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La calidad de vida se ve muy mermada cuando se sufre síndrome del ovario poliquístico. Esta afección, que padecen alrededor de una de cada diez mujeres, es uno de los trastornos endocrinos más frecuentes y puede llegar a afectar a varios planos de la vida, como a la salud, a la fertilidad o al aspecto físico. Además, este síndrome relacionado, con el sistema reproductor femenino, también desencadena severos trastornos hormonales que, a su vez, producen cambios bruscos del metabolismo y, en consecuencia, acabar afectando a la salud mental.
¿Sabías que entre el 5 y 10% de las mujeres en edad reproductiva padece síndrome del ovario poliquístico? Si te interesa todo lo relacionado con la salud de la mujer, la ginecología y el bienestar, no dejes de leer este post, donde veremos en qué cosiste y cómo puede llegar a afectar a la vida diaria de las mujeres que conviven con él.
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El síndrome de ovario poliquístico es un trastorno hormonal que afecta principalmente a las mujeres en edad reproductiva. Esta afección se caracteriza por la presencia de múltiples quistes en los ovarios, que son pequeñas bolsas llenas de líquido. Aunque estos quistes no son malignos, puede provocar muchas molestias e incluso fomentar la aparición de otras patologías como la obesidad.
Aunque no en todas las mujeres se manifiesta de la misma manera, el síndrome del ovario poliquístico suele tener los siguientes síntomas:
Anovulación: las mujeres con SOP pueden tener dificultades para ovular regularmente o pueden experimentar anovulación crónica, lo que afecta su fertilidad y puede causar problemas para concebir.
Desequilibrio hormonal: existe una producción desequilibrada de hormonas sexuales, como los niveles elevados de hormonas masculinas (andrógenos) como la testosterona, y niveles bajos de hormonas femeninas como los estrógenos y la progesterona.
Síntomas menstruales irregulares: las mujeres con SOP pueden experimentar ciclos menstruales irregulares, ausencia de períodos menstruales (amenorrea) o períodos menstruales muy frecuentes.
Hirsutismo: el hirsutismo se refiere al crecimiento excesivo de vello en áreas como la cara, el pecho, el abdomen y la espalda, debido al aumento de los niveles de andrógenos.
Aparición de acné: el acné severo o resistente al tratamiento también puede ser un síntoma común en mujeres con SOP.
Resistencia a la insulina: muchas mujeres con SOP tienen resistencia a la insulina, lo que significa que el organismo tienen dificultades procesarla y usarla como energía. Esto puede llevar a un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 y contribuir al aumento de peso.
El síndrome del ovario poliquístico se da cuando los ovarios o las glándulas suprarrenales femeninas producen un exceso de hormonas masculinas. Esto produce todos los síntomas anteriormente mencionados.
Aunque no se ha descubierto aún la causa exacta que lo provoca, se ha confirmado que la carga genética de las progenitoras o enfermedades que alteran el sistema endocrino, como la obesidad, aumentan las posibilidades de sufrir ovario poliquístico.
Aunque esta alteración hormonal no tiene cura, si se pueden paliar sus efectos siguiendo las siguientes pautas:
Cambios en el estilo de vida: adoptar hábitos saludables puede ser fundamental. Se recomienda mantener un peso saludable mediante una alimentación equilibrada y actividad física regular. La pérdida de peso, incluso del 5 al 10% del peso corporal, puede mejorar los síntomas del SOP y la ovulación.
Control de la resistencia a la insulina: como hemos visto anteriormente, la resistencia a la insulina es común estas mujeres, por lo que será importante mantener una dieta baja en carbohidratos refinados y azúcares, así como hacer ejercicio regularmente.
Medicamentos para regular los ciclos menstruales: si hay problemas con la regularidad de los períodos menstruales, el médico puede prescribir anticonceptivos orales o progestinas para ayudar a regular los ciclos y controlar los síntomas como el acné y el exceso de vello corporal.
Medicamentos para estimular la ovulación: Si la mujer desea concebir, se pueden recetar medicamentos para estimular la ovulación, como el citrato de clomifeno o la gonadotropina, bajo la supervisión de un médico especialista.
Tratamiento del hirsutismo y el acné: para controlar los síntomas de exceso de vello corporal y acné, se pueden emplear medicamentos como los antiandrógenos o técnicas de depilación láser. El tratamiento del acné puede incluir productos tópicos, medicamentos orales o ambos.
de la fertilidad: si la mujer está intentando quedarse embarazada, se pueden considerar técnicas de reproducción asistida, como la fertilización in vitro (FIV), bajo la orientación de un especialista en obstetricia y fertilidad.
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Cristina Polo Calvo
COPYWRITER
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