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Los números romanos son una de esas cosas que te enseñan desde los primeros años en la escuela y aunque quizás para muchos no sean de mayor relevancia, luego de simplemente saber cómo se escriben y leen, la verdad es que ciertos aspectos son útiles consciente o inconscientemente. Quizás no te lo hayas preguntado antes, pero ¿sabes cómo se pronuncian los números romanos?
Si quieres saber de esto y otras cosas que quizá desconocías, quédate con nosotros y sigue leyendo.
En primera instancia, es fácil darse cuenta de que los números romanos y el sistema numérico decimal (el que usamos normalmente) no son parecidos, al menos en su escritura. Lo que los diferencia principalmente es que los primeros no son posicionales, a diferencia de los segundos, sino que es aditivo-sustractivo.
Esto quiere decir que para conocer que valor tiene un numero romano es necesario sumar o restar los valores de los símbolos que los componen de acuerdo a su posición (derecha o izquierda). Además de esto, la numeración romana no incluye un símbolo que pueda representar el cero.
Así, es importante también aclarar que si bien el sistema numérico decimal posee en su haber diez cifras con las que podemos escribir todos los números posibles, el sistema de numeración romana únicamente posee siete símbolos con los que es posible escribir sus números. Los mismos son representados con letras que en la mayoría de los casos se usan en mayúsculas y son: I, V, X, L, C, D, M. También se hace uso de una “raya”, la cual se coloca sobre alguna de estas letras para representar números que sobrepasan el 3999.
Antes de decirte como se pronuncian los números romanos, aclaremos como se clasifican los estos números. Las letras o símbolos que hemos mencionado anteriormente tienen cada uno un valor y se pueden clasificar en tres tipos.
I = 1 y puede restarse únicamente de V y X.
X = 10 y puede restarse únicamente de L y C.
C = 100 y puede restarse únicamente de D y M.
V = 5.
L = 50.
D = 500.
M = 1000.
Para utilizar o expresar números del 4000 en adelante, se utiliza una raya sobre el número cuyo valor se multiplicará por 1000. Además, cabe mencionar que dentro del sistema numérico decimal, cualquier combinación de cifras se puede leer como un número válido, pero no ocurre lo mismo cuando aprendemos cómo se pronuncian los números romanos. Así, en esta última, escribir VV no tiene ningún tipo de sentido.
Como dato extra, se puede entender que, al no ser un sistema posicional, no tiene una base como tal, aunque la forma en la que fue creado probablemente está relacionada al hecho de que tengamos 5 dedos en cada mano y por eso hay símbolos que por sí solos representan las cantidades de 1, 5, 10, 50, 100, 500 y 1000.
Ya hemos hablado un poco acerca de como se pronuncian los números romanos y como se escriben, pero es necesario que hablemos sobre algunas otras reglas o cosas que caracterizan a este sistema tan único que ha seguido vivo después de tanto tiempo.
En primer lugar, como hemos visto anteriormente, si a la derecha de una cifra dada se escribe otra igual o menor, el valor de esta última se sumará a la anterior.
Un ejemplo de ello serían números como:
En el caso de la cifra “I”, si esta se coloca delante de la “V” o la “X”, les resta una unidad a las mismas. Aunque no sucede lo mismo de allí en adelante, pues la “X”, si precede a la “L” o a la “C”, les resta unas diez unidades y en el caso de la “C”, cuando se encuentra antes que la “D” o la “M”, les resta 100 unidades en total, lo que es esencial entender para saber cómo se pronuncian los números romanos.
Ejemplos para entenderlo serían:
Esto ya lo habíamos visto un poco por encima antes, pero ¿a que no sabías que en ningún número romano se puede poner una misma letra más de unas tres veces seguidas? Al menos esto responde a cómo se pronuncian los números romanos en la actualidad, aunque en la antigüedad se puede ver a veces la “I” y la “X” hasta cuatro veces seguidas, lo que se considera un error.
Como ejemplos de estos casos podríamos tener:
Otra cosa importante es que algunas cifras como “V”, la “L” y la “D” no pueden duplicarse ya que otras letras representan su valor duplicado, las cuales son “X”, “C” y “M”, respectivamente.
Y, por último, si entre dos cifras, sea cuales sea que sean, existe otra menor, esta última restará su valor a la siguiente, ¿Cómo se puede entender esto? A través de este ejemplo que nos ayuda a ver como se pronuncian los números romanos.
No todas las personas saben como se pronuncian los números romanos y esto se debe principalmente a que es un sistema en desuso debido a sus dificultades de lectura y escritura. Sin embargo, en la actualidad se pronuncian y se leen como los números ordinarios del sistema decimal occidental atendiendo a su valor real. Y para su uso o escrito, se suele utilizar en los siguientes casos:
No cabe duda que los números romanos son una reliquia que hoy en día solo se utiliza dentro de ciertos contextos, más por tradición, realce y elegancia, que por necesidad. Sin embargo, dicho uso extendido hace que se vuelva una necesidad aprender como se pronuncian los números romanos, como también leerlos y escribirlos.
De igual forma, cabe destacar que el uso de los mismos puede ayudar para la realización de actividades en clase que apunten a ampliar el alcance y desarrollo del pensamiento lógico y el sentido numérico. Por tal razón y si quieres aprender un poco sobre este tema, te invitamos que puedas ingresar en Euroinnova, la Escuela de Negocios especializada en formación online. En la misma encontrarás los mejores programas educativos para que puedas aprender a utilizar este sistema numeral en diversos propósitos profesionales.
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