Categorías


Artículos de Seguridad y PRL

10 tecnologías que están transformando la industria eléctrica

10 tecnologías que están transformando la industria eléctrica

La innovación tecnológica ya es una realidad en la mayoría de los sectores del panorama laboral. Y la industria eléctrica no es una excepción. Desde la implementación de redes eléctricas inteligentes y el almacenamiento de energía a gran escala, hasta la electrificación de procesos industriales y la integración de Internet de las Cosas (IoT), estas tecnologías están redefiniendo la forma en que se genera, transmite y consume la energía.   En este post te compartimos diez tecnologías que está moldeando el futuro de la industria eléctrica, y que abren nuevas oportunidades para la eficiencia energética y la mitigación del cambio climático. ¡Vamos a ello!  Innovaciones tecnológicas en la industria eléctrica  Redes eléctricas inteligentes (Smart Grids)  Las Redes Eléctricas Inteligentes (Smart Grids) son sistemas de distribución eléctrica avanzados que integran tecnologías de comunicación, control y gestión de datos para mejorar la eficiencia, la confiabilidad y la sostenibilidad de la red eléctrica. Estas redes permiten la bidireccionalidad del flujo de energía, la integración de fuentes de energía renovable, la gestión eficiente de la demanda y la detección temprana de fallos, lo que mejora la fiabilidad y la eficiencia del sistema eléctrico.  Almacenamiento de energía a gran escala  El desarrollo de tecnologías de almacenamiento de energía, como baterías de iones de litio, sistemas de almacenamiento térmico y almacenamiento hidroeléctrico bombeado, está transformando la forma en que se gestiona la energía en la industria. Estas soluciones permiten almacenar energía durante períodos de baja demanda para su uso posterior.  De esta forma, se puede equilibrar la oferta y la demanda, a la vez que ayuda a mejorar la estabilidad del sistema eléctrico.  Electrificación de procesos industriales  El uso de tecnologías como la electrólisis, la electrificación del transporte y la calefacción eléctrica, reduce la dependencia de combustibles fósiles y disminuye las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto contribuye a la descarbonización de la industria y a la transición hacia un sistema eléctrico más sostenible.  Integración de Internet de las Cosas (IoT) y análisis de datos  La adopción de sensores inteligentes y dispositivos conectados en equipos y maquinaria industrial permite recopilar datos en tiempo real sobre el rendimiento, la eficiencia y el estado de los activos eléctricos. En este sentido, el análisis de estos datos a través de técnicas de inteligencia artificial y aprendizaje automático permite optimizar el mantenimiento, prevenir fallos y mejorar la eficiencia operativa.  Microgrids y sistemas de generación distribuida  Los microgrids son redes eléctricas locales que pueden operar de forma independiente o conectarse a la red eléctrica principal. Utilizan fuentes de energía distribuida, como paneles solares, turbinas eólicas y sistemas de cogeneración, para proporcionar energía de manera más resiliente y sostenible a comunidades, instalaciones industriales y campus universitarios.  Electrificación del transporte  La adopción de vehículos eléctricos está creciendo rápidamente en todo el mundo. De esta forma, se impulsa la demanda de infraestructura de carga y sistemas de gestión de energía inteligentes. La electrificación del transporte no solo reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también brinda nuevas oportunidades de integración entre el sector eléctrico y el transporte.  Tecnologías de generación de energía renovable avanzadas  La continua innovación en tecnologías de energía renovable, como la energía solar fotovoltaica de concentración, la energía eólica y la energía geotérmica de alta temperatura, aumenta la capacidad de generar electricidad a partir de fuentes limpias y renovables.  Blockchain para transacciones energéticas  La tecnología blockchain se utiliza para facilitar transacciones energéticas descentralizadas, como el intercambio de energía entre consumidores y productores a través de redes peer-to-peer. Esto puede permitir una mayor participación de los consumidores en el mercado eléctrico, así como una mayor transparencia y eficiencia en la gestión de la energía.  Robots y drones para inspección de líneas eléctricas  Los robots y drones pueden realizar inspecciones visuales y térmicas de manera remota, lo que reduce la necesidad de enviar personal a zonas de alto riesgo. Pueden identificar daños, defectos o irregularidades en las líneas eléctricas de forma rápida y precisa.   Monitoreo remoto para detección de fallas en tiempo real  Mediante sistemas de monitoreo en tiempo real, se pueden detectar anomalías como sobrecargas, cortocircuitos o fluctuaciones de voltaje en la red eléctrica. Esto permite tomar acciones preventivas antes de que ocurran fallas mayores. De esta forma, disminuyen los tiempos de inactividad y mejora la seguridad.  Importancia de la innovación tecnológica en la industria eléctrica  Sin dudas, la innovación tecnológica está transformando la forma en que se llevan a cabo las operaciones en el sector eléctrico. Esto se traduce en una mayor eficiencia y mejor seguridad de los trabajadores, sobre todo los que trabajan con alta tensión. En concreto, así impactan estas innovaciones en la seguridad laboral:   Reducción de riesgos en trabajos de campo: las tecnologías como los robots y drones permiten realizar tareas de inspección y mantenimiento en áreas de alto riesgo de manera remota. Así se evita la exposición directa de los trabajadores a peligros eléctricos y ambientales.  Mayor eficiencia operativa: la implementación de redes eléctricas inteligentes y tecnologías de gestión de datos optimiza las operaciones y reduce la necesidad de intervenciones manuales en el sistema eléctrico. Esto no solo mejora la eficiencia, sino que también reduce la exposición de los trabajadores a condiciones peligrosas.  Capacitación y supervisión mejoradas: las nuevas tecnologías permiten una capacitación más efectiva y un monitoreo en tiempo real del trabajo de los empleados. Los sistemas de realidad virtual y aumentada, por ejemplo, pueden simular entornos de trabajo peligrosos para proporcionar una capacitación segura y efectiva.  Mejora en el diseño de equipos de protección personal: a medida que la tecnología avanza, también lo hacen los equipos de protección personal. Están siendo diseñados con materiales más avanzados y sensores integrados para alertar a los trabajadores sobre peligros inminentes.  Automatización de tareas peligrosas: la automatización de tareas peligrosas, como el corte de energía en caso de fallas o el restablecimiento de equipos, reduce la exposición de los trabajadores del sector industrial a riesgos eléctricos y mecánicos.  ¿Quieres aprender más en materia de salud laboral en el sector eléctrico? Precisamente en esto se centra el Curso de Prevención de Riesgos Laborales en Electricidad. ¡Lee más en Euroinnova!  Otras formaciones que pueden interesarte  Curso de Fundamentos Básicos de Electricidad  Técnico en Instalaciones Domóticas  Además, te recomendamos este post sobre las diferencias entre electricidad y electrónica. ¿Las conoces?  ...

