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En el mundo de las finanzas e inversiones, uno de los procesos más importantes en la actividad económica de una empresa es el cierre contable, que asegura la integridad y precisión de la información contable. Este procedimiento establece el fin de un periodo contable y marca las bases de la preparación del siguiente año contable. En este proceso, los asientos de cierre de contable permiten una correcta asignación de ingresos, gastos y otros elementos financieros que veremos en este post.
Vamos a explorar a fondo la importancia de los asientos de cierre contable en el contexto de la contabilidad y las inversiones, analizando su función crítica en la presentación del ejercicio contable del año de la empresa. Es necesario tener en cuenta los asiento de cierre contable para tomar decisiones estratégicas para empresas e inversiones. ¡Quédate y aprende sobre los asientos de cierre contable!
Llevar la contabilidad en una empresa significa elaborar sus cuentas anuales y sirve de utilidad para los propietarios y administradores para tomar decisiones. Pero esa información aportada debe ser el reflejo de las operaciones llevadas durante un periodo determinado. Tras ese tiempo del ejercicio contable, en el que se lleva a cabo la actividad económica de la empresa, llega el cierre contable para sacar conclusiones de las ganancias, pérdidas y problemas ocurridos.
El cierre fiscal y el cierre del ejercicio contable de la empresa se realiza para presentar el resultado contable del año ante Hacienda. Estos días del año quedan marcados como los más importantes para cualquier departamento de contabilidad. Si los resultados son positivos, significa que la empresa ha producido ganancias, y, si son negativos, estaremos hablando de pérdidas para la empresa. Nos permite determinar con exactitud cómo se encuentra la empresa en el ejercicio económico.
Pero, ¿qué es exactamente el cierre contable? Hace referencia al cálculo final del ejercicio contable (tiene que coincidir con el año natural, del 1 de enero hasta el 31 de diciembre, aunque no es obligatorio). Consiste en un proceso de análisis exhaustivo y ajuste de las cuentas anuales que permite conocer el total de pérdidas y ganancias (utilidades) de la empresa. Estas cuentas de las que se hacen balance son de costos de producción, costos de venta, ingresos y gastos.
Se trata de una guía elaborada por el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas que lo utilizan los contables como de referencia para la regulación de la contabilidad en las sociedades españolas. Aquí se establecen todos los elementos que construyen la contabilidad de la empresa. Es vital que no haya ningún error en ninguno de ellos:
Dentro de los pasos a seguir para realizar un cierre contable, vamos a centrarnos en el último paso llamado Asientos de cierre contable. Dentro de este último apunte del ejercicio contable de una empresa, se saldarán todas las cuentas patrimoniales de la empresa. Con estas nos referimos a las cuentas de activo, pasivo y patrimonio neto que encontramos en los grupos del plan general contable mencionado anteriormente. Los asientos de cierre contable recopilan los importes de las diferentes cuentas en un solo apunte para finalizar la contabilidad del ejercicio con esos datos.
Los asientos de cierre contable tienen la finalidad de cerrar la contabilidad de un ejercicio, previamente realizando los ajustes del cierre del ejercicio y el asiento de regularización. Es necesario realizar los asientos de cierre contable por la importancia de separar todos los periodos económicos de la empresa. Estas cantidades, que forman parte de los asientos de cierre contable, serán las que empiecen el asiento de apertura del siguiente ejercicio contable y arrastrar las cuantías de un año a otro. Es decir, con el asiento de cierre terminamos la contabilidad de un ejercicio y con el asiento de apertura, iniciamos el siguiente.
El asiento contable es aquella anotación de las operaciones económicas o comerciales que lleva a cabo una empresa durante períodos económicos, y estos asientos de cierre contable se realizan a través de dos anotaciones: debe y haber.
En los asientos de cierre contable, se debe saldar y cerrar el resto de cuentas (grupos del 1 al 5 mencionados anteriormente), que formarán parte del Balance de situación. Esto nos dará el resultado final de pérdidas y ganancias, que nos aportará la rentabilidad total del año completo. Si la contabilidad se ha realizado correctamente, ambos lados del asiento tendrán el mismo valor: asiento de apertura.
Cuando se realiza los asientos de cierre contable, hay que comprobar que estén cuadradas las cuentas anteriores con los libros de empresa para no tener errores. Veamos los pasos a seguir para realizar los asientos de cierre contable:
Se comprueba la caja y las cuentas bancarias, las diferentes operaciones financieras, los gastos de personal y las facturas de clientes y proveedores.
Estos forman parte importante del proceso del ejercicio contable donde se encuentran las operaciones que darán los datos sobre lo que se actuará.
Dentro de este paso, nos encontramos ajustes como la amortización del inmovilizado, el deterioro del valor de los activos, las subvenciones, los asientos de periodificación y reclasificación de la deuda.
Para realizar correctamente los asientos de cierre contable, se debe revisar que todas las cuentas estén bien hechas y de un resultado de pérdidas y ganancias.
Se saldan todas las cuentas anteriores (del grupo 1 al 5) y se cierran los libros contables de ese año.
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