Índice
El análisis de muestras es un procedimiento ineludible para realizar diagnósticos clínicos. Gracias a sus resultados, los médicos pueden conocer el estado general de una persona y proponer, cuando es necesario, un tratamiento o acciones de prevención. Para obtener informes clínicos precisos y exactos, es necesario que los especialistas de los laboratorios cumplan con algunos protocolos de seguridad y calidad. Todo esto se aborda a continuación.
En análisis de muestras es un procedimiento realizado en los laboratorios clínicos y de investigación con el objetivo de realizar una indagación detallada de una sustancia, sea química, biológica o física, y sus parámetros, que pueden ser normales o no. Se trata de un análisis profundo que permite obtener información relevante sobre la composición, estructura y función de tales sustancias. Por esta razón, estos análisis son fundamentales para el diagnóstico, tratamiento y prevención de enfermedades; asimismo, contribuyen con el avance de la investigación científica en el campo de la medicina. Hay diversos tipos de análisis clínicos y, para ellos, se requieren diversos tipos de muestras.
Esta es una prueba de laboratorio que tiene el objetivo de medir los diferentes componentes de la sangre; entre ellos se encuentran los glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas, hemoglobina y hematocrito. Atendiendo a los parámetros mínimos y máximos, se utiliza como análisis para el diagnóstico de condiciones como la anemia y otros estados.
Este tipo de análisis busca identificar la presencia de microorganismos patógenos, como hongos, bacterias, parásitos o virus, los cuales pueden ser causantes de enfermedades en humanos. Entre los métodos a los que recurre, se encuentra los cultivos, las pruebas de sensibilidad a los antibióticos y algunas técnicas de diagnóstico molecular.
En este análisis, se busca conocer la concentración de diferentes sustancias químicas en la sangre y la orina, como enzimas, lípidos, proteínas, entre otros. Permite la realización de análisis para conocer enfermedades metabólicas y endocrinas, así como enfermedades renales y hepáticas.
Este tipo de análisis busca detectar variaciones o mutaciones en los genes que pueden ser causantes de enfermedades hereditarias o genéticas. Estas pruebas, realizadas a través de diagnóstico molecular en la mayoría de las ocasiones, permite abordar correctamente la posibilidad de una enfermedad hereditaria, su tratamiento, terapias y demás acciones para enfrentar las consecuencias de padecerla.
Se pueden mencionar al menos cuatro tipos de muestras para los análisis clínicos. Estas son:
Muestras de heces. Las muestras de heces se utilizan para detectar la presencia de parásitos, bacterias patógenas, sangre y marcadores de enfermedades digestivas.
Muestras de orina. Las muestras de orina son útiles para diagnosticar enfermedades del tracto urinario, evaluar la función renal y detectar el consumo de drogas.
Muestras de sangre. Las muestras de sangre son esenciales para una variedad de análisis, incluyendo hemogramas, pruebas bioquímicas y pruebas de detección de enfermedades infecciosas y genéticas.
Biopsia. Una biopsia implica la extracción de una pequeña cantidad de tejido para su examen bajo el microscopio. Se utiliza para diagnosticar y determinar la etapa de las enfermedades, especialmente el cáncer.
Las muestras de laboratorio deben pasar por un proceso para determinar la precisión y confiabilidad de los resultados obtenidos tras las pruebas clínicas. De esta manera, la validación atiende a un conjunto de regulaciones, estándares de calidad y procedimientos mínimos. Entonces, se atienden a los siguientes parámetros:
Precisión, es decir, la cercanía del resultado al valor esperado.
Exactitud, es decir, la réplica del resultado en la reiteración de la prueba.
Sensibilidad, es decir, la capacidad de detectar la porción más pequeña de lo analizable.
Especificidad, es decir, la capacidad de detectar lo que efectivamente se busca.
Rango, es decir, el rango del resultado que reporta un método de análisis.
Intervalos, es decir, los valores de referencia que permiten indicar resultados normales o anómalos.
La precisión y calidad del análisis depende de la manera en que las muestras son manipuladas en el laboratorio, es decir, si estas han sido dispuestas y utilizadas correctamente para el empleo de los métodos de análisis.
Para empezar, las muestras deben ser etiquetadas y almacenadas en las condiciones correctas de temperatura, exposición a la luz y la humedad. Los laboratorios cuentan con herramientas, aparatos y dispositivos para lograr este trabajo. Entonces, cada muestra contará con datos como la fecha, el tipo de estudio, número de lote y demás información que permita su identificación y correcto uso. Esto es necesario para detectar eventuales errores en los análisis.
Con todo, la buena manipulación de las muestras puede evitar confusiones, contaminaciones o errores en el tipo de procedimiento aplicado.
Nuestra Formación
Nuestro porfolio se compone de cursos online, cursos homologados, baremables en oposiciones y formación superior de posgrado y máster.
Ver oferta formativa¡Muchas gracias!
Hemos recibido correctamente tus datos. En breve nos pondremos en contacto contigo.