Embrague electromagnético

Embrague electromagnético: ¿Lo conocías?

No hace falta ser un experto en automoción para saber que el embrague es una parte fundamental de cualquier vehículo y que se encarga de permitir el acople y desacople de la transmisión de par del circuito que va desde el motor a las ruedas motrices. Existen varios tipos de embrague electromagnético que se desarrollarán en este post, así como los consejos más eficientes para su mantenimiento.

¿Quieres saber más sobre el embrague electromagnético? Continúa leyendo.

¿Qué es el embrague electromagnético?

Aunque pueda parecer una definición simple, el embrague electromagnético es un tipo de embrague, y como tal, su función es la de acopar y desacoplar la transmisión de par del motor a las ruedas motrices. De esta forma, el vehículo puede iniciar el movimiento o modificar la velocidad del vehículo cuando se desee.

Los embragues se pueden clasificar en tres tipos: embrague mecánico o de fricción, es el más habitual; embrague hidráulico y el embrague electromagnético. Obviamente, existen diferencias entre todos ellos, en cuanto a cómo actúa el elemento de acople y desacople entre la caja de cambios y el motor.

¿Cómo funciona el embrague electromagnético?

Este tipo de embrague se compone de una corona de acero y un disco que aparece unido a la transmisión. La corona en su interior tiene una bobina que consigue generar un campo magnético entre el disco y la corona, ya que, se consigue que pase una corriente eléctrica. En este campo magnético se acumula el polvo magnético llenándose el hueco dentro de la corona. Así, se consigue el acoplamiento entre la corona y el disco estriado, lográndose así que se transmita el par.

Aunque el embrague electromagnético sea uno de los más fiables, la realidad es que su alto coste hace que se emplee en los sistemas de transmisión de algunos modelos de coche concretos. El embrague electromagnético puede emplearse también en los sistemas de climatización de los vehículos, permitiendo así la conexión o desconexión del aire acondicionado.

¿Por qué se desgasta el embrague electromagnético?

El embrague electromagnético permite suprimir ruidos y desgaste que habitualmente se producen en los sistemas convencionales de fricción. La causa se debe a que carece de forros o elementos de empuje, provocando un menor desgaste. Consecuentemente, la temperatura que se genera en el interior de estos sistemas es inferior, y por consiguiente, también se producen menos dilataciones y menos desgaste de los elementos de ajuste.

No obstante, el embrague electromagnético no es un sistema infalible, sino que, aunque el desgaste pueda ser inferior con respecto a otros sistemas convencionales, pueden padecer otro tipo de problemas como puede ser una fuga de aceite, o un defecto eléctrico que deriva en un fallo del sistema, entre otros.

¿Cómo mantener el embrague electromagnético?

El mantenimiento del embrague electromagnético requiere de seguir algunas recomendaciones para evitar su desgastes y un deterioro prematuro del vehículo en uno de los ejes principales de cualquier coche. Algunos de los consejos con los que lograr el mantenimiento del embrague electromagnético son los siguientes:

• Se requerirá una limpieza inmediata cuando exista alguna fuga de aceite o de agua que afecte al embrague. La humedad es contraproducente, ya que, pueden producirse fallos de tensión en los contactos eléctricos o dañar el inducido.
• Controlar las fallas eléctricas del vehículo para evitar picos de tensión que pueden incidir en el correcto funcionamiento del embrague electromagnético.
• Revisar cojinetes y rodamientos del sistema cuando se escuchen ruidos en el embrague. Además de deberán de revisar los discos y los ejes de transmisión para comprobar que no estén desgastados.
• Supervisar el estado de los apoyos del sistema de motor y transmisión cuando se detecten vibraciones en el embrague, ya que, puede deberse al deterioro de la caja de cambios o de los apoyos del motor.
• Evitar el abuso del pedal de embrague electromagnético, ya que, puede deteriorar las superficies de acoplamiento y el patinaje del embrague. 

La mecánica de los coches, al igual que otros vehículos como las motos requiere de un dominio absoluto de todo el complejo mecanismo que estos vehículos entrañan. Por ello, aquellas personas interesadas en acceder a este sector, necesitarán de especializarse para lograr la ventaja competitiva que necesitan para lograr el éxito profesional.