estudia en profundidad los agentes que provocan estas infecciones como son las bacterias, los hongos o los parásitos, que afectan a la población más joven.
La infectología pediátrica se encarga del estudio de enfermedades infecciosas de tipo persistente que atacan a la población infantil y adolescente como consecuencia de los agentes antes mencionados. De una forma más concreta, la Infectología Pediátrica se encargan del estudio de trastornos inmunológicos y enfermedades como:
El especialista en infectología pediátrica se encarga del diagnóstico y tratamiento de las enfermedades infecciosas prevalentes y que se dan en pacientes más vulnerables como sucede con los inmunodeprimidos, recién nacidos, niños con patologías crónicas o que se encuentran hospitalizados en el área de cuidados intensivos.
Además de ello, el especialista en infectología pediátrica, realizará visitas periódicas a los servicios de pediatría, neonatología o UCI, pasará consulta de infectología pediátrica en el centro sanitario correspondiente, y se mantendrá en un proceso constante de formación ante las posibles infecciones que puedan ir surgiendo con el transcurso del tiempo.
Los especialistas en infectología pediátrica tienen un conocimiento amplio sobre infecciones causadas por bacterias, virus, parásitos, hongos o, incluso, sobre aquellos de inmunodeficiencia humana. Se deriva de esta formación, la potestad para usar antibióticos o llevar a cabo un entrenamiento adicional en inmunología, epidemiología o control de infecciones.
No obstante, además de una formación completa sobre infectología aplicada al ámbito pediátrico, se deberán ampliar las competencias profesionales de los especialistas en infectología pediátrica en las siguientes áreas:
Concretamente, el especialista en infectología pediátrica es un perfil que se corresponde con el de un médico que realiza una especialidad en pediatría por un plazo de 3 años en un hospital universitario, y a continuación, una subespecialidad en infectología de 2 años o más en un hospital universitario.
Al contrario que los pacientes que son adultos, los niños no son capaces de contestar a las preguntas del médico o no tienen capacidad para cooperar con éste a la hora de detectar cual es su dolencia. En este sentido la labor de los especialistas en infectología pediátrica tiene su importancia, ya que, se encargan de examinar y tratar a niños o adolescentes con paciencia y de una forma que les permita relajarse y cooperar con el médico.
Se encargan también de detectar los signos, síntomas, tratamientos o resultados ligados a enfermedades infecciosas en los niños o niñas que tienen unas particularidades diferentes con respecto a las que padecen los adultos.
Aunque los requisitos para ejercer como especialista en infectología pediátrica requiera de tiempo y trabajo en los diferentes centros hospitalarios existentes, la realidad es que eso no impide que puedas formarte en esta rama de la medicina. Y es que, son muchos los centros especializados que pueden aportar las nociones necesarias para profundizar y convertirte en un profesional altamente cualificado.
El problema con el que se encuentran muchos profesionales está en poder compaginar el reciclaje profesional con el desempeño de su trabajo. En este sentido, gana cada vez más enteros la metodología online. Y es que, la posibilidad de diseñar un aprendizaje personalizado y acorde al ritmo diario del alumnado es una ventaja que evitará su obsolescencia profesional y le dotará de las competencias necesarias para lograr alcanzar todas sus metas profesionales.
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