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Aún no se han cuantificado los daños emocionales que la pandemia del Coronavirus causó en la humanidad y que aún sigue causando, sumado a los estragos en el sector salud, el crecimiento de la mortandad, el impacto económico y más. Los niños, adolescentes y jóvenes han visto cambiar su ritmo de vida debido a los confinamientos, y por ende, adaptarse a un nuevo sistema educativo. Veamos ¿cómo combatir la deserción escolar?
Si bien es cierto, que esta medida adoptada por los gobiernos e instituciones educativas se hace para salvaguardar las vidas de las personas, se ha notado una desmotivación entre los muchachos que ahora ven su juventud entre cuatro paredes, lejos de sus amigos y de la experiencia que la vida exterior les puede brindar.
En vista de este panorama, los entes educativos estudian medidas para atender a interrogantes tales como: ¿Cómo combatir la deserción escolar?, ¿Cómo usar la tecnología para evitar la deserción escolar? y otras tantas preguntas más que hoy intentaremos responder.
La deserción escolar es aquella elección que asumen los estudiantes de forma radical o progresiva, en la cual se ausentan del proceso educativo hasta abandonarlo definitivamente sin culminar su preparación académica. Este hecho se da mayormente en la etapa secundaria, aunque es la deserción universitaria la más vista a nivel mundial.
No obstante, vale aclarar que el tema de la pandemia a causa del Covid-19 no es el único causante de esta problemática, aunado a esto hay que sumar otros factores que pueden contribuir a la deserción estudiantil.
Para dar respuesta a cómo combatir la deserción escolar, es importante definir las causas que la originan, entre las más relevantes de esta problemática educativa mundial, tenemos las siguientes:
Una de las razones más comunes por la que los jóvenes se ausentan de las aulas de clases, es la falta de recursos económicos para subsanar gastos educativos. También resulta visto en muchos hogares, que por ausencia de alguno de los padres, enfermedades o manutención de sus hermanos, aquellos en edad escolar deben sacrificar sus estudios para ingresar al campo laboral.
Situaciones de conflicto familiar, como divorcios, discapacidad, muerte, embarazo, alcoholismo, drogadicción, entre otras, son causas que pueden generarla. Atacar estos problemas, es una de las formas de cómo combatir la deserción escolar.
El bullying, la desmotivación, discriminación, depresión, inseguridad, y otros elementos más, también son causantes de este suceso. Muchos jóvenes temen ir a las escuelas por miedo al rechazo, a la burla, algunos se desmotivan por ver imposible obtener un título o por sentir que no están en capacidad de lograr los objetivos educativos. Cómo combatir la deserción escolar, implica verificar que el entorno educativo sea el más idóneo para la formación de los estudiantes, incluyendo el factor emocional.
El entorno juega un papel muy importante en el desarrollo del individuo. Enfrentar algún delito y obtener privación de libertad es también una de las causas. Así como la mala decisión de cometer actos delictivos y formar parte de pandillas en sus comunidades.
Conociendo estos elementos, será mucho más fácil determinar las medidas para dar respuesta a cómo combatir la deserción escolar.
Tomando en cuenta las causas que originan este hecho, la mejor forma de evitar y prevenir este impacto educativo es atacando directamente dichas fuentes, de manera que es un trabajo en conjunto de los organismos competentes, los docentes y profesionales implicados en el proceso educativo, la familia y la sociedad.
En este sentido y para dar respuesta a la pregunta de cómo combatir la deserción escolar, tenemos las siguientes medidas:
Conociendo sobre las dificultades financieras que atraviesan muchas familias, las instituciones educativas y algunas empresas tanto públicas como privadas promueven la educación y combaten la deserción escolar a través de becas estudiantiles y ayudas económicas a las familias.
Para favorecer a los estudiantes, muchas empresas adecuan sus horarios laborales a los horarios escolares, a fin de que sus trabajadores continúen con su proceso educativo en la educación superior y a la vez perciban ingresos económicos que les favorezcan.
Tanto los docentes como orientadores están en capacidad de detectar problemas familiares en sus alumnos para lograr atenderlos a tiempo y evitar males mayores. A través de escuelas para padres, actividades deportivas, proyectos culturales, se deben buscar estrategias que permitan conocer el entorno familiar de los estudiantes y les oriente a educar a sus hijos por el mejor camino.
