Especialista en Detección y Prevención en Situaciones de Igualdad de Género
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A lo largo de los años, se ha podido comprobar multitud de sucesos discriminatorios por razón de sexo en los que además se añade otro componente discriminatorio por razón de la raza o la etnia entre otros aspectos. Esto es lo que se conoce como la interseccionalidad del feminismo, y que añade a la perspectiva de género otras de otro tipo que deberán ser erradicadas para una sociedad más justa y enriquecida en valores de igualdad y de respeto. ¿Quieres saber más sobre la interseccionalidad?
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En el ámbito empresarial son cada vez más las empresas que cuentan con un plan de igualdad donde se contempla una perspectiva de género en cuanto a las directrices o normas que se desarrollan a nivel interno entre sus empleados. Y es que, la figura del agente de igualdad dentro de los organigramas empresariales ha dejado de ser un algo excepcional para convertirse en la tónica más habitual como garante de la igualdad y combatiente de los casos de discriminación a nivel empresarial. Lograr un clima laboral ausente de discriminación es posible por parte de aquellos profesionales que cuenten con una alta cualificación en esta área como la que proporciona el curso de prevención en igualdad de género de Euroinnova.
El término interseccionalidad hace referencia al enfoque teórico, político o metodológico relacionado con la discriminación social que padecen las mujeres. Y es que, categorizar a las mujeres teniendo en cuenta su condición sexual, su color de piel o su estatus social supone seguir las directrices del feminismo hegemónico, sin tener en cuenta otras particularidades de la mujer como pueden ser su raza, su clase social o su identidad sexual.
Por lo tanto, la interseccionalidad trata de esclarecer los diferentes tipos de opresión o privilegios que pueden tener teniendo en cuenta además de su condición de mujer, otros aspectos que forman parte de su condición como por ejemplo su raza, que pueden también generarle marginación social.
La primera persona que definió lo que se conoce como interseccionalidad fué Kimberlé Williams Crenshaw. Esta profesora estadounidense cuyo campo de especialización era la teoría crítica de la raza la definió de la siguiente forma:
El fenómeno por el cual cada individuo sufre opresión u ostenta privilegio en base a su pertenencia a múltiples categorías sociales.
A nivel institucional, el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) define la interseccionalidad:
Las mujeres pertenecientes a algunos grupos, además de sufrir discriminación por el hecho de ser mujeres, pueden ser objeto de múltiples formas de discriminación por otras razones, como la raza, el origen étnico, la religión, la incapacidad, la edad, la clase, la casta u otros factores. Esa discriminación puede afectar a estos grupos de mujeres principalmente, o en diferente medida o en distinta forma que a los hombres
De una forma ejemplificativa, existe una notable diferencia entre la experiencia que pueden vivir dos mujeres aunque sean del mismo color y también puede ser distinta la que experimenten una mujer blanca de un barrio de clase alta de Madrid, que la de una mujer de etnia gitana que encuentra obstáculos a la hora de acceder a un trabajo bien remunerado.
Se evidencia así, que la interseccionalidad supone un punto de encuentro entre una problemática por motivos de raza, clase social o identidad sexual, y además por razón de sexo por ser mujer.
La interseccionalidad está estrechamente ligada a la tercera ola feminista que se centra en cuestionar el feminismo blanco occidental hegemónico. Por este motivo, ya se introduce en el movimiento otras variantes como la raza, la religión o la clase social como añadidos a la discriminación por razón de sexo.
Ahora bien, aunque exista la premisa en el movimiento feminista de que todas las mujeres son iguales sin que exista ninguna por encima de la otra, esta corriente concibe la interseccionalidad como un añadido más que debe ser tratado en cuanto a englobar las distintas discriminaciones a las que la mujer está sometida. Por lo tanto, los tipos de feminismo que se adhieren a la interseccionalidad son los siguientes:
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