Leer más
Trabajo en alta tensión: rigor y precaución van de la mano

Trabajo en alta tensión: rigor y precaución van de la mano

Trabajo en alta tensión: rigor y precaución van de la mano La alta tensión es un componente fundamental de las redes eléctricas modernas. Se trata de un nivel de voltaje significativamente alto que se utiliza para transportar grandes cantidades de energía eléctrica a largas distancias. Precisamente, esta carga elevada hace que el trabajo en alta tensión sea muy delicado y requiera precauciones especiales.  Por ello, el personal que trabaja en entornos de alta tensión debe estar capacitado y seguir estrictos protocolos de seguridad para minimizar el riesgo de accidentes y lesiones. ¿Quieres saber más sobre los desafíos y responsabilidades del trabajo en alta tensión? ¡Sigue leyendo!  ¿Cómo se genera la alta tensión?  La alta tensión se genera en subestaciones eléctricas y se utiliza en las redes de transmisión de energía eléctrica para transportar electricidad desde las plantas generadoras hasta los centros de distribución y, eventualmente, a los consumidores finales.  El proceso de generación de electricidad en alta tensión implica dos etapas principales: la elevación del voltaje en la planta generadora y la regulación del voltaje en las subestaciones de transmisión.  En la planta generadora, la electricidad se produce inicialmente a un voltaje relativamente bajo, que puede ser de unos pocos kilovoltios. Luego, esta electricidad pasa a través de transformadores elevadores, que aumentan significativamente el voltaje a niveles adecuados para la transmisión a larga distancia.   Una vez elevado el voltaje, la electricidad se transmite a través de las líneas de transmisión de alta tensión hacia las subestaciones de distribución. En estas subestaciones, se utilizan transformadores reductores para disminuir el voltaje a niveles más seguros y manejables antes de ser distribuido a los consumidores finales a través de las redes de distribución de baja tensión.  ¿Qué es un elevador de tensión? Un elevador de tensión  se define como un elemento electrónico capaz de potenciar el voltaje o tensión eléctrica cuando esta viene reducida desde la línea de alimentación eléctrica. Los elevadores de tensión podemos encontrarlos de dos tipos: Manuales: estos disponen de una desventaja la cual es que si la tensión aumenta sin tener constancia de ello, puede originar serios problemas a los aparatos eléctricos conectados a la línea. Automáticos: Los elevadores automáticos se dividen en varios tipos, la diferencia entre ellos se basa en los elementos que se van a usar en la línea y de la regularidad de caídas de tensión de esta, evaluando ambos campos debemos de elegir uno u otro. Roles y responsabilidades de los trabajadores del sector de la alta tensión  Ahora bien, más allá de generar la alta tensión también es importante gestionarla para garantizar la seguridad y eficiencia de las operaciones eléctricas. De esto se encarga el personal que trabaja con alta tensión. Estas son algunas de sus responsabilidades:  Mantenimiento y reparación: los trabajadores de alta tensión son responsables de realizar el mantenimiento preventivo y correctivo en equipos eléctricos de alta tensión, como transformadores, interruptores o conductores.  Instalación de equipos: esto puede incluir la instalación de líneas de transmisión, transformadores, subestaciones y otros componentes de infraestructura eléctrica.  Identificación y corrección de fallas: los trabajadores de alta tensión deben estar capacitados para identificar y diagnosticar problemas en el sistema eléctrico, como cortocircuitos, fallas de aislamiento o sobrecargas, y tomar medidas correctivas para solucionar estos problemas de manera segura y eficiente.  Cumplimiento normativo: es necesario cumplir con todas las regulaciones y normativas de seguridad establecidas por las autoridades competentes, así como con las políticas internas de seguridad de su empresa.   Coordinación y comunicación: deben comunicarse de manera efectiva para coordinar sus actividades y garantizar un entorno de trabajo seguro.   Sin embargo, como decíamos al inicio, trabajar con alta tensión también conlleva muchos riesgos. Por ejemplo, las líneas de transmisión de alta tensión pueden ser peligrosas si no se manejan correctamente, ya que el voltaje involucrado puede representar un riesgo de descarga eléctrica para las personas y los equipos cercanos.   Además, la exposición prolongada a campos electromagnéticos generados por las líneas de alta tensión ha sido objeto de debate en relación con posibles riesgos para la salud humana.  Sobre estos riesgos profundizamos en el próximo apartado.   Riesgos de trabajar con la alta tensión  Debido a la naturaleza misma de la electricidad a niveles extremadamente altos de voltaje, el trabajo en esta área es muy peligroso. Por ejemplo:  La electricidad de alta tensión puede causar descargas eléctricas graves o incluso fatales si una persona entra en contacto con un conductor energizado.   Puede provocar arcos eléctricos, que son descargas eléctricas de alto calor y luz intensa que pueden ocurrir si se produce un cortocircuito o si se interrumpe accidentalmente un circuito.   Las líneas de alta tensión generan campos electromagnéticos que pueden representar riesgos para la salud humana si se están expuestos durante períodos prolongados.   El trabajo en entornos de alta tensión requiere usar equipos y herramientas especializadas que deben manejarse con extrema precaución. El mal uso o la manipulación incorrecta de estos equipos pueden aumentar el riesgo de accidentes y lesiones.  Muchas instalaciones de alta tensión están ubicadas en torres, postes o estructuras elevadas, lo que puede hacer que el acceso sea difícil y aumentar el riesgo de caídas u otros accidentes relacionados con la altura.  Medidas de precaución y cuidado para trabajar con alta tensión  En este punto, podemos compartirte una certeza: en el trabajo con la alta tensión, la precaución, la atención a los detalles y el cumplimiento de las medidas de seguridad es fundamental para garantizar la seguridad del personal. En este sentido, es fundamental utilizar equipos de protección personal adecuados, como guantes aislantes, gafas de seguridad, cascos y ropa resistente al fuego.  Además, es importante recibir una capacitación en seguridad eléctrica, que incluya el reconocimiento de peligros, procedimientos de trabajo seguros y técnicas de rescate en caso de emergencia. Asimismo, se deben seguir estrictamente los procedimientos operativos estándar y respetar las zonas de seguridad establecidas alrededor de equipos energizados.   Para profundizar en las medidas de cuidado para trabajar con electricidad, este Curso de Prevención de Riesgos Laborales en Electricidad puede serte útil. ¡Lee más!  Otras titulaciones que te recomendamos  Si quieres aprender más sobre el trabajo con alta tensión, te recomendamos estos cursos disponibles en Euroinnova, de forma 100% online:   Montaje de Redes Eléctricas Aéreas de Alta Tensión  Seguridad en Instalaciones de Alta Tensión  Además, te recomendamos este artículo sobre la tecnología utilizada en la electricidad industrial.  ...