Los jóvenes interactúan con un mundo al que intentan conocer, y es indispensable que reciban una orientación adecuada según sus gustos e intereses. Un guía vocacional les ayudará a definir un poco mejor qué desean para su futuro y adecuarlo a las posibilidades de su entorno educativo, económico y social a fin de evitar desilusiones.
Muchos jóvenes pueden sufrir en silencio la discriminación, el bullying, la burla y la exclusión, lo que trae como consecuencia el fracaso escolar y su abandono. Para atender a preguntas ¿cómo combatir la deserción escolar? es necesario planificar sesiones terapéuticas y psicológicas para aquellos niños y jóvenes que pasen por este tipo de situaciones.
Muchas veces la causa de la interrupción del proceso educativo, es una materia que no consiguen aprobar, que no logran comprender y que se convierte en una piedra en el camino, para este tipo de situaciones, se deben fomentar clases particulares para mejorar el nivel académico. Los estudiantes necesitan una gran motivación para mantener su ánimo por los estudios y las clases personales son una valiosa herramienta para motivarlos, pues son interactivas y dinámicas
Existen muchas otras formas más de cómo combatir la deserción escolar, y que podemos hacernos partícipes con un buen consejo a un familiar o amigo, donde se dé a conocer la importancia de alcanzar un nivel académico y profesional.
Aunque en varios países este fenómeno muestra cifras que no son alarmantes, de igual forma no deja de ser un tema preocupante, en especial porque en 8 de cada 10 situaciones, el ausentismo escolar se relaciona a problemas económicos. Con la llegada de la pandemia la situación se ha recrudecido a raíz que las familias ya no pueden sostener sus gastos debido a la falta de empleo y el cierre de empresas.
El suceso de la pandemia mundial, como caso especial, requiere de algunas medidas de prevención especiales en relación a cómo disminuir la deserción escolar, entre ellas tenemos:
Como las clases se han desarrollado de forma online, es sumamente necesario que se planifiquen actividades en las que los estudiantes puedan acceder a los recursos digitales con facilidad. Conociendo los diferentes estatus económicos, las instituciones educativas deben abrir espacios para que aquellos que carezcan de medios puedan utilizar fácilmente los equipos y el servicio de internet.
La planificación educativa debe ser didáctica, interactiva y sencilla, que permita al estudiante participar de forma agradable y cómoda, que cuente con las herramientas y la información completa para que desarrolle su aprendizaje con facilidad. Por ello, el personal docente debe tener conocimiento sobre las tecnologías de información y comunicación (TICS).
El impacto emocional que causó la pandemia nos afectó a todos, y los jóvenes al ser más vulnerables, evidentemente presentaron depresiones y sentimientos encontrados. La motivación familiar y escolar debe ser fundamental para evitar que elijan abandonar sus estudios.
No basta con utilizar las plataformas para enviar y recibir tareas y proyectos, se deben crear espacio para la interacción en vivo y directo, donde ambos elementos, es decir, docentes y alumnos, puedan intervenir, sobre todo en materias que requiere de mayor atención explicativa como las matemáticas, física, química, ente otras.
Uniendo esfuerzos y aplicando estas sugerencias, cómo combatir la deserción escolar no será una interrogante más inmersa en el proceso educativo, pues las propuestas están dadas, solo hay que ponerlas en marcha.
Algunos países se han visto más afectados que otros en relación al impacto de la pandemia en el proceso educativo, por ejemplo, la deserción escolar en Colombia es una de las que más preocupa en el hemisferio, ya que tiene los peores indicadores y se encuentran en niveles de primaria y de bachillerato.
Mientras que la deserción escolar en el Perú venía registrando una tendencia a la baja durante los últimos años. De acuerdo con el Ministerio de Educación, la tasa de la deserción había pasado de 2.5% en el 2018 a 1.3% en el 2019 en primaria. Pero estos datos se vieron afectados actualmente como en el resto de los países.
En forma general, las preguntas que puedan plantearse en diferentes partes del mundo, en relación a cómo combatir la deserción escolar en México, o como evitar la deserción escolar en el Perú, por ejemplo, pueden ser abordadas con los datos expresado anteriormente.
Es de vital importancia entender las causas principales de este mal para asegurar a los estudiantes la educación continua que les garantice la obtención de su bachillerato y profesionalización en una carrera universitaria.
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