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La reflexología podal se basa en la estimulación de puntos sobre los pies, que se denominan zonas reflejas y con este método, se logran activar los poderes curativos que tenemos en el cuerpo.
Para los terapeutas que aplican técnicas de reflexoterapia, los pies se convierten en espejo del cuerpo donde cada parte del mismo, se refleja en algún punto de la planta del pie. Si quieres conocer más del tema, en este post te diremos en qué consiste la reflexología podal.
Es una de las terapias que están en auge dentro del ámbito clínico y consiste en la aplicación de presión, estiramientos o manipulación en los pies, buscando lograr un efecto concreto para alguna zona del cuerpo, con esto se restablece su equilibrio.
Supone realizar un masaje manual, aplicando presión en áreas reflejadas de los pies, para así producir efectos específicos en algunas otras partes del cuerpo.
Importante destacar, que no sólo los pies tienen esas zonas reflejadas, también se pueden encontrar en las orejas (reflexología auricular), en las manos, la cara, cuero cabelludo, hasta en el iris del ojo, aunque la práctica que más se usa es la de los pies.
Una vez que vemos en qué consiste la reflexología podal, esta técnica tiene su fundamento fisiológico en las funciones reflejas y en los automatismos de nuestro cuerpo. Se entiende a esto como toda aquella reacción instantánea a un estímulo externo (táctil, visual, auditivo, térmico)
Al realizar un estímulo mecánico en la planta del pie, se logra una reacción equilibradora automática en nuestro organismo y este arco de reflejo, se integra mediante el sistema nervioso central y de las vías del autónomo.
Mediante la valoración de la respuesta de dolor en el punto que se presione, se puede saber cual zona reflejada no está equilibrada.
Algunos beneficios de la reflexología podal, han sido ampliamente reconocidos por diversos estudios científicos. A modo general, se puede considerar que esta terapia reduce significativamente los niveles de estrés en el cuerpo de forma más rápida, ayudando a calmar ciertos dolores.
Las manos y los pies actúan como acumuladores de niveles de tensión del resto del cuerpo, por esta razón, estimular ciertos puntos reflejos de su anatomía, ayuda a interrumpir las señales de estrés y a restablecer el equilibrio corporal y mental.
Entonces, al ver en qué consiste la reflexología podal, comprendemos que es una terapia que nos ayuda a prevenir diversos síntomas y dolencias, para así conseguir el equilibrio mente y cuerpo. A continuación, te daremos algunos beneficios de la reflexología podal:
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