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Como sabes, la reciente pandemia de COVID-19 ha dejado muchas secuelas en las personas que han sobrevivido.
Y es que el COVID-19 es una infección respiratoria que puede ser grave.
Pues hace que el revestimiento interno del pulmón se inflame e irrite.
Por ejemplo, entre los síntomas de COVID-19 incluyen tos, dolor en el pecho, dificultad para respirar, fiebre o escalofríos.
Sin embargo, una de las secuelas más frecuentes de la enfermedad es la tos persistente, que resulta ser bastante incómoda.
En este post, te hablaremos sobre algunos remedios caseros para la tos, que son muy útiles junto con otros avances de la medicina sobre tratamientos médicos.
¿Quieres descubrir todo esto y mucho más?
No te pierdas esto que te vamos a contar a lo largo de las siguientes líneas.
¡Vamos allá!
Realmente, la tos es un síntoma común experimentado por muchas personas.
Por lo general, es causada por infecciones virales, alergias y otras enfermedades respiratorias, como el COVID-19.
Pero lo cierto es que hay algunas formas de aliviar la tos, como beber muchos líquidos y tomar medicamentos de venta libre.
En este sentido, la tos es un reflejo que se activa por la irritación de las vías respiratorias.
Las causas más comunes de la tos son:
Irritación de las vías respiratorias
Infección bacteriana
Infección viral
Alergias
Líquido en los pulmones (neumonía)
En cierto modo, la tos es un reflejo que ayuda a proteger los pulmones y las vías respiratorias al eliminar las cosas que pueden haber sido inhaladas.
Y es que, el reflejo de la tos se desencadena por la irritación de la garganta, los bronquios o los pulmones.
La tos es una reacción natural a los irritantes en las vías respiratorias y los pulmones.
Por lo general, la tos tarda entre 2 y 3 días en desaparecer por sí sola.
La tos puede ser una señal de que una persona tiene bronquitis, neumonía o asma.
Sin embargo, hay muchas razones para toser y es importante averiguar la causa para saber qué hacer cuando la tos persiste.
Por tanto, lo primero que debe hacer es determinar si hay otros síntomas presentes, como fiebre, escalofríos, dolor en el pecho o dificultad para respirar.
De lo contrario, puede deberse a un resfriado o una alergia y puede tratarse con medicamentos de venta libre como ibuprofeno y paracetamol.
Aunque si hay otros síntomas presentes, la persona deberá consultar a su médico para recibir tratamiento adicional.
En general, hay una serie de síntomas que pueden indicar problemas de salud graves.
Por ejemplo, si llevas más de dos semanas tosiendo, es hora de visitar al médico.
Pero, como sabes, la tos frecuente puede ser causada por varios factores diferentes.
Las causas más comunes de la tos son el asma y el resfriado común.
En cambio, otras causas incluyen fumar, alergias, goteo posnasal, bronquitis y neumonía.
En cierto modo, la garganta y la nariz están más congestionadas por la noche y la tos es peor.
Y esto se debe a que los conductos de aire son más estrechos durante la noche.
En primer lugar, es muy importante que entiendas que la tos es un acto reflejo para limpiar las vías respiratorias y los pulmones de mucosidad, partículas de polvo e irritantes.
Es decir, es una respuesta natural a la bronquitis, asma, neumonía y otras enfermedades respiratorias.
No obstante, ya te hemos comentado antes que la tos también puede ser provocada por el humo del tabaco o el ejercicio.
Pues en el caso del tabaco, el humo contiene muchos irritantes que pueden empeorar la tos ya que estimula el reflejo de la tos.
Cuando el humo del tabaco ingresa a los pulmones, provoca la constricción de las vías respiratorias, lo que a su vez hace que se produzca más mucosidad.
Además, el tabaco también contiene nicotina, que provoca espasmos musculares que empeoran la tos.
En este contexto, la tos por el ejercicio es causada por la irritación del revestimiento de los pulmones mientras están irritados por la actividad extenuante.
A pesar de todo, también es posible que una persona que tenga asma u otra afección que le haga
En este aspecto, los remedios caseros para la tos más comunes son la miel, el té de limón y el agua caliente con limón.
Por ejemplo, la miel se ha utilizado como agente antibacteriano durante siglos.
Pues esta actúa como un agente calmante para cubrir la garganta y ayudar a calmar la tos.
Además, el té de limón puede ser útil para calmar la garganta y la tos.
Pues cuando se mezcla con agua caliente y limón, ayuda a disolver la mucosidad en la garganta.
Y es que, el agua caliente con limón también ayuda a disolver la mucosidad en la garganta y también es una buena fuente de vitamina C, que se necesita para combatir las infecciones.
En cambio, algunas personas descubren que estos remedios caseros para la tos no les funcionan o les resulta demasiado difícil hacerlos ellos mismos.
En este caso, lo ideal es consultar siempre con un profesional de la salud.
¿Sabías que la cebolla es un antibiótico natural que se ha utilizado para tratar la tos durante siglos?
Aunque lo cierto es que se puede utilizar de muchas maneras.
Por ejemplo, se puede comer crudo o cocido en sopa o como ensalada.
En este contexto, la forma más común de usar la cebolla para la tos es hacer un té de la cebolla picada con agua hirviendo. La cebolla se hierve hasta que se ablanda y luego se cuela para hacer el té.
No obstante, cabe señalar que la cebolla no debe hervirse demasiado porque se ablandará demasiado y perderá sus propiedades curativas.
Pero como te decíamos antes, el té también se puede hacer con miel y limón si se desea, lo que hará que sepa mejor y le agregará más vitaminas y nutrientes.
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¡Nos vemos en el próximo post!
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