La historia de la igualdad de género está todavía en construcción. Es un proceso activo y constante con muchas protagonistas y que abarca siglos de lucha, resistencia y relatos de determinación colectiva de mujeres que han desafiado las normas establecidas. En definitiva, se trata de un viaje marcado por hitos y testimonios transformadores que han impulsado los derechos fundamentales de mujeres y niñas en todo el mundo.
Ahora bien, ¿cuál es el origen de la igualdad de género? ¿Qué hechos cambiaron la historia y el rol de la mujer en la sociedad? ¿Cómo ha evolucionado este movimiento? ¡Sigue leyendo y descubre más!
Hitos del movimiento por la igualdad de género
A lo largo de la historia, muchas mujeres se enfrentaron con determinación al rol clásico impuesto por la sociedad y se enfrentaron a las normas establecidas. Sin embargo, no fue hasta el siglo XIX que este pensamiento alcanzó una relevancia colectiva y despertó la necesidad de lucha, marcando así el origen la igualdad de género y su evolución. A continuación, te compartimos cinco hitos:
- Primera Convención de los Derechos de la Mujer: El encuentro, celebrado en Estados Unidos en 1848, fue impulsado por Lucretia Mott y Elizabeth Cady Stanton como protesta contra las leyes que silenciaban a las mujeres y les prohibían ocupar cargos públicos, votar o participar en reuniones políticas. El resultado fue lo que se conoce como la Declaración de Seneca Falls o Declaración de Sentimientos. Poco a poco, el movimiento germinó y se expandió por el mundo, y en 1893 Nueva Zelanda se convirtió en la primera nación en otorgar el derecho al sufragio a las mujeres.
- Convención para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer: El 18 de diciembre de 1979 diciembre la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) aprobó este texto que entró en vigor como tratado internacional en 1981. El documento aportó importantes elementos como la definición de la discriminación hacia la mujer, a la vez que incluyó acciones encaminadas a su eliminación en las diferentes estructuras sociales.
- Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer: El encuentro, que tuvo lugar en Beijing en 1995, trascendió gracias a la “Declaración y la Plataforma de Acción de Beijing”. Dicha Declaración estableció medidas y objetivos para impulsar el progreso de las mujeres en 12 áreas fundamentales. Además, se reconoció que toda la estructura de la sociedad y las relaciones entre los hombres y las mujeres en el interior de esa estructura tenían que ser reevaluadas.
- Agenda 2030: En 2015, todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas aprobaron 17 Objetivos como parte de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Específicamente, el Objetivo número 5 establece metas concretas para lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y niñas. Este compromiso a nivel mundial subraya la importancia de abordar las disparidades de género en diversas áreas, desde la educación hasta la participación política y económica.
- Movimiento #MeToo: Este movimiento ganó visibilidad en 2017 como una forma de romper el silencio que rodeaba al acoso sexual. Se convirtió en un llamado a la rendición de cuentas, inspirando un diálogo crítico sobre la cultura del silencio y la necesidad imperante de un cambio cultural hacia la igualdad y el respeto.
¿Cuánto falta por avanzar en la igualdad de género?
La igualdad de género ocupa un lugar fundamental entre los principios de derechos humanos. Sin embargo, a pesar de los notables avances en la defensa de los derechos de la mujer a nivel global y de los esfuerzos, todavía existen historias de discriminación y violencia que atentan contra la igualdad, dignidad e independencia de mujeres y niñas.
Estamos hablando, en muchos casos, de creencias arraigadas profundamente en la sociedad que limitan los derechos civiles, culturales, económicos, políticos y sociales. A esto se suman formas complejas de discriminación, como la basada en edad, raza, etnia, discapacidad o situación socioeconómica.
En este sentido, persiste una brecha que impide cumplir la promesa de un mundo sin barreras jurídicas, sociales y económicas para las mujeres y niñas. Por tanto, es fundamental poner en marcha acciones tangibles que provoquen cambios en la sociedad, así como prácticas que impulsen positivamente la representación de género en los medios de comunicación y la cultura popular.
¿Qué puedes hacer por la igualdad de género?
Si te estás preguntando cómo puedes aportar a la lucha por la igualdad de género, te traemos algunas ideas para que marques la diferencia:
- Desafía los estereotipos, rompe con los sesgos establecidos y enfrenta las formas de discriminación que están normalizadas en la sociedad.
- Participa en conversaciones constructivas, promueve el diálogo y la aplicación de políticas inclusivas.
- Estudia sobre las desigualdades existentes y comparte los conocimientos. Que las cosas hayan funcionado de una forma siempre no significa que esté bien. Recuerda que la historia de lucha por la igualdad de género todavía se está escribiendo.
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