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¿Qué tienen los agapornis que llama la atención de todo el mundo? Su plumaje, su color, su actividad o significado, alguna de estas características, ponen el foco de atención en estas aves similares a los loros, pero más pequeños. Son una de las aves más populares como mascotas domésticas y en este artículo te vamos a contar el motivo de esta popularidad tan expandida. Bellos, fáciles de cuidar y muy sociables, qué más cosas pueden aportar estas aves. Veamos cómo son los agapornis y cuáles son sus características más destacadas. ¡Sigue leyendo!
Su nombre proviene del griego agapé (amor incondicional) y el término ornis (pájaro). Por ello, se les conoce como los pájaros del amor o inseparables. Este tipo de aves, como son los agapornis, pertenecen al género psitaciformes de la familia Psittaculidae. Se caracterizan por tener una forma de interaccionar muy particular al ser muy sociables y ser muy fieles a sus parejas. Es por eso, que existe una leyenda que si uno de los dos muere, el otro agaporni fallece también. Exageración que puede chocar en animales, pero refleja el carácter monógamo de los agapornis y lo sentimentales que pueden llegar a ser.
Los agarponis proceden de África. Fue descubierto en 1887 por el doctor Gustav Fischer en el continente africano, pero no llegó a Europa hasta que el experto en Zoología, el alemán Carl Hagenback, trajo algunos de esos ejemplares en 1973. Estaba fascinado por su especie y características, y decidió estudiar la especie de cerca. Fueron 150 años en llegar a Europa, y ahora son una de las aves domésticas más populares.
Los agapornis, comúnmente conocidos como inseparables o loritos del amor, son un género de aves pequeñas pertenecientes a la familia Psittaccidae. Originarios de África, estos coloridos loros se han ganado su apodo debido a los fuertes lazos que forman con sus parejas, con quienes suelen pasar la mayor parte de su tiempo. Además, se han convertido en una mascota muy popular entre la ciudadanía.
Esta pequeña ave suele medir entre 13 y 16 centímetros y su peso oscila entre los 28 y 60 gramos, siendo ideal como mascota para personas que viven en espacios reducidos. Su plumaje se caracteriza por ser vibrante y colorido y poseen un pico robusto y curvado, además tienen patas muy ágiles, lo que les permite manipular objetos con destreza, una habilidad típica de los loros.
Los agapornis son extremadamente sociales y disfrutan de la interacción tanto de otros inseparables de su especie, como de los humanos. Son conocidos por su lealtad y la formación de vínculos duraderos con sus parejas. Asimismo, cuando se crían en un entorno amistoso y se socializan desde una edad temprana, tienden a ser dóciles y afectuosos con las personas.
Con los cuidados apropiados, estos pequeños loros suelen alcanzar una longevidad de entre 10 y 20 años, convirtiéndose en compañeros fieles a largo plazo. Estas aves requieren atención y cuidados específicos, incluyendo una dieta balanceada, un ambiente enriquecido con juguetes y perchas, y una jaula de tamaño adecuado para ejercitarse y moverse libremente.
Los agapornis son aves, relacionadas con los loros, bastante pequeñas por tener una estatura de apenas 15 centímetros. Su esperanza de vida suele ser la misma en todas las especies. Además, es una de las especies más longevas. Pueden llegar a vivir entre 10 y 15 años, dependiendo de factores tan importantes como los cuidados o si su compañera/o fallece. Como hemos explicado, los agapornis son aves muy cariñosas y fieles, y si su acompañante de vida muere, el otro agaporni también lo hará. También, pueden volver a buscar a otro agaporni que sienta afinidad.
Los agapornis son muy amorosos y sociables. Tiene un carácter mimoso que le permite ser más cercano con su dueño/a. Los agapornis pueden llegar a crear un vínculo amoroso muy fuerte. Le encanta que le acaricien y jugar fuera de su jaula. El día a día hará que esa unión sea mucho más fuerte e inquebrantable. Además, es un ave bastante fácil de adiestrar, por lo que será fácil de coger confianza. Es un ave muy inteligente que podrás enseñarle trucos sorprendentes. Los agapornis son aves cercanas, y si se sienten cómodas, podrán aprender mucho.
Una de las cosas que le hacen felices son el agua. Disfrutan muchísimo del agua si tienen una pequeña bañera en su jaula, como si meten la cabeza debajo de un grifo. Los chapuzones les proporciona felicidad al ser imprescindibles para ellos. Sin embargo, los agapornis también pueden ser territoriales. Es decir, si trata con alguien extraño, no le gustará que ronde por su territorio. Pueden llegar a ser agresivos con otros animales si no les agrada.
Para identificar si tu agaporni vive diferentes estados de ánimo, puedes fijarte en aspectos como su actividad nerviosa o tranquila, el movimiento de sus alas o su plumaje. Por ejemplo, si los agapornis están contentos, curioseará por todos lados, se peinará su plumaje y emitirá sonidos. Además, gracias al vínculo tan fuerte que une, es fácil identificar si está bien o mal. Es importante su cuidado para que pueda durar el mayor tiempo posible sano.
Se le conoce también como el agaporni de Namibia, siendo de los más comunes de esta especie. El ambiente en el que está acostumbrado a vivir es cálido, por eso si se encuentra como mascota en países más fríos, es necesario aclimatar el lugar para sobrevivir.
De los agapornis más bellos del mundo y de los adorados del mundo. La mayor característica de esta especie es el color negruzco. Y tiene un pico de color rojo brillante que contrasta con el resto de la cabeza.
