El poder de los gastos discrecionales en tu presupuesto

Representan aquellos gastos que no son muy necesarios para cubrir nuestras necesidades básicas. Los gastos discrecionales abarcan desde una pequeña parte de lujos hasta decisiones de compra más importantes que afectan a nuestro presupuesto personal. En resumen, los gastos discrecionales constituyen esa parte flexible de nuestro presupuesto, donde existe una mayor libertad para decidir qué comprar y cómo asignar los recursos económicos que tenemos al mes.

Depende de la forma de ser y gastar de la persona, existen distintos tipos de gastos. Estos están influenciados por factores como el estilo de vida, las prioridades de cada uno y las preferencias personales. Se trata de gastos que nos producen placer y satisfacción, aunque también son un desafío para nuestras finanzas si no se gestionan adecuadamente. Esa falta de control en los gastos discrecionales puede llegar a provocar un exceso en el consumo, desequilibrando nuestro presupuesto y dificultando el logro de objetivos en la situación financiera. ¡Quédate y conoce más sobre los gastos discrecionales!

Concepto de gastos discrecionales

La naturaleza de los gastos discrecionales puede variar según una persona u otra, ya que está muy influenciada por el estilo de vida que tengan o sus prioridades. Puede que sean viajes o compras de ropa y accesorios, hobbies, actividades recreativas o salidas a restaurantes. Pero vamos a aclarar qué son los gastos discrecionales y de ahí partir qué tipo de gasto considera cada persona que se aplica como discrecional.

Los gastos discrecionales engloban aquellos que son prescindibles. Se pueden dividir en gastos fijos o gastos variables, pero en global son los culpables en los que tu dinero se va sin darte cuenta. Son el tipo de gasto que está vinculado a nuestro estado de ánimo ya que nos producen placer o satisfacción, y por eso sobrepasan la capacidad de pago. Los gastos discrecionales son los primeros gastos que hay que eliminar para encaminar una buena situación financiera.

Cómo gestionar gastos discrecionales

Tener gastos forma parte de las finanzas de cualquier persona y es imposible evitarlos. Pero es posible aprender a gastar mejor para que no afecte la economía y se comience a ahorrar. Por ello, antes de comenzar a eliminar gastos sin saber cómo se gestionan, primero debes tener en cuenta los siguientes datos:

• Hay que pensar, a largo plazo, cuánto gastas al mes y al año en ese gasto necesario que crees que es el café o el periódico de todos los días.
• Los gastos discrecionales son los primeros gastos que hay que poner ojo para ver si está afectando a tu economía. Y si es así, se deben eliminar inmediatamente.
• Tener en cuenta cuáles son los objetivos que quieres lograr. Si quieres una situación financiera más estable y sana, los gastos discrecionales son los primeros en eliminar de manera definitiva. Sin embargo, si quieres ahorrar por cualquier otro motivo, puedes dejar los gastos discrecionales temporalmente.
• Si los gastos discrecionales varían en ocasiones y no están presentes siempre provocando un problema en tu economía, no es necesario prescindir de ellos. 

Gastos no discrecionales

Los gastos discrecionales provienen de otras versiones. Podemos encontrar los siguientes gastos no discrecionales:

Gastos fijos

Se refieren a los gastos que no varían al ser obligatorios y prioritario mes a mes. Por ejemplo, el pago de la hipoteca o la renta de alquiler, el seguro de coche, un crédito o préstamo. Si no puedes cubrir este tipo de gasto, es necesario que hagas recortes de otros gastos primero. Los gastos fijos no se pueden recortar de forma tan tajante, a menos que se hagan cambios drásticos como el cambio de casa que resulta estar más lejos de tu trabajo.

Gastos variables

Estos gastos se refieren a los gastos que dependen de tu consumo en el mes, como por ejemplo, la comida, el pago de facturas como luz o agua, el pago del transporte o gasolina. Existe el gasto necesario y el innecesario dentro de los gastos variables. Al depender del consumo, como hemos dicho, se pueden realizar ajustes en caso de querer ahorrar en ellos. Todo depende de cuánto quieras ahorrar y por cuánto tiempo. De este tipo de gasto, nacen los gastos discrecionales.

Objetivo: seguridad financiera

Para saber tratar los gastos discrecionales, es necesario saber que revisar los gastos es cuestión de constancia. Así, se puede reaccionar a tiempo en la eliminación de algún gasto que se un problema en tu economía. La falta de control sobre los gastos discrecionales puede conducir a un exceso en el consumo, afectando a nuestro presupuesto y dificultando el logro de objetivos financieros a largo plaza.

Cuando los gastos discrecionales se manejan de manera consciente y planificada, pueden llegar a ser una herramienta para mejorar nuestra calidad de vida sin comprometer nuestra situación financiera. Hay que aprender a tomar decisiones informadas sobre estos gastos para equilibrar el disfrute del día a día para maximizar así el valor de cada billete que gastamos.

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