Leer más
Daños derivados del trabajo

Daños derivados del trabajo: accidentes y enfermedades profesionales

Definimos daños de trabajo como cualquier patología o perjuicio físico o psicológico derivado de una actividad profesional. Tanto el Estatuto de los Trabajadores como la Ley de la Seguridad Social son documentos jurídicos que establecen directrices jurídicas que definen los diferentes tipos de daño en el trabajo, sus implicaciones y como han de actuar tanto la empresa como los trabajadores. A grandes rasgos, diferenciamos dos tipos de daños derivados del trabajo: la enfermedad profesional y el accidente laboral. En este artículo te explicamos en detalle los diferentes tipos de accidentes de trabajo que contempla la legislación, así como las enfermedades profesionales. A su vez, también te contaremos sobre aquellas dolencias que no se enmarcan explícitamente en ninguna de ambas categorías, pero que podrían perfectamente figurar como daños derivados del trabajo. Accidentes de trabajo Los accidentes de trabajo, según la legislación, abarcan diversas situaciones que pueden afectar al trabajador en el desempeño de sus funciones o en su trayecto hacia o desde el lugar de trabajo. Están contemplados los accidentes que ocurren durante el traslado al trabajo o de regreso a casa. Imagina a un empleado que sufre un accidente de tráfico mientras se dirige a su lugar de trabajo en bicicleta. Además, se incluyen los accidentes relacionados con el ejercicio de cargos sindicales, tanto durante su ejercicio como en el desplazamiento hacia o desde el lugar donde se llevan a cabo dichas funciones. Por ejemplo, un representante sindical que sufre una lesión al caerse mientras está participando en una reunión sindical. También se contemplan los accidentes derivados de tareas que, aunque no formen parte específica de la categoría laboral del trabajador, se llevan a cabo por orden del empleador o de manera espontánea en beneficio de la empresa. Podemos poner el ejemplo de un empleado de oficina que sufre una lesión mientras ayuda a mover muebles en el lugar de trabajo a petición del empleador. Los actos de salvamento y situaciones similares que tengan una conexión con el trabajo también se contemplan como accidentes laborales. Por ejemplo, un trabajador que se lesiona mientras intenta apagar un incendio en las instalaciones de la empresa. Las enfermedades que se contraen como resultado directo de la actividad laboral también entran en esta categoría, siempre y cuando se pueda demostrar que la enfermedad es exclusivamente consecuencia del trabajo realizado. Por ejemplo, un trabajador que desarrolla problemas respiratorios debido a la exposición prolongada a productos químicos en su lugar de trabajo. Asimismo, se incluyen las enfermedades preexistentes que se agravan como resultado de un accidente laboral. Por ejemplo, un empleado con problemas de espalda que sufre una lesión adicional en un accidente de trabajo, empeorando su condición preexistente. Por último, también son accidentes laborales las complicaciones derivadas de enfermedades intercurrentes que modifican las consecuencias del accidente original. Sería accidente laboral un trabajador que sufre un accidente en el trabajo y, durante su recuperación, contrae una infección hospitalaria que agrava sus lesiones y prolonga su tiempo de recuperación. Enfermedades profesionales Las enfermedades profesionales, definidas como aquellas que resultan del desempeño de un trabajo por cuenta ajena, están reguladas por un cuadro que enumera las enfermedades reconocidas y los agentes causales asociados. Este cuadro, establecido en 1978, incluye 78 enfermedades profesionales y está dividido en seis categorías según los factores desencadenantes. Las enfermedades profesionales principales se clasifican según el