Una de las características de esta especie es que los ejemplares jóvenes tienen una tonalidad más apagada que los adultos.
Esta especie de ave es nativa de África oriental, sur de Tanzania, Malaui y noroeste de Mozambique. Es similar a la especie anterior, fischeri, que se compone de una máscara rojiza y anaranjada mucho más definida y oscura, y carece del azul en el vientre.
Los agapornis son muy limpios como podemos observarles siempre en su jaula o fuera que se están acicalando sus alas. Está bien decir que son unas aves muy coquetas, por eso les gusta vivir en jaulas bien limpias. Lo ideal es desinfectar cada semana la jaula, incluidos los barrotes, ya sean naturales o de plástico, y los juguetes que tengan. Se recomienda usar una bayeta, solo para usarla para la jaula, con agua templada y un poco de lejía diluida. Y tras la limpieza a fondo, secarlo todo con una toalla o papel. El sitio ideal para colocar la jaula tiene que ser donde no haya corrientes de aire, es decir, ni al lado de puertas ni de ventanas. La seguridad y limpieza son claves para el cuidado de los agapornis. Aquí te mostramos los mejores másteres para hacer terapia con animales.
La alimentación diaria de un agaporni debe ser variada, como buen omnívoro que es, para evitar carencias nutricionales y, además, debe incluir un 12% de su peso entre comida seca y húmeda. La lista de lo que suelen comer los inseparables incluye:
Incluye pipas de girasol, mijo, alpiste, linaza, trigo sarraceno, entre otras. Es importante no abusar de ellas debido a su alto contenido graso y, además, se recomienda alternar diferentes tipos de semillas diariamente para evitar excesos.
Como las de centeno, judías blancas, lentejas o garbanzos, que se puede ofrecer una o dos veces a la semana.
Es el alimento más completo y equilibrado para la dieta de estas mascotas, además es el principal alimento seco y proporciona un balance nutricional muy adecuado.
Es importante complementar la dieta de los agapornis con alimentos frescos. No obstante, estos deben estar pelados y sin pepita y se deben ofrecer con moderación. Algunas opciones como la papaya, el melón, la mandarina, la manzana, la zanahoria, el pimiento o el brócoli, son muy beneficiosas para estos animales.
Fuente de proteínas y calcio, especialmente recomendable durante la época de la cría.
La inclusión de frutas y verduras en la dieta de los agapornis, es esencial, ya que aportan nutrientes vitales y fomentan su bienestar físico y mental. Sin embargo, es muy importante saber qué alimentos concretos son seguros y beneficiosos para ellos.
Manzanas: Son ricas en fibra y en vitamina C. Se deben ofrecer sin semillas y cortadas en trozos pequeños.
Piñas: Contienen enzimas digestivas y también vitamina C. Se les debe servir en pequeños trozos y sin cáscara.
Melón: Incluyendo el cantalupo y el de agua, son refrescantes y muy nutritivos. También se les debe dar sin semillas.
Plátanos, peras, uvas y bayas: También son recomendables, siempre y cuando se preparen adecuadamente antes de ofrecerlos.
Espinacas: Aportan hierro y antioxidantes, pero deben darse en pequeñas cantidades debido a los oxalatos que contienen.
Zanahorias: Fuente de vitamina A y fibra. Se pueden ofrecer rallados oen trozos pequeños.
Pimientos: Ricos en vitamina C y antioxidantes. Se les debe dar sin semillas y membranas internas.
Lechuga y brócoli: Estas verduras son también recomendadas para dárselas de 1 a 3 veces por semana.
Es importante ofrecer una variedad de frutas y verduras para asegurar una dieta equilibrada y tener en cuenta la moderación en las cantidades para evitar problemas digestivos. Además, todos los alimentos deben lavarse y prepararse correctamente antes de su consumo, eliminando semillas y partes no comestibles.
Cuando se trata de cuidar a los inseparables, es muy importante saber qué alimentos no pueden comer. Algunos alimentos comunes pueden ser perjudiciales e incluso tóxicos para estas aves, por lo que es crucial mantenerlos fuera de su alcance. A continuación, vamos a conocer algunos alimentos que no son aptos para agapornis.
Aguacate: Contiene persina, una sustancia que puede causar problemas cardíacos graves en las aves.
Patata cruda: Puede contener solanina, un compuesto tóxico para los agapornis.
Semillas de manzana: Aunque la manzana es muy beneficiosa para estos animales, sus semillas incluyen cianuro, que es venenoso para muchas especies, incluidos los inseparables.
Perejil: Aunque es un debate entre los entendidos de la materia, este puede ser peligroso debido a sus aceites volátiles y ácido oxálico.
Sal (o alimentos con sal): La sal en exceso es perjudicial para los agapornis y puede llevar a problemas de salud serios.
Leche: Los agapornis no pueden digerir la lactosa, lo que puede causar problemas digestivos.
Café y chocolate: Contienen teobromina y cafeína, que son estimulantes peligrosos para las aves.
Bebidas con gas y alcohol: Son sustancias que deben evitarse completamente, ya que pueden ser fatales para los agapornis.
Cebollas: Pueden causar anemia o problemas respiratorios en las aves.
Alimentos procesados: A menudo contiene altos niveles de sal y azúcar, además de conservantes y colorantes que no son saludables para los inseparables.
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Uno de los errores de personas que poseen agapornis en sus casas es llenar la jaula de juguetes. Esto hace que los agapornis no tengan espacios en su jaula para moverse de un lado a otro. Lo ideal es comprarle una cuerda o un columpio, dos juguetes como máximo.
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