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El concepto de ubicación es bastante amplio debido a su utilización en muchos campos, sobre todo, en la informática, las soluciones digitales y la navegación en tiempo real. En este post, te contamos todo lo que debes saber al respecto, como sus principales herramientas, funcionamiento y alcances.
En términos generales, la palabra ubicación alude al “lugar en que está ubicado algo” (Diccionario de la lengua española). En otras palabras, se trata del sitio que sirve de emplazamiento para cualquier objeto –físico o virtual– sea cual fuera sus dimensiones. Como equivalente, se utiliza el término localización, que está ampliamente extendido en informática para señalar dónde se encuentra un archivo, al que se lleva mediante una ruta. La localización, asimismo, alude al señalamiento exacto o aproximado –según la tecnología utilizada– de un dispositivo o dirección física.
Precisamente, los servicios de localización, debido a su integración con las nuevas tecnologías, permiten acceder a la ubicación precisa de casi cualquier lugar del planeta (zonas urbanas, rurales, entre otros). Tales tecnologías, como se verá con el Global Positioning System (GPS), recurren a herramientas incluso más sofisticadas para triangular posiciones en tiempo real, sobre todo, a través de satélites que orbitan la tierra. Esta solución se impone como una ventaja con respecto a los métodos tradicionales de ubicación, los cuales, a pesar de su funcionalidad, presentan algunas limitaciones.
La historia detrás de todas estas herramientas abarca un marco temporal extenso en el que se crearon la brújula, la cartografía, el sextante, entre otros. Los mapas, en la actualidad, han evolucionado a versiones digitales ofrecidas por servicios de ubicación, como Google Maps, que permiten la navegación –cuando está disponible– a través de calles, avenidas, etc.
Las nuevas tecnologías permiten el despliegue de sistemas avanzados de geolocalización, los cuales permiten establecer la ubicación de un dispositivo u objetivo en un emplazamiento específico. El funcionamiento de dichos sistemas varía en función de los instrumentos que permiten el rastreo de redes o aparatos, pero se caracterizan en general por su capacidad detección y rastreo de la actividad de sus usuarios. Los dispositivos electrónicos como los teléfonos inteligentes permiten activar o desactivar esta opción.
En la actualidad, se utilizan tres principales sistemas de geolocalización: GPS/GNSS, GMS y WIFI. Veamos en qué consiste cada uno de ellos.
GPS o GNSS. Este sistema permite la geolocalización debido a la red de satélites que ofrecen una visión global de la Tierra. Ofrece la ubicación en tiempo real y de manera precisa, por lo que es especialmente utilizada los sistemas de transporte (aéreo, terrestre y marítimo). Cuenta con tres fases:
Fase 1. Transmisión satelital de la señal.
Fase 2. Cálculo de la transmisión y corrección de datos.
Fase 3. Fijación de la posición por triangulación.
GMS. Este tipo de localización ocurre gracias a las redes de Global System for Mobile Communications (GMS), desplegadas por antenas y torres de telefonía. Su funcionamiento también permite rastrear dispositivos a través de la triangulación; sin embargo, no es tan precisa como el GPS/GNSS.
WiFi. Con base en la dirección MAC, este tipo de geolocalización opera mediante las conexiones de dispositivos a redes WiFi y puntos de acceso, los cuales brindan información siguiendo las direcciones IP.
Estas aplicaciones se utilizan cotidianamente para la navegación en calles, la búsqueda de lugares, la visualización de rutas recomendadas, entre otros. Aunque hay opciones desarrolladas específicamente para determinados usos, como el Waze para el transporte terrestre, resaltan los mapas ofrecidos por Google y Apple.
Es una de las aplicaciones más utilizadas por los usuarios de Android a nivel mundial. Proporciona servicios de mapas, direcciones, recomendaciones de lugares cercanos, tiempo de viaje aproximado según el medio de transporte elegido, programación de autobuses, reseñas, horarios de apertura, entre otros. Además, ofrece actualizaciones del tráfico en tiempo real, así como direcciones exactas de casas, museos, hoteles, farmacias, cajeros automáticos y demás. Su interfaz permite la navegación en Street View y visualización en modo satélite. Requiere permisos del usuario y puede guardar el historial de ubicaciones.
Apple Maps, por su parte, está integrado exclusivamente en los dispositivos con los sistemas operativos iOS, iPadOS y macOS del ecosistema Apple. Tiene casi las mismas prestaciones que Google Maps, pero también ofrece la visualización 3D de las calles, el modo Flyover, la vista panorámica y las guías de viaje. Sus servicios de localización puede desactivarse en la configuración del dispositivo.
Casi todas las aplicaciones integran los servicios de ubicación para mejorar la experiencia del usuario. Con este permiso concedido, las aplicaciones acceden a la localización del dispositivo, lo que deriva en mejores recomendaciones de servicios, soluciones de transporte y personalización de la experiencia. Por ejemplo, los gestores de fotografías pueden administrar las ubicaciones para compilar las imágenes según la ubicación de estas.
Tampoco puede dejar de mencionarse la importancia de la ubicación o geolocalización en los motores de búsqueda. En este caso, los buscadores acceden a esta información para proporcionar resultados relevantes según la zona. Así, las búsquedas son más precisas, adaptadas a los públicos y, desde luego, más pertinentes para los intereses del usuario.
GeoGuessr es un juego en línea cuya dinámica gira en torno a adivinar una ubicación aleatoria proporcionada Google Maps (Street View). Pueden incluirse zonas urbanas, rurales y otros espacios, y basta con mencionar, en ocasiones, el país, aunque el juego también podría solicitar el nombre específico de la ciudad. Se puede compartir con otros jugadores en modo gratuito.
Se trata de una opción muy divertida para explorar no solo Google Maps, sino también para comprender de qué manera funcionan estas aplicaciones, sus interfaces y sus principales servicios. Así, como medio de entretenimiento, acerca a niños, jóvenes y adultos al conocimiento de la geografía y al uso interactivo de la tecnología con fines educativos.
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