siguiente cuadro: Enfermedades producidas por factores químicos: Incluye aquellas enfermedades causadas por la exposición a sustancias químicas específicas en el entorno laboral. Es común en la industria, donde suelen emplearse sustancias químicas en los procesos de trabajo. Enfermedades de la piel causadas por sustancias y agentes no comprendidos en otros apartados: Esta categoría abarca afecciones cutáneas derivadas de la exposición a sustancias químicas, biológicas o físicas que afectan la piel durante el trabajo. Por ejemplo, dermatitis por contacto con ciertos productos químicos. Enfermedades producidas por la inhalación de sustancias y agentes no comprendidos en otros apartados: Se refiere a enfermedades respiratorias causadas por la exposición a partículas, humos, gases u otros agentes presentes en el ambiente laboral. Por ejemplo, neumonitis por inhalación de polvo de sílice en la construcción. Enfermedades infecciosas y parasitarias: Comprende enfermedades causadas por microorganismos patógenos presentes en el entorno laboral, como virus, bacterias, hongos o parásitos. Por ejemplo, hepatitis B contraída por personal sanitario accidentalmente durante su actividad laboral. Enfermedades producidas por agentes físicos: Esta categoría incluye afecciones provocadas por la exposición a agentes físicos como el ruido, las vibraciones, la radiación ionizante o no ionizante, entre otros. Por ejemplo, pérdida de audición por exposición continua a niveles altos de ruido en la industria. Enfermedades sistemáticas: Engloba enfermedades que afectan a múltiples sistemas del organismo y que tienen su origen en factores laborales. Por ejemplo, enfermedades autoinmunes asociadas a la exposición a determinados productos químicos en el trabajo. Para que una enfermedad sea considerada profesional, debe estar incluida en este cuadro, haber existido exposición a los agentes causantes especificados y que el trabajador desarrolle su labor en una de las ocupaciones mencionadas en el mismo. Otros daños derivados del trabajo Aun así, es importante considerar que tanto los accidentes laborales como las enfermedades profesionales no son los únicos riesgos para la salud asociados al trabajo. Existen enfermedades de origen multifactorial o inespecífico que no entran en la definición legal de enfermedad profesional. El concepto de enfermedad relacionada con el trabajo comprende estas situaciones, donde las condiciones laborales son solo uno de varios factores causales o agravantes. Por ejemplo, el acoso psicológico en el trabajo, conocido como mobbing, no se considera actualmente una enfermedad profesional en España, pero puede estar relacionado con el entorno laboral y afectar la salud del trabajador. Es posible que en el futuro se revise y amplíe la definición de enfermedad profesional para abordar casos como este. Además de las enfermedades relacionadas con el trabajo, existen otros daños para la salud derivados de condiciones laborales deficientes. El estrés laboral, la insatisfacción en el trabajo, la fatiga crónica y el envejecimiento prematuro son ejemplos de estos daños, influenciados por diversos factores ambientales y organizacionales. La comprensión de la salud laboral está evolucionando hacia una visión más holística, pues se reconoce la influencia de múltiples factores en la aparición paulatina de las enfermedades. Por ejemplo, patologías como la enfermedad isquémica cardiaca pueden atribuirse a una combinación de factores genéticos, hábitos de vida, condiciones de trabajo y otros aspectos psicosociales. Puede que te interese leer sobre ¿Qué es la calidad de vida laboral? ¿Qué es la prevención de riesgos laborales? Te proponemos una formación relacionada con la prevención de riesgos laborales Curso de prevención de riesgos laborales en construcción ...

