Curso en Crianza con Apego (Titulación Universitaria + 10 créditos ECTS)
Índice
¿Sientes un temor constante a que tu pareja y amistades cercanas no te quieran más? ¿Buscas agradar constantemente a las personas que te rodean? ¿Revisas muchas veces las interacciones de tu pareja en redes sociales? Todas estas son conductas típicas de un estilo de apego ansioso. Y aunque probablemente sea un término que ya has escuchado, en este artículo lo explicaremos de forma sencilla y clara qué es apego ansioso. ¡Vamos!
Las relaciones que generan los bebés y niños con sus cuidadores (que suelen ser sus padres y/o madres ) determinan en gran medida la forma en las que establecerán relaciones en el futuro. Para entender estas dinámicas, en el campo de la psicología se ha desarrollado la Teoría del apego, que busca comprender los vínculos emocionales que forjamos con las demás personas desde el nacimiento y cómo repercuten en la vida adulta.
La Teoría del apego, propuesta por el psicólogo John Bowlby en los años 60, sostiene que los vínculos emocionales tempranos entre los niños y sus cuidadores influyen en el desarrollo emocional y social a lo largo de la vida. Dicha relación, se empieza establecer desde el nacimiento y dentro de esta relación las personas aprenden a regular sus emociones.
De esta forma, la Teoría del apego describe cómo las personas forman y mantienen relaciones basadas en patrones de apego adquiridos durante la infancia. Para Bowlby, la figura de apego de un/a niño/a es la base emocional desde donde se atreve a explorar el mundo y regresar para buscar consuelo. En así como se experimentan por primera vez la seguridad, el afecto, la protección y la confianza. No obstante, también pueden experimentarse inseguridades, miedo o abandono.
Así, las emociones y sentimientos que se experimentan (positivos o negativos) determinan el estilo de apego que la persona desarrollará. En conclusión, la forma en que los cuidadores satisfacen las necesidades de su hijo forma un modelo de cómo el niño ve el mundo y las personas que lo habitan. Por esto, la crianza con apego seguro es un tema tan necesario hoy en día.
La teoría del apego de John Bowlby sirvió como una base para identificar 3 tipos principales de estilos de apego, sobre los que luego los psicólogos y psicólogas Ainsworth, Blehar, Waters y Wall experimentaron.
El experimento tenía como objetivo observar las respuestas de un niño/a cuando se encuentra en una situación socialmente extraña, involucrando la interacción con su cuidador, la presencia de un extraño y periodos de separación y reunión. La idea central consistía en evaluar cómo el/la niño/a utiliza a su cuidador como base segura para explorar el entorno y cómo reacciona cuando el cuidador se va y regresa.
A partir de las observaciones durante esta situación, se identificaron tres tipos principales de apego (seguro, evitativo y ansioso/ambivalente) en la década de 1970. Posteriormente, se añadió el tipo de apego desorganizado/desorientado, que estudiaron Main y Solomon.
También conocido como apego inseguro evitativo o apego evasivo. En este caso, los niños tienden a evitar o ignorar al cuidador. Pueden no mostrar angustia cuando el cuidador se va y pueden no buscar consuelo o contacto al regresar. Parecen independientes y pueden parecer indiferentes emocionalmente.
Es común cuando los cuidadores son rígidos y exigentes con el/la niño/a, y tienen conductas hostiles, de rechazo o no regulan de forma adecuada sus propias emociones.
Los niños con apego seguro se sienten cómodos explorando su entorno cuando el cuidador está presente, utilizando al cuidador como una base segura desde la cual explorar. Muestran angustia cuando el cuidador se va, pero se calman rápidamente cuando regresa.
Se alcanza mediante una interacción constante y cariñosa. En este caso, los cuidadores responden de manera sensible a las necesidades del niño, fomentan su sociabilidad y promueven que explorar su entorno.
Los niños y niñas con apego ansioso/ambivalente suelen tener conductas de protesta. Se sienten ansiosos ante la separación, pero pueden tener enojo o reaccionar de forma ambivalente ante el regreso del cuidador. Pueden mostrar ansiedad incluso cuando el cuidador está presente. Asimismo, pueden ser reacios a explorar su entorno.
En este contexto, el cuidador se presenta de manera física y emocionalmente disponible de manera irregular. Esto genera inseguridad y temor, lo que se traduce en una reticencia a explorar y a separarse del cuidador.
Este tipo de apego ansioso implica una falta coherente de estrategias para hacer frente al estrés o al miedo. Los niños con apego desorganizado o apego desorientado pueden mostrar comportamientos extraños o contradictorios al enfrentarse a situaciones estresantes. Tienen una mayor inseguridad que el resto de apegos.
El estilo de apego que se desarrolle en la infancia, ya sean apegos seguros, apegos ansiosos o apegos inseguros, influyen mucho en las relaciones que se establecen en la edad adulta. No obstante, el tipo de apego también puede cambiar con el tiempo y con las experiencias que se vivan.
Así, el estilo de apego ansioso se manifiesta en inseguridad y miedo al abandono, así como en una búsqueda de validación constante. De esta forma, aquellas personas que exhiben niveles elevados en la dimensión de ansiedad, caracterizada por una preocupación constante, manifiestan inquietud y temor hacia el rechazo y el abandono. Además, experimentan dudas respecto a su propia valía y relevancia social.
Este tipo de apego se caracteriza por la búsqueda de intimidad, de relaciones cercanas, con la particularidad de tener inseguridad hacia los demás. De ahí a que se llame también apego ambivalente. De esta forma, las personas pueden moverse entre un apego evitativo y un apego de tipo seguro también.
En el contexto de las relaciones de pareja, el apego ansioso puede generar situaciones complejas. Las personas con estas características pueden experimentar altibajos emocionales significativos, manifestando una constante necesidad de validación y afecto.
El apego ansioso se manifiesta a través de varios síntomas emocionales y conductuales, que pueden incluir:
Las personas con apego ansioso suelen buscar de manera persistente la confirmación de su valor y afecto por parte de los demás.
Experimentan un temor profundo a ser abandonados o rechazados, lo que puede llevar a la ansiedad y estrés ante la posibilidad de perder a las personas significativas en sus vidas. Esto los puede llevar a tener conductas de control.
Dedican una cantidad significativa de tiempo y energía a analizar y preocuparse por la salud de sus relaciones, a menudo interpretando las situaciones de manera negativa. Esto puede desencadenar tristeza y sufrimiento, pero también necesidad de buscar señales constantes que confirmen sus pensamientos.
Pueden volverse emocionalmente dependientes de sus parejas o seres queridos, buscando constantemente la proximidad y la atención para sentirse seguros.
Quienes tienen un estilo de apego ansioso experimentan cambios emocionales marcados, pasando de la felicidad a la ansiedad o la tristeza en respuesta a pequeños cambios en las dinámicas de relación.
Tienen problemas para establecer límites saludables en las relaciones. A menudo, desatienden sus propias necesidades para mantener lo que consideran conexión con los demás y satisfacerles.
Son propensos a interpretar de manera exagerada las señales de rechazo o desinterés, incluso cuando no están presentes.
Estos síntomas pueden variar en intensidad y manifestación en cada individuo, pero en conjunto caracterizan el patrón de apego ansioso en las relaciones interpersonales. Tener un apego seguro es clave para tener relaciones de amistad, familia o pareja sanas.
Por eso, es clave identificar estos patrones y acudir a un/a profesional de la salud mental cuando sientas que te desbordan las emociones y generan malestar en tu vida. Todos deberíamos tener la oportunidad de asistir a terapia al menos una vez en nuestra vida, pues nos dota de herramientas para cuidar nuestra salud mental.
Por otra parte, si eres un psicólogo o psiquiatra, o te encuentras estudiando, te invitamos a dar un vistazo a nuestra oferta educativa en el área de psicología. Allí encontrarás cursos como Curso entrevista diagnóstica de salud mental y Curso en crianza con apego online, que te permitirán profundizar en la Teoría del apego.
Asimismo, si eres padre o madre de familia y quieres conocer más sobre los estilos de crianza y el apego, te invitamos a conocer nuestro Curso educación infantil, crianza y apego coeducación.
Ahora que ya sabes qué es apego ansioso y los diferentes tipos de apego ansioso que existen, tanto en la infancia, como en las relaciones de pareja, es probable que quieras continuar formándote en este ámbito. ¿Te quedas a conocer algunos de los mejores cursos online en psicología de Euroinnova? ¡Te esperamos!
Bueno, S. B. (2020). Teoría del Apego en la Práctica Clínica: Revisión teórica y Recomendaciones. Revista de psicoterapia, 31(116), 169–189. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7484095
Garrido-Rojas, L. (2006). APEGO, EMOCIÓN Y REGULACIÓN EMOCIONAL. IMPLICACIONES PARA LA SALUD. Revista Latinoamericana de Psicología. https://www.redalyc.org/pdf/805/80538304.pdf
Rojas-Estapé, M. (2021). El apego 2. En Encuentra tu persona vitamina. El pódcast de Marian Rojas Estapé. https://open.spotify.com/episode/1K1qg2Quwgr8K0pNcnhABs?si=7nuuShWXQ7G3CR6CGubLZQ
Nuestra Formación
Nuestro porfolio se compone de cursos online, cursos homologados, baremables en oposiciones y formación superior de posgrado y máster.
Ver oferta formativa¡Muchas gracias!
Hemos recibido correctamente tus datos. En breve nos pondremos en contacto contigo.