Leer más
  • first
  • prev
  • ...
  • 1
  • 2
  • 3
  • 4
  • 5
  • ...
  • next
  • last
UNIRME AL CANAL DE TELEGRAM

ÚNETE A NUESTRO

CANAL DE TELEGRAM

¡ y descubre sus ventajas!

UNIRME AL CANAL DE TELEGRAM Telegram

¿Interesado/a en la prevención de riesgos laborales (PRL) y todo lo que conlleva dentro de la empresa? ¡Este espacio te pertenece!
En Euroinnova, hemos considerado oportuno ofrecerte un espacio en el que puedas encontrar información sobre la cultura de seguridad en el trabajo. Sin duda, es un aspecto que ya no es esencial sino imprescindible. PRL y empresas caminan de la mano para garantizar el bienestar de los empleados/as.
Si quieres conocer todas las novedades y últimas noticias sobre los riesgos psicosociales en el trabajo, los accidentes laborales más frecuentes, cómo evitarlos o cómo llevar a cabo una notificación de accidentes laborales, quédate.
La seguridad privada es quien garantiza, en muchas empresas, el bienestar de los empleados/as en su lugar de trabajo. En este sentido, los servicios de protección y vigilancia, tanto de bienes como de personas, son imprescindibles para asegurar una prevención de riesgos laborales óptima.
¡El trabajo es complementario e imprescindible! Por ello, si te interesa formarte e informarte en el sector de la PRL, seguramente también consideres imprescindible hacerlo en el de la seguridad privada. ¡Y nosotros te ayudaos con todas las novedades de seguridad privada!
El sector de la prevención de riesgos laborales crece y se desarrolla cada año. Por desgracia, cada vez es más común conocer casos de accidentes laborales y observar cómo aumentan las tasas de siniestralidad laboral en las empresas. ¿La solución? ¡El conocimiento!
Por ello, las empresas y organismos especializados en PRL trabajan cada día por dar a conocer al mundo la importancia de la prevención de riesgos laborales para crear entornos seguros para el empleado/a.
Descubrir todas las novedades en PRL te permitirá estar al día en un sector altamente competitivo, pero imprescindible en cualquier empresa.

Solicita información
Equipo docente especializado

¡Muchas gracias!

Hemos recibido correctamente tus datos. En breve nos pondremos en contacto contigo.